El metro y tranvía de Valencia se enfrentan a una nueva crisis con la convocatoria de una huelga que amenaza con complicar la movilidad de miles de personas. Especialmente, durante las emblemáticas Fallas. Las centrales sindicales de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) han programado hasta 13 jornadas de paro en febrero y marzo, afectando eventos clave como la Crida y las populares mascletás. Esta huelga en el metro de Valencia busca visibilizar las reclamaciones de los trabajadores, quienes denuncian cambios laborales unilaterales y condiciones de trabajo precarias.
Calendario de la huelga en el metro de Valencia
La huelga en el metro de Valencia incluye paros estratégicos en fechas y horarios clave que afectarán tanto a trabajadores como a los ciudadanos. En febrero, las fechas señaladas son el 7, 12, 20, 23 y 26, con horarios que abarcan desde las primeras horas de la tarde hasta el inicio de la noche. Marzo será aún más complicado, con paros el 1, 2, 4, 7, 8, 9, 11 y 14, días especialmente relevantes debido a la gran afluencia de turistas y locales durante las Fallas.
Eventos emblemáticos como la Crida (23 de febrero) y las mascletás (2, 7, 11 y 14 de marzo), además de los tardeos y verbenas del 8 y 9 de marzo, coinciden con las jornadas de huelga. Eso podría generar serias dificultades para los desplazamientos masivos en una de las épocas más concurridas del año en Valencia.
Motivos de la huelga en el metro de Valencia
Los sindicatos detrás de la huelga en el metro de Valencia han señalado varios motivos fundamentales para esta convocatoria. En primer lugar, acusan a FGV de modificar unilateralmente las condiciones laborales de los trabajadores, vulnerando acuerdos previos. Estos cambios afectan la conciliación familiar y han eliminado la posibilidad de cubrir servicios extraordinarios con personal voluntario, como el del 1 de enero de 2025.
Además, los representantes sindicales denuncian el trato recibido tras las inundaciones del pasado 29 de octubre. Según los trabajadores, la empresa no ha convocado la comisión de investigación prometida, ni ha implementado el Plan de Autoprotección ni los planes de emergencia necesarios. También reclaman una partida presupuestaria para compensar a los empleados afectados por la riada, así como la reversión de los contratos realizados en el marco de esta emergencia.
La huelga en el metro de Valencia también pone sobre la mesa graves preocupaciones sobre la seguridad laboral. El Sindicato Independiente Ferroviario (SIF) ha solicitado la intervención de la Inspección de Trabajo para investigar las condiciones en las que opera FGV. En particular, han señalado la falta de protocolos para gestionar riesgos en áreas vulnerables, como Valencia Sud, catalogada como zona inundable.
Los sindicatos denuncian que la falta de formación, información y medios adecuados pone en riesgo la vida de los trabajadores. Estas acusaciones incluyen incumplimientos de normativas laborales, lo que ha llevado a exigir la aplicación de sanciones conforme a la legislación vigente.