Enclavado en la comarca de la Axarquía, en la provincia de Málaga, se encuentra Frigiliana. Un pintoresco pueblo blanco que, a pesar de su innegable belleza, a menudo pasa desapercibido en las recomendaciones turísticas. Con sus calles empedradas, casas encaladas y una rica herencia cultural, Frigiliana se erige como uno de los destinos más encantadores de España. El pueblo de Málaga que tienes que descubrir sí o sí.
Los orígenes de Frigiliana se remontan a épocas prehistóricas, con hallazgos en la Cueva de los Murciélagos que evidencian asentamientos humanos desde el Neolítico. Posteriormente, fenicios y romanos dejaron su impronta en la región, siendo los romanos quienes bautizaron el lugar como “Frexinius ana”, que significa “cortijo de Frexinius”, derivando en el nombre actual del pueblo.
Sin embargo, fue durante el periodo árabe cuando Frigiliana adquirió gran parte de su fisonomía actual. El casco antiguo, conocido como Barribarto, es un laberinto de callejuelas estrechas y empinadas que reflejan la arquitectura morisca-mudéjar, considerado uno de los mejor conservados de la provincia de Málaga.
Patrimonio y lugares de interés en Frigiliana, el pueblo de Málaga que estás obligado a descubrir
Uno de los emblemas más destacados de Frigiliana es el Palacio de los Condes, también conocido como “El Ingenio”. Construido en el siglo XVI sobre los restos de un antiguo castillo árabe, este edificio de estilo renacentista alberga la única fábrica de miel de caña de Europa, un producto emblemático de la localidad.
La Iglesia de San Antonio de Padua, edificada en 1676, es otro de los monumentos imprescindibles. Su fachada blanca y su campanario destacan en el entramado urbano, ofreciendo un remanso de paz en pleno corazón del pueblo.
Pasear por la Calle Real es adentrarse en el alma de Frigiliana. Esta vía principal, repleta de tiendas de artesanía y restaurantes, permite al visitante sumergirse en la vida cotidiana del pueblo, disfrutando de sus rincones llenos de encanto y de las tradicionales casas blancas adornadas con flores.
¿Por qué se la conoce como la Villa de las Tres Culturas?
Frigiliana es conocida como la “Villa de las Tres Culturas”, en referencia a la convivencia histórica de las comunidades cristiana, musulmana y judía en la región. Cada año, a finales de agosto, se celebra el Festival de las Tres Culturas, un evento que rinde homenaje a este legado multicultural a través de música, gastronomía y diversas actividades que atraen a visitantes de todas partes.
Rodeado por el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama, Frigiliana es un paraíso para los amantes del senderismo y la naturaleza. Las rutas que parten desde el pueblo ofrecen vistas panorámicas del Mediterráneo y de los paisajes montañosos, permitiendo al visitante conectar con la flora y fauna autóctonas.
La gastronomía de Frigiliana es un reflejo de su rica historia y de la fusión de culturas que han habitado la región. Platos como el choto al ajillo (cabrito en salsa de ajo), la arropía (dulce elaborado con miel de caña) y las migas son algunas de las delicias que el visitante no debe dejar de probar. Además, la miel de caña producida en “El Ingenio” es un producto estrella que se utiliza en diversas recetas locales.