El consejo de administración de Banco Sabadell oficializó ayer su regreso a Cataluña. En un escueto comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), tras una reunión extraordinaria, Sabadell confirmó la aprobación del traslado de la sede social a su ciudad natal. Se trata de un golpe estratégico acordado por un órgano de administración paritario, con seis mujeres, y con un importante trasfondo político. Si bien, públicamente, todos los agentes enmarcaron la decisión en el proceso de “normalización” en Cataluña tras el ‘procés’ y después de que hayan desaparecido las circunstancias que motivaron su salida en el año 2017.
La entidad explicó que “ya no se dan las circunstancias que motivaron su traslado a Alicante”. De esta forma, Banco Sabadell se convierte en la primera gran cotizada del Ibex 35 en tomar la decisión de volver a Cataluña. Esta mudanza de la sede social supone un respaldo al socialista Salvador Illa, como presidente de la Generalitat, en plena oferta pública de adquisición (OPA) de BBVA. El movimiento eleva su componente político, lo que puede complicar la OPA.
Complica la OPA
Así lo interpreta Bestinver. Su director de Renta Variable Ibérica, Ricardo Seixa, apuntó que el traslado obedece a razones más cercanas al mundo de la política que propiamente de los mercados o los argumentos que pueda esgrimir la autoridad de competencia. De hecho, recordó que la fusión entre CaixaBank y Bankia -que se acabó produciendo- fue un caso “bastante más problemático” desde el punto de vista de competencia.
La autorización de la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) es el siguiente procedimiento a salvar de manera inmediata. Tras un extenso análisis en la Fase 1, a finales de año pasó a la Fase 2, y está pendiente el pronunciamiento del organismo que preside Cani Fernández. En este sentido, los analistas consideran improbable que los compromisos requeridos a BBVA para su aprobación frustren la operación.
Después, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tendrá que aprobar el folleto de la OPA. Será entonces cuando tengan la palabra los accionistas de Banco Sabadell. En último instancia, dependiendo del éxito de la operación, podría ser necesario el visto bueno del Ejecutivo. Cuando se lanzó la operación, quedó clara su posición contraria a la misma.
Consejo de administración
¿Quiénes son la mujeres del consejo de administración de Sabadell que ha jugado esta carta estratégica? Desde el pasado mes de abril, este órgano -presidido por Josep Oliu- cumple con la Ley de Paridad, con seis consejeras sobre un total de quince miembros. Ana Colonques García-Planas, consejera ejecutiva y directora financiera del Grupo Porcelanosa, ha sido la última en incorporarse en calidad de consejera independiente.
Junto a ella, forman parte como independientes -la primera mujer del actual consejo nombrada en 2015, Aurora Catá Sala, ingeniera industrial y MBA por IESE, con una destacada trayectoria en empresas tecnológicas y de telecomunicaciones, además de experiencia en capital riesgo. Son también vocales Mireya Giné Torrens (desde 2020), doctora en Finanzas por Harvard Business School y experta en gobierno corporativo y finanzas; Alicia Reyes Revuelta (2020), con extensa experiencia en banca de inversión y gestión de activos; y Laura González Molero (incorporada en 2022), con un perfil ligado a la industria farmacéutica y biotecnológica.
Por otro lado, María José García Beato (en la entidad desde 2018) habría jugado un papel determinante. Esta abogada del Estado, miembro en calidad “de otra externa”, es la única mujer que participa como vocal en la Comisión de Estrategia y Sostenibilidad, que está presidida por Oliu. En el pasado, García Beato ha desempeñado diversos cargos en Banco Sabadell, incluyendo directora jurídica, secretaria general y miembro del comité de dirección. Es también vocal de la Comisión de Nombramientos y Gobierno Corporativo y consejera independiente en ACS e Iberpapel.
Mensaje estratégico
Dentro de las diferentes comisiones del consejo de administración, la Comisión de Estrategia, que prácticamente cuenta con la asistencia en todas sus reuniones del consejero delegado, César González-Bueno, tiene entre sus competencias definir las actuaciones estratégicas de la entidad, como “evaluar, proponer y recomendar al consejo de administración las actuaciones de relevancia estratégica en materias de crecimiento, desarrollo, diversificación, transformación de negocio y tecnología”.
En cuanto al cambio de sede, Banco Sabadell lanzó un mensaje de tranquilidad: ni los clientes ni los profesionales de la entidad, que mantendrán sus ubicaciones actuales, verán consecuencias. Para los accionistas, el único hecho de trascendencia será el traslado de la celebración de la Junta de Accionistas, “que este año ya se hará en la ciudad de Sabadell”, aclaró la entidad.
BBVA
“Es una decisión de Banco Sabadell que respetamos. Respecto a la OPA, no cambia en nada las bondades de la operación: es buena para España, para Cataluña y para el resto de territorios donde está Banco Sabadell así como para los clientes, empleados y accionistas de ambos bancos”, señalaron fuentes de BBVA a Europa Press. Cuando en mayo de 2024 BBVA anunció su intención de comprar y fusionarse con Sabadell, subrayó que la operación implicaría contar con única sede social, en Bilbao, aunque con dos centros corporativos de decisión en Madrid y en Sant Cugat del Vallés (Barcelona).
Con esta decisión de regreso a Cataluña, Banco Sabadell ha dado un paso estratégico cuyo calado es prematuro anticipar. Entretanto, el éxito o fracaso inmediato de la operación dependerá de la respuesta de sus accionistas. En la cotización actual, la ausencia de prima para el accionista de Sabadell representa el mayor obstáculo al éxito de la OPA de BBVA.