Las mujeres piden nueve de cada diez excedencias para el cuidado de los hijos

Ellas copan el 75% de los trabajos a tiempo parcial. Según el último informe de CC.OO., la igualdad salarial no se conseguirá hasta el 2042

Permiso maternidad, Economía
Una niña mira como su padre trabaja en casa.

Faltan 17 años para llegar a la igualdad salarial. Así de crudo lo explica el nuevo informe sobre brecha de género del sindicato Comisiones Obreras. Porque todavía en el siglo XXI los hombres cobran más que las mujeres desempeñando el mismo trabajo. Incluso las diferencias se han agrandado ligeramente en el 2023 de tal manera que ellos ganan de media 5.000 euros anuales más que ellas.

Si el salario medio anual entre los hombres es de 34.758 euros, el de las mujeres es de 29.615 euros. Eso significa que las nóminas de las trabajadoras tendrían que aumentar un 19,6% para conseguir la igualdad. Según la secretaria de Mujeres, Igualdad y Condiciones de Trabajo de CCOO, Carolina Vidal, “si no se aborda de manera estructural la brecha salarial, se tardarán más de dos décadas en corregir esta desigualdad”.

El informe destaca seis sectores donde las brechas se hacen más evidentes, y se agrandan hasta el 30%, son las actividades administrativas, profesionales, científicas y técnicas, sanidad y servicios sociales, comercio, actividades inmobiliarias y financieras.

“La brecha salarial es un reflejo del mercado laboral, pero hay que recordar que un volumen importante de mujeres que no forman parte del mercado laboral. Hay mujeres que ni tienen, ni buscan empleo porque tienen la tarea de cuidar a algún familiar en situación de dependencia y esto les ocupa todo su tiempo ante la falta de medios y servicios estatales. La responsabilidad estatal del cuidado de la ciudadanía se ha transferido históricamente a las mujeres, de manera especial en un país con un insuficiente Estado de Bienestar a medio desarrollar y bajo un modelo familiarista típico de la cultura mediterránea”, explica el informe.

Y el principal problema reside en la jornada parcial. Las mujeres suponen el 75% de los asalariados parciales y casi la mitad no elige esta modalidad sino que tiene empleos parciales ante la imposibilidad de encontrar trabajo a jornada completa o porque están al cuidado de terceras personas, niños, enfermos o mayores. Solo un escaso 10% de la parcialidad en el empleo de las mujeres se debe a que no quieren trabajar más horas.

No solo copan el empleo parcial sino que también son mayoría en los sectores con los salarios más bajos. “En los siete sectores con un salario medio claramente por debajo de la media nacional trabaja el 44% de las mujeres asalariadas frente al 34% de los hombres asalariados. Los siete sectores con salarios medios mensuales muy inferiores a la media son: empleo doméstico (1.014 euros), hostelería (1.456 euros), agricultura, ganadería y pesca (1.562 euros), actividades administrativas y servicios auxiliares (1.616 euros), otros servicios (cuidados personales, actividades asociativas, reparación bienes) con 1.707 euros, actividades artísticas y recreativas (1.717 euros) y comercio (1.896 euros).”

Si esas mujeres que trabajan en sectores precarios y a tiempo parcial, pasaran a jornada completa, la brecha con los hombres se reduciría del actual 19,6% al 7,1%, es decir, doce puntos porcentuales menos.

También son ellas las que se piden excedencias en los trabajos para cuidar a sus hijos. En 2023, el 87% de las excedencias por cuidado de menores correspondieron a las madres trabajadoras. “Ha habido una mejora parcial con respecto a décadas previas (en 2005-2010 en promedio el 96% de las excedencias las concentraban mujeres), pero sigue siendo una cifra que evidencia la elevada feminización de las tareas de cuidados. El patrón es similar para las excedencias por cuidado de familiares: el 75% de las excedencias son asumidas por mujeres (en 2005-2010 la tasa promedio era de 85%). La desigual inserción en el mercado laboral tiene un impacto en el salario diferido y en el salario indirecto de las mujeres. Con respecto a la prestación por desempleo, en 2024 hubo en promedio un total de 787 mil hombres beneficiarios (383 mil de prestación asistencial y 404 mil de contributiva) que percibieron en promedio 778€ mensuales, mientras que las 990 mil mujeres beneficiarias (570 mil de prestación asistencial y 429 mil de contributiva) percibieron 663€ mensuales en promedio”. Cifras que evidencian lo lejos que estamos todavía de una igualdad efectiva entre hombres y mujeres en el mercado laboral.