La Seguridad Social ha oficializado un nuevo cambio en el sistema de cotización para trabajadores autónomos, marcando el próximo 1 de enero como el inicio de una etapa de ajustes que tendrán un impacto significativo en las finanzas de los profesionales por cuenta propia. Este cambio está enmarcado en la transición hacia el modelo de cotización por ingresos reales. Una reforma de la cuota de autónomos que busca mayor equidad en las aportaciones y sostenibilidad en el sistema.
La nueva cuota de autónomos: un modelo basado en los ingresos reales
Desde su implementación en 2023, el sistema de cotización por ingresos reales ha generado expectativas y dudas entre los autónomos. A partir de enero, las cuotas mensuales se calcularán según los rendimientos netos declarados, ajustándose a una tabla de 15 tramos. Esto supone un alivio para quienes tienen ingresos bajos, pero también mayores obligaciones para quienes superen ciertos umbrales.
Por ejemplo, los autónomos con ingresos inferiores a 670 euros mensuales pagarán una cuota de 200 euros, mientras que aquellos que declaren hasta 1.166,70 euros tendrán una cuota máxima de 263 euros, una rebaja respecto a 2024. En el rango intermedio, entre 1.166,70 y 1.700 euros, la cuota se mantiene estable en 294 euros. Sin embargo, quienes superen los 1.700 euros experimentarán incrementos progresivos, alcanzando hasta 590 euros para ingresos superiores a 6.000 euros mensuales. Este sistema busca que las contribuciones reflejen la capacidad económica de cada autónomo, un principio que la Seguridad Social considera esencial para garantizar la justicia fiscal.
Uno de los ajustes más destacados es el incremento de la base máxima de cotización, que pasará de 4.720,50 euros a 4.909,50 euros mensuales, lo que supone un aumento del 4 %. Esto impactará directamente en las aportaciones de quienes opten por esta base, incrementando su cuota mensual. Además, la Seguridad Social realizará una regularización anual en función de los ingresos declarados en la renta, ajustando las cuotas pagadas para alinearlas con los rendimientos reales.
En caso de haber pagado cuotas superiores, los autónomos recibirán una devolución antes del 30 de abril del año siguiente. Por otro lado, si las cuotas resultaran insuficientes, el organismo notificará al trabajador para que abone la diferencia. En este escenario, se podrá solicitar un aplazamiento del pago si fuera necesario, ofreciendo mayor flexibilidad ante posibles desequilibrios económicos.
¿Qué es el MEI y por qué aumenta?
El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que tiene como objetivo reforzar el fondo de reserva de las pensiones, también será modificado en 2025. Su porcentaje de cotización se incrementará al 0,80 %. Aunque este aumento parece leve, representa un esfuerzo continuo por garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones a largo plazo, un desafío crucial para la Seguridad Social en un contexto de envejecimiento de la población.
Declaración de la renta obligatoria
Una de las novedades más relevantes es la obligatoriedad de que todos los autónomos presenten la declaración de la renta, independientemente de sus ingresos. Esto permitirá a la Seguridad Social cruzar datos con la Agencia Tributaria, asegurando una correcta aplicación del sistema de cotización por ingresos reales. Este cambio, que entra en vigor en 2025, refuerza la transparencia y facilita el ajuste de las cuotas de manera proporcional a los rendimientos netos.
Revisión periódica de las tablas de cotización
El sistema prevé revisiones trianuales de las tablas de cotización, siendo 2025 el próximo punto de evaluación. Este enfoque permitirá ajustar las bases y cuotas según las condiciones económicas del país, garantizando que el modelo siga siendo eficaz y justo para los autónomos. Estas revisiones periódicas subrayan el compromiso de la Seguridad Social con un sistema dinámico y adaptable a las necesidades cambiantes de los trabajadores por cuenta propia.