La Geoda de Pulpí es una de las mayores joyas escondidas de Andalucía. Un secreto que se escondió durante millones de años bajo tierra, hasta que fue descubierta hace poco más de 25 años en el primer pueblo de Andalucía, y desde hace cinco es accesible para todos y cada uno de nosotros. Una experiencia que ha puesto en el mapa a este pequeño rincón del litoral y se ha convertido en uno de los lugares naturales más destacados de Andalucía. La visita a la Mina Rica, que acaba con la Geoda, es un reclamo turístico que traspasa fronteras y ha acogido a visitantes de todo el mundo, y no hace más que crecer.
Se trata de una geoda de unos 8 metros de longitud por 2 metros de altura recubierta de enormes cristales de yeso, alguno de los cuales llega a medir casi dos metros. Y destaca porque su transparencia y estado de conservación la han convertido en una joya de la naturaleza., sumado a que por sus condiciones, constituye un fenómeno único a nivel mundial, dadas sus dimensiones, la perfección, tamaño y transparencia de los cristales, y sobre todo, porque se puede visitar y es accesible para todo el mundo.
La Geoda de Pulpí, una joya de la naturaleza
¿Cuánto se tarda en ver la Geoda de Pulpí?
La visita a la Geoda de Pulpí se alarga en torno a una hora y media, puesto que pese a que lo que es ver la joya de la corona es solo el final, lo que realmente sorprende es el camino hasta llegar a ella. La Mina Rica está en un gran estado de conservación y durante todo el recorrido se atraviesan cavidades que denotan como era la vida de los mineros hace décadas, así como algunas joyas escondidas de la naturaleza, como minerales únicos, o incluso otras geodas más pequeñas. Todo para acabar metiendo el cuerpo dentro de la Geoda visitable más grande del mundo.
¿Qué tiene de especial la Geoda de Pulpí?
La Geoda de Pulpí es una auténtica joya de la naturaleza que hace que todo el que la visite se quede prendado, y el motivo no es otro que lo espectacular que es. Entrar a ella es casi como estar en un lugar que no parece de la tierra. Toda la visita, atravesando kilómetros debajo de ella, hasta llegar a un lugar que no tiene comparación en el mundo, porque efectivamente, es la única de este tamaño que se puede visitar. No es la más grande del planeta, honor que ostenta una en México, pero aquella es absolutamente incompatible con el ser humano por sus condiciones climáticas. Pero en Pulpí se ha trabajado para ponerla en valor y hacerla visitable.
¿Cuánto cuesta ver la Geoda de Pulpí?
La visita tiene un precio de 22,00 € para los adultos, mientras que los menores de 8 a 16 años pagarán 10 €, y eso sí, deberán ir acompañados de un adulto y aportar un documento identificado para acreditar la edad, ya que no se permite la entrada a la mina a los menores de 8 años. También existe una tarifa Especial para jubilados, familia numerosa, discapacidad >33% reconocida y miembros de grupos >15 personas que no pueden entrar en el grupo de 15, que es de un total de 15,00 € .
¿Cuántos escalones tiene la Geoda de Pulpí?
A lo largo de la visita se bajan un total de 164 escalones, divididos entre varias zonas, algunos de ellos una escalera de caracol que si que puede ser algo más complicada, mientras que al final, justo antes de llegar al momento cumbre, hay que bajar una escalera algo más ancha. No obstante, para las de caracol, las más complicadas, existen un ascensor que pueden usar las personas con dificultades de movilidad o enfermedades cardiacas, respiratorias, etc, que evita subirlas y bajarlas, aunque el resto, mucho más cómodas, si que hay que hacerlas a pie.
¿Qué ropa llevar a la Geoda de Pulpí?
La visita a la Geoda no es de una gran dificultad, ya que no hay que arrastrarse, agacharse en exceso y reptar por el suelo, sin embargo, si que hay que bajar por los escalones y recorrer las diferentes cavidades de la mina, eso sumado a que el entorno de alrededor, pese a estar acondicionado es rural, hace que sea recomendable la ropa cómoda. Lo suyo es ir con vestimenta que permita moverse con facilidad y que no sea excesivamente dura.
¿Qué ver alrededor de Pulpí?
El entorno natural de Pulpí tiene mucho más que la Geoda, que pese a ser la joya de la corona no es lo único. Lo más destacado de cuanto podemos encontrarnos es sin duda alguna sus playas, pues a tan solo unos kilómetros de la mina tenemos San Juan de los Terreros, un pueblo costero perfecto para pasar el día en la fina arena, así como comer en alguno de sus restaurantes a escasos metros del agua. Además la visita se puede tornar en cultural con su Castillo del siglo XVIII, desde el que se puede ver toda la bahía.