Marta Echarri, directiva de banca con más de 20 años de experiencia en el sector, mira ahora al emprendimiento con dos nuevos proyectos: Muse Movement, un espacio creativo y de desarrollo personal que se define en Instagram como una “comunidad para el bienestar integral en Madrid”; y KiriApp, una experiencia regalo que ofrece cuentas de inversión para niños ligadas a la educación financiera y al hábito del ahorro y la inversión.
Sin embargo, antes de lanzar estos dos proyectos Echarri se ha desempeñado en banca y en banca de inversión en entidades como Merrill Lynch, UBS y JP Morgan y más recientemente en la dirección general de N26 para España y Portugal y como consejera delegada en Western Union, donde fue responsable de Banca Digital para Europa.
Esta emprendedora, que también es consejera en la gestora de capital 100% digital Crescenta, afirma que sigue formándose, ya que la educación le parece “clave” y también imparte clases en ISDI, IE, y Advantere sobre Fintech y Liderazgo. Además es patrona de la Fundación Quiero Trabajo, que ayuda a mujeres en paro a afrontar con éxito la búsqueda de empleo.
En Artículo14, analizamos con Echarri su trayectoria y su visión sobre el liderazgo femenino.
– ¿Cuál ha sido la decisión más difícil en su carrera profesional?
Renunciar a mi último puesto en el mundo corporativo. Después de 21 años trabajando para grandes multinacionales, decidí que quería dar un giro a mi carrera profesional, y tomarme un respiro para pensar con claridad mis siguientes pasos.
Ahora, disfruto de gestionar mi propia agenda. Ser emprendedora tiene sus días, ¡pero la misión de divulgar la educación financiera, a través de KiriApp me hace levantarme muy contenta cada día!
– ¿Cuál es el consejo que más ignoró al inicio de su carrera y cuál fue la consecuencia? Y ¿cuál fue el más útil?
El más útil: en banca, aprende a descartar las áreas de negocio que no te gustan. Esto te ayudará a entender las que sí te gustan. Mi trayectoria profesional ha estado marcada por ese “descarte” que me llevó a banca digital, que es sin duda en la que volvería a repetir sin dudarlo.
– ¿Cuándo dejó de sentir que ya no tenía algo que demostrar y empezó a disfrutar del éxito profesional?
Siempre he tenido afán de superación. Desafortunadamente, siempre pienso que sigo teniendo que demostrar, a lo mejor no al mundo, pero a mí misma.
– ¿Qué mito sobre el liderazgo femenino le gustaría desterrar para siempre?
Que somos más agresivas como jefas. Para mi hubo un antes y un después de N26, donde entendí el liderazgo por influencia y olvidé el liderazgo por autoridad. Me relajé, me rodeé de un equipo inmejorable, y comencé a disfrutar del día a día con una actitud más tranquila y sencilla.
– ¿Qué hábito o ritual sigue para mantener la creatividad y la claridad mental en su día a día?
Salir a caminar me suele ordenar las ideas.
– Un error profesional del que aprendió una lección valiosa
Cuando surge una oportunidad de cambio a otra compañía es muy importante estudiarla a fondo y conocer al máximo de lo posible su cultura, sus procedimientos y el ambiente en que te vas a desenvolver. De esta forma evitarás sorpresas no deseadas.
– Si el éxito profesional fuera un deporte, ¿qué tipo de entrenamiento recomendaría para jugarlo bien?
Entrenar para una maratón, ¡pero en grupo!
– Un imprescindible en el bolso
El iPhone, actualmente una herramienta de trabajo imprescindible.
– Su cita o frase vital
Somos lo que hacemos cada día, de modo que la excelencia no es un acto, sino un hábito.