El grupo de cosmética Puig avanza en su salida a bolsa y por su capitalización bursátil será un firme candidato a entrar el Ibex 35. Como próxima gran cotizada, y una vez formalice su entrada en el selectivo, Puig deberá cumplir con la futura Ley de Paridad, aún en tramitación parlamentaria, que obligará a las 35 mayores compañías por capitalización bursátil a contar con, al menos, un 40% de mujeres en su consejo de administración a partir del 30 junio de este año.
Según el calendario previsto, debutará en el parqué el próximo 3 de mayo, en una banda de precios de entre 22 y 24,50 euros, lo que situará el valor de la compañía entre los 12.700 y 13.900 millones de euros, tal y como recoge el folleto autorizado ayer por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Hace una semana, trascendió la remodelación de su máximo órgano de gobierno con la incorporación de dos nuevas consejeras independientes: María Dolores Dancausa, presidenta no ejecutiva de Bankinter, y Tina Müller, actual consejera delegada de la firma de cosmética ecológica Weleda AG. Un año antes, se sumaron como consejeras Ángeles García-Poveda y Christine A.Mei, de forma que ahora la representatividad se sitúa en el 30,7%, con cuatro mujeres en un órgano constituido por 13 miembros.
En este sentido, según reconoce en el folleto de Puig, “el consejo de administración considerará en el futuro las modificaciones necesarias en la composición del mismo e informará sobre el cumplimiento de esta recomendación en su primer informe anual de gobierno corporativo como sociedad cotizada” [en alusión al citado 40%, que al día de hoy recogen las recomendaciones de la CNMV, dado que la futura Ley de Paridad aún no ha sido aprobada].
Según el texto de este proyecto de ley remitido al Congreso de los Diputados, la obligación de paridad “será de aplicación a partir del 30 de junio de 2024 para las 35 sociedades con mayor valor de capitalización bursátil, determinada utilizando la cotización de cierre en el día en que la presente ley orgánica entre en vigor”.
“Para aquellas sociedades cotizadas que tengan una capitalización bursátil, determinada utilizando la cotización de cierre en el día en que la presente ley orgánica entre en vigor, superior a los 500 millones de euros, lo dispuesto en dicho artículo será de aplicación a partir del 30 de junio de 2025”, añade el citado proyecto normativo.
Empresa familiar
Aunque la oferta de acciones dirigida exclusivamente a inversores institucionales podrá llegar hasta los 3.000 millones de euros, Puig seguirá siendo una empresa contralada por la familia que le da nombre. Tras la oferta, a través de Exea Empresarial (sociedad patrimonial familiar), mantendrá el control de alrededor del 75% del capital.
La oferta se ha estructurado en dos bloques. En la oferta primaria la empresa ofrece un número de acciones con la que espera obtener unos ingresos brutos de aproximadamente 1.250 millones de euros, al tiempo que el accionista mayoritario de la sociedad, Puig, S.L., controlado por Exea ofrece un número de acciones de la oferta secundaria para obtener unos ingresos brutos de aproximadamente 1.360 millones de euros.
Además, Puig S.L., el accionista vendedor, concederá a Goldman Sachs Bank Europe SE, actuando como agente de estabilización, una opción de compra, en nombre de los ‘managers’, de acciones de sobre-adjudicación de aproximadamente hasta el 15% del tamaño de la oferta base por un importe máximo de 390 millones de euros. El proceso de ‘book-building’ comienza el 19 de abril y se espera que concluya el 30 de este mismo mes.
Crecimiento
En el último ejercicio, Puig obtuvo un beneficio neto de 465 millones de euros, un 16% más en relación al año anterior, y registró una facturación de 4.304 millones de euros, tras crecer un 19%. El centro del negocio se sustenta en lo que la compañía define como `Premium Love Brands´, que en 2023 aportaron el 95,3% de sus ingresos.
Esta cartera está formada por 17 marcas globales de diez países diferentes, entre la que destacan Rabane, marca cuya licencia se firmó en 1968 y que ahora aporta unos ingresos de mil millones, Carolina Herrera y la recién adquirida Charlotte Tilbury, que también aspiran, cada una de ellas, a alcanzar este volumen.
Desde 2011, la compañía ha invertido más de 2.500 millones de euros en fusiones y adquisiciones, como las de las marcas Jean Paul Gaultier, Dries Van Noten, Charlotte Tilbury o, este año, Dra. Barbara Sturm,
Puig nació en 1914 de la mano de Antonio Puig, como una empresa familiar centrada en el sector de la cosmética y las fragancias. En 1950 se incorporaron al negocio sus hijos, Antonio, Mariano, José María y Enrique.
Hoy, es la tercera generación quien está al frente con dos miembros de la familia liderando un consejo de administración al que se han incorporado once consejeros independientes. Marc Puig, en calidad de presidente y el consejero delegado del consejo de administración, y Manuel Puig, como vicepresidente, son la cabeza visible de la familia.