San Esteban de Gormaz, un pintoresco pueblo de Soria, es un tesoro escondido que pocos turistas conocen. Situado en la comunidad autónoma de Castilla y León, este municipio cuenta con una rica historia, un patrimonio arquitectónico notable y una cultura vibrante que merece ser descubierta.
Los orígenes de San Esteban de Gormaz se remontan a tiempos prehistóricos, con evidencias de asentamientos humanos desde la Edad del Hierro. Durante la época romana, la localidad fue un cruce de caminos entre Clunia y Tiermes, y Uxama y Segontia Lanka, lo que le otorgó una importancia estratégica en la región. Posteriormente, en el siglo IX, los árabes construyeron un castillo en el lugar, conocido entonces como Castromoro, consolidando su relevancia militar.
A lo largo de los siglos, San Esteban de Gormaz fue escenario de numerosas contiendas entre musulmanes y cristianos, debido a su posición fronteriza en la línea defensiva del Duero. En 1187, la villa acogió las primeras Cortes de Castilla, reflejando su importancia política en la época. Sin embargo, a finales del siglo XIII, comenzó un lento declive que afectó su desarrollo en los siglos posteriores.
El patrimonio arquitectónico de San Esteban de Gormaz
El casco histórico de San Esteban de Gormaz, declarado conjunto histórico-artístico, alberga monumentos de gran valor. Entre ellos destaca el Castillo de San Esteban de Gormaz, una fortaleza medieval situada en lo alto de un cerro que ofrece vistas panorámicas del río Duero y los viñedos circundantes. Aunque en ruinas, el castillo conserva lienzos de muralla y un aljibe que evocan su pasado defensivo.
Otro monumento emblemático es la Iglesia de San Miguel, una de las primeras iglesias románicas de la provincia de Soria, construida a finales del siglo XI o principios del XII. Destaca por su galería porticada y capiteles decorados con motivos escultóricos de gran arcaísmo. La sencillez de su arquitectura refleja la transición del románico temprano en la región.
La Iglesia de la Virgen del Rivero, también de estilo románico y datada en el siglo XII, se ubica en un altozano, ofreciendo una estampa pintoresca del pueblo. Su portada con arquivoltas decoradas y su galería porticada son ejemplos destacados del arte románico soriano.
Cultura, tradiciones y gastronomía de este desconocido pueblo de Soria que debes visitar
San Esteban de Gormaz es conocido por sus festividades y tradiciones arraigadas. Las fiestas patronales en honor a la Virgen del Rivero y San Roque se celebran en agosto, con actividades que incluyen procesiones, danzas tradicionales y eventos culturales que reflejan la identidad de la comunidad.
La localidad forma parte de la Ruta del Vino Ribera del Duero, siendo el vino una parte esencial de su cultura y economía. Los viñedos y bodegas de la zona producen vinos de alta calidad, y es común visitar las bodegas tradicionales excavadas en roca, donde se elaboran y conservan los caldos. Además, San Esteban de Gormaz se encuentra en la Ruta de la Lana y en el Camino del Cid, rutas históricas que atraen a peregrinos y amantes de la historia.
El entorno natural de San Esteban de Gormaz es otro de sus atractivos. El río Duero atraviesa la localidad, ofreciendo paisajes ribereños ideales para el senderismo y la observación de aves. Los alrededores están salpicados de colinas y campos de cultivo que cambian de color con las estaciones, proporcionando un escenario perfecto para los amantes de la naturaleza y la fotografía.
La gastronomía de San Esteban de Gormaz es rica y variada, con platos tradicionales que deleitan el paladar. Destacan las carnes asadas, especialmente el cordero lechal, y los embutidos artesanales. Los quesos y dulces típicos también forman parte de la oferta culinaria, complementados por los vinos de la Ribera del Duero, que maridan a la perfección con la gastronomía local.