La reducción de la jornada laboral ha vuelto a situarse en el centro del debate en España. Con el anuncio reciente de Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, se ha abierto la puerta a un cambio significativo en el mercado laboral. Para el 31 de diciembre de 2025, toda la población asalariada verá una disminución en su horario de trabajo. Esta medida afectará a más de 12 millones de trabajadores. Y se traducirá en una reducción de la jornada laboral de dos horas y media semanales.
El compromiso de Yolanda Díaz ha sido claro. Durante una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra aseguró que esta reducción de jornada se llevará a cabo mediante un anteproyecto de ley en trámite de urgencia, con el objetivo de agilizar su implementación. La medida forma parte de un ambicioso plan del Gobierno para mejorar los derechos laborales y, al mismo tiempo, aumentar la productividad empresarial.
¿Por qué se está impulsando la reducción de la jornada laboral?
En los últimos años, la reducción de la jornada laboral se ha convertido en un tema recurrente en el ámbito laboral, tanto en España como en otros países. La necesidad de equilibrar la vida laboral y personal, así como el impacto del estrés y el agotamiento en la productividad de los empleados, han sido factores clave para poner en marcha iniciativas de este tipo.
Yolanda Díaz ha subrayado la importancia de mejorar la calidad de vida de los trabajadores. Según sus declaraciones, “todos los trabajadores deben tener idénticos derechos”. Sin importar el sector en el que se encuentren. Esta política busca mejorar el bienestar de los empleados sin comprometer la competitividad empresarial. Incluso potenciarla. A fin de cuentas, menos horas trabajadas pueden derivar en una mayor productividad.
La idea no es nueva. Países como Islandia, Japón y algunos estados de Estados Unidos ya han comenzado a experimentar con la reducción de la jornada laboral. Los estudios realizados hasta la fecha muestran que los trabajadores no solo están más satisfechos, sino que también son más eficientes cuando tienen más tiempo para descansar y recargar energías.
¿Cómo se llevará a cabo la implementación?
El plan de reducción de la jornada laboral en España debe tener el respaldo de una serie de mesas de diálogo social en las que participan el Gobierno, la patronal y los sindicatos. Aunque Yolanda Díaz ha preferido no hacer públicas las negociaciones, sí ha afirmado que existe un acuerdo amplio y sólido entre todas las partes para llevar a cabo esta reforma.
Uno de los principales desafíos que enfrenta esta medida es su implementación en las pequeñas y medianas empresas (PYMES). Especialmente, en las llamadas ‘nanoempresas’, donde la capacidad de adaptación puede ser más limitada. Para afrontar esta situación, el Gobierno ha propuesto un plan de acompañamiento a las pequeñas empresas, con bonificaciones y medidas específicas para garantizar que estas puedan adaptarse a la nueva jornada laboral sin dificultades económicas.
Por otro lado, se prevé que la reducción de la jornada laboral tenga un impacto positivo en la conciliación de la vida personal y laboral. Algo que es cada vez más demandado por los trabajadores. Esta medida también podría influir en la creación de empleo. A fin de cuentas, obligará a algunas empresas a contratar más personal para cubrir las horas que ya no serán trabajadas por sus empleados actuales.