La operadora saudí STC está a punto de controlar de forma directa el 9,97% de Telefónica, cumpliendo así las condiciones para pedir un puesto en el consejo de administración presidido por Marc Murtra a propuesta de la SEPI. El exdirectivo de Indra se enfrenta a la recomposición del máximo órgano de administración, con una dificultad añadida sobre la mesa, el cumplimiento de la Ley de Paridad, una iniciativa abanderada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
El consejo de Telefónica es hoy un rompecabezas. Además de incorporar a STC cuando formalmente lo solicite, debe contar con, al menos, un 40% de mujeres y ajustarse a las recomendaciones del supervisor de los mercados (CNMV), que establecen que la mitad de sus miembros sean independientes. Actualmente, hay una vacante pendiente de cubrir tras el fallecimiento de Javier Echenique en diciembre de 2024.
La solución fácil
La solución sencilla sería que el grupo saudí propusiera una mujer como consejera dominical en Telefónica en representación de su participación. De esta forma, si solo pidiera un asiento -con casi un 10% del capital existe la incógnita de que pudiera solicitar dos vocalías-, resolvería en un ‘2×1’ la encrucijada del consejo actual: su representatividad cubriendo la vacante de Echenique y el cumplimiento de las exigencias de la Ley de Paridad.
En el consejo de administración de STC hay dos mujeres, Rania Nashar y Sarah Al-Suhaimi. Sin embargo, a pesar de su experiencia financiera, es improbable que cualquiera de ellas sea elegida por los saudíes en Telefónica. Hasta la fecha, ninguna mujer saudí está presente en empresas participadas extranjeras de la magnitud de la operadora española.
El fondo soberano saudí Public Investment Fund (PIF), accionista mayoritario de STC, no tiene ninguna mujer en su consejo de administración, presidido por el príncipe Heredero Mohammed bin Salman bin Abdulaziz Al Saud, y diferentes ministros del emirato. En PIF, la representación femenina está muy limitada en la dirección ejecutiva. De sus doce miembros, la única mujer es Rania Nashar, jefa de la División de Cumplimiento y Gobernanza, desde 2021.
Raina Nashar
Antes de unirse al PIF, Nashar fue la CEO de Samba Financial Group (SFG), entre 2017 y 2021, convirtiéndose en la primera mujer saudí en dirigir un importante grupo bancario en el país. Desde esta posición fue incluida en la lista Forbes de las mujeres más influyentes de Oriente Medio. Licenciada en ingeniería informática y tecnología de la información por la King Saud University, completó su formación con programas de alta dirección en Estados Unidos. En la actualidad participa como miembro del consejo de administración del Saudi Tadawul Group, una compañía cotizada, además del SME Bank, entre otras.
Nashar se posiciona como un ejemplo de liderazgo inspirador para las mujeres saudíes dentro de la apuesta del país en su plan estratégico Visión 2030 por aumentar su presencia en el ámbito laboral: “Nuestro objetivo es impulsar la igualdad de género y el empoderamiento económico de las mujeres”, defendió como presidenta del grupo de trabajo Women in Business (WiB) del B20 Arabia Saudita.
Sarah Al-Suhaimi
Sarah Al-Suhaimi es desde 2021 la presidenta de Saudó Tadawul Group y ex-CEO de SNB Capital. También participa en otros ocho consejos de administración, que incluyen Lazard Saudi Arabia y Ia organización sin ánimo de lucro Financial Reporting Standars. En 2017, fue la primera mujer en presidir la Bolsa de Riad, poniendo también en valor el avance de las mujeres en posiciones de liderazgo: “Este nombramiento refleja el compromiso de Arabia Saudita con la inclusión de las mujeres en roles de liderazgo y la diversificación de nuestra economía”, señaló entonces.
Entretanto, y a la vista de que previsiblemente será un hombre el representante de STC en Telefónica, Carme Artigas emerge como una candidata en el necesario equilibrio en el consejo. Experta en Inteligencia Artificial (IA), es exsecretaria de Estado de Digitalización e IA, además de investigadora del Centro Belfer de Harvard. Otro de los nombres apuntados es Therese Jamaa, sin embargo, en su caso la relación con el ministro de Asuntos Exteriores, podría ser un elemento en contra.
Compañía estratégica
STC irrumpió de forma sorpresiva en el accionariado de Telefónica en septiembre de 2023 y desencadenó la entrada de SEPI en el accionariado como un mecanismo de control en una compañía considerada estratégica por sus vínculos en materia de defensa por el Gobierno. Tras conocerse que STC ya estará en condiciones para pedir un puesto en el consejo, la ministra de Defensa, Margarita Robles, aseguró que cualquier movimiento de la operadora saudí STC en Telefónica se realizará siempre bajo el respeto a la seguridad nacional.
“Hay un acuerdo y unas reglas clarísimas en las que en ningún caso la seguridad nacional puede verse afectada”, detalló en declaraciones a TVE. La ministra recordó que, en lo relativo a la incorporación de la compañía saudí en la española, el papel de Defensa fue “esencial y fundamental”, porque evidentemente Telefónica es clave para los servicios de comunicación de las Fuerzas Armadas.
La incógnita en la ecuación de la compleja renovación del consejo de administración de la teleco española no se despejará hasta que STC pida formalmente su incorporación y presente su propuesta. Quién sabe, tal vez haya una inesperada sorpresa.