Donald Trump regresó este lunes a la Casa Blanca en medio de una expectación planetaria y todo el mundo preguntándose cómo será la segunda presidencia del presidente más atípico de la historia reciente de Estados Unidos.
Las mujeres son uno de los colectivos que con más interés espera despejar la incógnita de qué hará Trump con el poder que le ha confiado el pueblo estadounidense. Artículo14 quiso conocer cómo perciben dos de ellas el inminente comienzo de su mandato desde Florida, un estado que el trumpismo ha convertido en uno de sus bastiones.
La figura de Trump deja a pocos indiferente. La mayoría o lo ama o lo detesta. Y eso es lo que sucede en los casos de Loretta Giommoni y Tere Chueca, dos inmigrantes nacionalizadas estadounidenses que tienen visiones totalmente opuestas del presidente.
La de Chueca y la de Giommoni son dos miradas diferentes, pero ambas han seguido este lunes la ceremonia de juramentación del presidente, ya que puede marcar sus vidas y las de millones de sus compatriotas.
"Siempre ha sabido solucionar problemas"
En Delray Beach, Tere Chueca cree que “Trump es un empresario y un hombre práctico que siempre ha sabido solucionar los problemas, sin importarle con quién tenía que hacerlo”. Chueca destaca que “si uno mira a sus hijos, se da cuenta de que siempre se han dedicado a estudiar o a trabajar”, lo que considera un ejemplo de rectitud en una era de decadencia.
Chueca, de 78 años, lleva 46 viviendo en Estados Unidos, adonde llegó desde su Perú natal, pero cree que ahora “hay muchos inmigrantes que llegan y abusan de este país” y espera que Trump ponga fin a eso.
Chueca no tiene dudas de que las cosas solo pueden mejorar con el nuevo presidente. “Los últimos cuatro años han sido un chiste”, dice, y culpa directamente a Joe Biden y su vicepresidenta: “Kamala Harris era la encargada de manejar la inmigración y mire lo que ha sucedido”.
Añora la época en la que “Estados Unidos era el país al que todo el mundo quería venir” y ve con pesar “lo que pasa en San Francisco, en Nueva York y otras ciudades con toda esa gente viviendo en la calle y tantos lugares a los que no se puede ir”. Ella espera que la segunda era Trump sea una de prosperidad y esplendor para el país del que ya forma parte.
"Tiene todo lo que aborrezco en un hombre”
Loretta Giommoni, inmigrante nacionalizada estadounidense, explica a Artículo14 que el presidente Donald Trump “tiene todas las características que aborrezco en un hombre”. Desde su casa en la idílica ciudad de Weston, indicó que ella lo ve como “un acosador misógino” y alguien responsable de que “hayamos retrocedido cincuenta años en los derechos de las mujeres y que hayamos perdido la capacidad de decidir sobre nuestros cuerpos”.
Para ella, con el nuevo mandato de Trump “Estados Unidos está entrando en territorio inexplorado”. Su duda es si el mandatario será capaz de llevar a la práctica sus planteamientos. “Habla de quedarse con Groenlandia, con el Canal de Panamá, de rebajar la inflación… La pregunta es si será todo de farol o si va en serio”.
Ella se declara “muy preocupada” por el futuro del país en el que crecen sus cinco nietos y cree que Trump “bajará los impuestos a los más ricos, lo que hará daño a la clase media, que en realidad es la columna vertebral del país”.
Giommoni no tiene claro cuál será el alcance de algunas de las medidas económicas que parecen avecinarse con Trump, como la imposición de aranceles a las importaciones chinas, pero sostiene que “Biden venía haciendo un buen trabajo en la contención de la inflación; veremos cómo lo hace Trump ahora”.
Giommoni, sin embargo, ve con tanta preocupación lo que se avecina que dice que contemplaría dejar un país que ya es el suyo. Pero hay una poderosa razón que la detiene. “He pensado en irme a vivir a España o a algún otro país europeo, pero ahora tengo a toda mi familia y a mis nietos en Estados Unidos. Ya no puedo hacerlo”.