Cuando llega julio, las profesoras se van de vacaciones sin nómina. Una práctica habitual en el ámbito educativo es dar de baja a sus trabajadores durante los dos meses no escolares y recuperarlos con la vuelta al cole. La consecuencia: el sector de la educación perdió 122.551 afiliados por el fin del curso escolar en el mes de julio y provocó que a pesar del tirón del empleo en plena temporada turística se perdieran en dicho mes 9.783 cotizantes en términos globales.
Educación es un sector feminizado por lo que ellas son más afectadas por una práctica, sobre la que según ha explicado Trabajo tienen puesta la lupa. Para el Gobierno, no existe ninguna situación “anormal” en relación al uso de contratos fijos discontinuos en este sector. No obstante, el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, afirmó que la Inspección de Trabajo está vigilando y vigilará en la reanudación del curso académico este tipo de modalidad contractual en los trabajadores de esta rama.
“La Inspección de Trabajo está revisando y lo lleva haciendo desde hace meses, concretamente estos usos que podrían ser desviados, en su caso, de este tipo de contrataciones. Las campañas de fijos discontinuos ya han dado algunos resultados, 43.000 contratos transformados en general, 8.000 de ellos transformados en fijos ordinarios en el ámbito de la educación. Y, naturalmente, también vigilará la reanudación del curso académico para comprobar si hay discriminaciones o tratos injustificados “,detalló.
Empleo femenino
Y esta pérdida de afiliados tuvo principalmente un carácter femenino, ya que en conjunto en todos los sectores, la afiliación media entre mujeres retrocedió en 62.356 ocupadas, lo que supone un 0,6% menos frente al mes anterior, mientras que entre los varones la afiliación subió en un 0,4%, hasta 52.573 afiliados.
De esta manera, aunque se mantiene por encima de los diez millones el número de mujeres ocupadas, se pierde el listón histórico de los 10,13 millones de afiliadas que se logró en el primer semestre. El mes de julio finalizó con 10.051.172 mujeres cotizantes, representando el 47,01% del conjunto de afiliados, mientras que el de hombres totalizó en 11.331.934.
Con todo, desde finales de 2019, antes de la pandemia, el empleo femenino ha crecido un 11,8%, frente al avance del 7,8% del de los varones. En términos interanuales, también crece más la afiliación de las mujeres, con un 2,7% más frente al 2% de los hombres.
A pesar de la caída de los ocupados en julio, la afiliación media sigue cercana a los 21,4 millones de afiliados (21.383.106) y en la serie diaria se llegó a superar esta cifra durante once días a lo largo del mes. Desde 2011, la afiliación media ha crecido en todos los meses de julio, menos en 2022, cuando bajó en 7.366 personas, y este año, que ha registrado un descenso algo más pronunciado, de casi 9.800 ocupados.
En detalle
Educación, agricultura y empleadas del hogar fueron los únicos sectores de actividad que registraron una caída de la ocupación. En el caso del primero, la afiliación bajó en un 10% (122.551 cotizantes). En el empleo agrícola, que se registra en el régimen especial agrario, se perdieron 39.003 ocupados, un descenso del 5,81% en tasa mensual, en tanto que el del Hogar registró una caída del 1,21%, con 4.462 bajas.
En el polo opuesto, dentro del Régimen General, las actividades sanitarias y servicios sociales protagonizaron la mayor subida, con un alza del 2,6% y 49.133 cotizantes más respecto al mes anterior. Le sigue comercio, con un crecimiento del 1,7% (44.443 ocupados más); administración pública y defensa, con un avance de 14.585 ocupados, lo que supone un 1,24% más o actividades administrativas y servicios auxiliares, con un crecimiento del 0,85% en 12.406 afiliados más.
De esta forma el Régimen General, el más numeroso del sistema, perdió 6.567 afiliados en julio (-0,04%), hasta un total de 17.933.773 ocupados y el Régimen de Autónomos (RETA) también restó 4.947 ocupados en sus filas (-0,15%), lo que sitúo el total de cotizantes por cuenta propia en 3.381.485 ocupados.
Ellas, el 60% de los parados
Por parte, el paro retrocedió en junio en ambos sexos (10.830 personas) en julio en relación al mes anterior, lo que supone un descenso del 0,42% en términos porcentuales , aunque algo más entre mujeres. En concreto, el desempleo femenino bajó un 0,42%, hasta 6.459 mujeres respecto al mes de junio, mientras que el paro masculino retrocedió en 4.371 frente al mes previo, una bajada del 0,43%.
Tras el retroceso de julio, impulsado mayormente por el sector servicios, el número total de desempleados se situó en 2.550.237 personas, su cifra más baja desde septiembre de 2008, acercándose con esta nueva bajada a la barrera de los 2,5 millones de desempleados.
Pero el paro sigue teniendo cara de mujer. Ellas sumaron 1.539.745 desempleadas, su valor más bajo desde octubre de 2008, pero que sigue representando el 60,37% del total de personas en situación de desempleo, frente a casi 40% (se queda en el 39,63%) de los varones (1.010.492 desempleados).
En el último año, el desempleo acumula un descenso del 4,77% en 127.637 personas, de las que en un 61,68% fueron mujeres. En su caso, retrocedió un 4,86% en 78.739 mujeres, frente al descenso del -4,62% del paro masculino de 48.898 hombres.