Pocas cosas han crecido en los los últimos años más que el precio de la gasolina, el cuál no no ha hecho más que subir, lo que ha llevado a los conductores a buscar alternativas que les permitan ahorrar, aunque sea unos céntimos, en el momento del repostaje, buscando que el mero hecho de sacar el coche no fuera en sí mismo un golpe a la línea de flotación de la economía mensual. Pero más allá de eso, hay diversas maneras de evitarlo y conseguir salvar un poco una situación que no es nada fácil. Y que realmente se trata de poner en práctica algunos consejos básicos para que el precio del combustible no sea un problema y el que se use rinda mucho más.
Hay algunos trucos que la gente no sabe, y que tienen que ver, por ejemplo, con saber la hora a la que se reposta, y es que eso puede ser un cambio drástico, debido a que el simple hecho de repostar antes de las 10 de la mañana se puede traducir en un ahorro significativo al final de cada mes. Parece algo exteraño e inesperado, pero tiene una explicación que vamos a analizar a continuación.
La clave para ahorrar al repostar: mirar la hora a la que lo hacemos
El secreto para ahorrar el momento repostaje es la hora. Y esto se debe a que repostar antes de las 10:00 de la mañana es mucho más eficiente que hacerlo a cualquier otra hora del día, sobre todo debido a la densidad de la gasolina y la temperatura en general. Esto varía un poco según en que parte de España nos encontremos, pero es que la temperatura tiene un efecto importante sobre la densidad del combustible ya que durante la noche suelen bajar las temperaturas en comparación a otras horas del día, por lo que la gasolina también se encuentra a una temperatura mucho más fría y, por ello, es menos densa
Por este motivo, al repostar antes de esta hora se obtiene una mayor eficiencia en lo que respecta al rendimiento del combustible. Porque como el combustible es menos denso, los conductores pueden obtener más litros por la misma cantidad de dinero y volumen, pero a medida que avanza el día y las temperaturas van aumentando, y eso hace que el combustible se expanda mucho más y se pierda mucha densidad. Y como consecuencia de esto, por la misma cantidad de dinero repostado se obtiene bastante menos cantidad de combustible por litro.
La ciencia está de nuestro lado
Y una vez más, está la ciencia para explicar este fenómeno, pues la explicación detrás de esto es muy simple, y simplemente se debe a las propiedades físicas de los líquidos. Ya que cuando los líquidos se calientan se expanden y cuando se enfrían se contraen. Esto es algo que aunque pueda parecer algo superficial, en realidad podemos obtener un ahorro significativo al final de cada mes al aplicar este tipo de consejos, junto a otros trucos que nos permitirán maximizar el rendimiento de la gasolina.
Por esto mismo es clave elegir el momento correcto para repostar, porque puede marcar una gran diferencia en nuestras finanzas y más cuando nos encontramos antes precios de mercados sumamente volátiles como los actuales. Ya que estos precios cambian constantemente y prácticamente lo único que han hecho es aumentar en los últimos años y meses, y no tiene visos de que vayan a dejar de hacerlo, por lo que deberíamos estar pendientes de cualquier posibilidad de ahorrar un poco más.