La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha dejado clara cuál es su línea roja en relación al salario mínimo interprofesional (SMI) antes de comenzar la negociación con los agentes sociales. El SMI para el año 2025 subirá como mínimo, lo que aumente el Índice de Precios al Consumidor (IPC) este año para garantizar que no se pierde poder adquisitivo. Además, tendrá carácter retroactivo a partir del 1 de enero, aunque la negociación pueda prolongarse más allá del mes de diciembre.
Con esta carta de Trabajo sobre la mesa, el SMI subirá, al menos, un 2,8% en 2025. Esto equivale a 32 euros (31,75), lo que elevará la retribución mensual en 14 pagas a 1.165,75 euros. Aún faltan dos meses para que cierre el año y, por tanto, no se conoce el dato oficial del IPC, pero los expertos coinciden en una previsión de IPC anual del 2,8% para 2024. Así se desprende del panel de previsiones de Funcas del mes de noviembre, que recoge las aportaciones de diferentes expertos. Según estas estimaciones, la subida de los precios oscila entre un máximo del 3% y un mínimo del 2,6%. En el caso de CEOE, la previsión es del 2,7%.
Revalorización
Yolanda Díaz manifestó cuál es la intención del Gobierno, tras recibir a la Comisión Asesora para el Análisis del SMI de 2025, cuya misión es determinar cuál debería ser la revalorización para garantizar la recomendación de la Carta Europea de Derechos Sociales, que estipula que el salario mínimo debe ser equivalente al 60% del salario medio neto. Según explicó, los expertos, entre los que se encuentran académicos, profesores y catedráticos, realizarán este análisis de forma independiente.
Además, de analizar la revalorización del SMI, Trabajo les ha pedido una propuesta para introducir un cambio en el Estatuto de los Trabajadores que permita que las subidas salariales se hagan de manera automática y que no dependan de los gobiernos. Esta es la sexta vez que la ministra convoca a estos expertos. "La subida del SMI sirve para impulsar la subida salarial de los sueldos del conjunto del país", subrayó Díaz.
Rangos
Aunque Yolanda Díaz ha trazado su línea roja, habrá que esperar al resultado de la negociación con los agentes sociales. Los sindicatos, a falta de consensuar su posición -se hará cuando comience el diálogo- se han posicionado en una revalorización mayor, alrededor del 6%-5%. En este contexto, cabe destacar que los salarios en convenio firmados este año recogen subidas salariales del 3,8%, y que la inflación media de los últimos 11 meses -entre diciembre de 2023 y octubre de este año- ha sido del 2,8%. Por ello, se espera que el avance del salario mínimo para 2025 supere, al menos, el incremento del IPC.
Una subida del SMI del entorno del 3% estaría por debajo de la expectativas de los sindicatos, que aspiran a equipararlo con países como Francia o Irlanda. Durante la negociación de 2024, que finalmente se cerró sin el apoyo de las patronales CEOE y Cepyme, estas apostaron por un incremento del 3%. Esta tasa representaría un incremento de 34 horas mensuales, hasta 1.168 euros mensuales. Como ya ocurrió en 2024, aunque el SMI tendrá "carácter retroactivo", es decir, se aplicará a partir del 1 de enero de 2025, aunque la negociación se prolongue más allá de diciembre.
Mediana salarial
La ministra recordó que la mediana salarial en España está en 22.383 euros al año, por lo que hay "mucho recorrido y margen para converger con las medias salariales europeas" y defendió el SMI como herramienta para combatir "la pobreza laboral". "Lo que arrancamos hoy es mucho más que dar una cifra, es un proyecto de país. Queremos un proyecto de país que modernice nuestras estructuras sociales, pero en el que tengamos salarios dignos", ha destacado Díaz, según informa Europa Press.
Vamos a volver a subir el SMI para proteger a las familias y personas trabajadoras. Vamos a modernizar nuestro país.
Hay mucha vida detrás de los números. pic.twitter.com/C9fNrQJIjv
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) November 26, 2024
Díaz defendió que el aumento del salario mínimo en los últimos está permitiendo que los trabajadores que perciben el SMI estén cobrando 5.573 euros más al año y que se haya reducido un 25% la distancia retributiva entre hombres y mujeres. "Esto son datos concretos y evidencias científicas. Por tanto, es la herramienta fundamental para reducir la desigualdad", recalcó, al tiempo que señaló que estas subidas progresivas, que han llevado al SMI a revalorizarse un 54% desde 2017, han tenido impacto sobre todo entre los colectivos "más vulnerables": jóvenes y mujeres.