Las camioneras, también en huelga para reivindicar la jubilación anticipada

Las mujeres representan el 2% de los conductores profesionales según la Organización del Transporte por Carretera (IRU)

Rosario Sánchez ha sido camionera viajando por toda Europa con su marido como doble conductor. Ahora tiene 37 años y tres hijos y ha cambiado de puesto para poder conciliar su vida familiar con el trabajo. En la actualidad es jefa de tráfico, es decir, marca las rutas que tienen que hacer otros conductores para optimizar la flota. Y va a secundar las jornadas de huelga del sector del transporte por carretera que han anunciado los sindicatos “porque es necesario poder jubilarse anticipadamente, es una profesión peligrosa y muy dura, mis días no eran de 24 horas sino de 30 horas, con estrés y ansiedad, conduciendo a cualquier hora del día o de la noche y siempre me tocaban turnos de madrugada. Yo, a mi edad, lo he podido sobrellevar pero hay otras personas que ponen en riesgo su vida porque con la edad vas perdiendo cualidades”, explica.

De 800 camioneros que tiene su empresa, solo 8 son mujeres. “Ser conductores internacionales conlleva riesgos, pero en el caso de una mujer da miedo, no hay áreas que estén acondicionadas, con una sola ducha para hombres, pendientes de si te roban gasoil o la mercancía. Es un sector muy masculinizado, muchos días la gente fuera de casa y es un riesgo bastante alto. Además, es de las profesiones peor pagadas, un conductor de internacional cobra unos 2.800 euros brutos, una persona que está fuera de casa y que ha perdido su vida en la carretera a cambio de nada. Tú te vas a Holanda o Alemania y el sueldo que tienen es casi el doble que el nuestro”.

Como ella, muchos conductores de mercancías y viajeros han gritado ¡basta!. Los sindicatos de UGT y Comisiones Obreras han decidido pasar a la acción y han convocado una serie de jornadas de huelga en fechas especialmente importantes para el consumo y el traslado de viajeros. Los conductores profesionales de autobuses y camiones se movilizarán el próximo 28 de octubre, los días 11, 28 y 29 de noviembre, 5, 9 y 23 de diciembre para exigir una rebaja en la edad de su jubilación. Si el Gobierno y las patronales no dan su brazo a torcer, entonces esas jornadas de paros de 24 horas se convertirán en una huelga indefinida en plena Navidad, a partir del 23 de diciembre.

Con las estadísticas en la mano, CC.OO. y UGT constatan que dos tercios de los 120 conductores profesionales que fallecen en la carretera cada año de media superan los 55 años de edad y por eso piden que la edad de jubilación se pueda adelantar de los 67 años a los 60 años sin que esto suponga una merma de la pensión.

Un sector casi exclusivamente de hombres si atendemos a los datos de la Organización del Transporte por Carretera (IRU), que muestra que las mujeres solo representan el 2% de los conductores profesionales mientras que en Europa la representación femenina se sitúa en el 3% aunque hay algún país donde esa cifra se eleva ligeramente como es el caso de Italia con un 7% del total y Alemania, con un 5%.

Los sindicatos aseguran que hay un bloqueo permanente por parte del Gobierno y de las patronales que impiden que los conductores y conductoras de camiones se puedan acoger a esta jubilación anticipada como ya sucede en el caso, por ejemplo, de los pilotos de aviones o los maquinistas ferroviarios. Se realizaría un nuevo cálculo en el que se tendrían en cuentan coeficientes reductores por penosidad y peligrosidad. Pero hasta que se concrete ese coeficiente, piden una jubilación parcial con contrato de relevo, para que el conductor pueda acumular de forma continuada el porcentaje de horas que tiene que trabajar y que, en su lugar, entre una persona joven.

Rosario ha podido formar una familia porque se encargaba de los niños su suegra, que vivía cerca de casa. “Mi marido que sigue de conductor actualmente trabaja seis jornadas consecutivas de nueve o diez horas cada día y un descanso semanal de 45 horas seguidas. El problema es que si el viaje es muy lejos, a Polonia por ejemplo, haces seis jornadas de trabajo, un descanso reducido de 24 horas en una zona de descanso y después retomas la conducción seis días más. Hay compañeros que han tenido ictus en la carretera y coincide que son personas a partir de 50 años”. Un trabajo con mucho estrés y una gran responsabilidad por la carga que transportan y sin embargo la Seguridad Social considera que es enfermedad común. “Pero es mentira, es por culpa del trabajo”. Y por eso van a movilizarse hasta llegar a la huelga indefinida si hace falta.