Marc Murtra, nuevo presidente de Telefónica, afronta la reorganización del consejo de administración de la compañía con dos retos inmediatos: dar entrada a Saudi Telecom Company (STC) y cumplir con la nueva Ley de Paridad. Esta norma bandera del Gobierno de Pedro Sánchez exige a las cotizadas del Ibex 35 una representación de, al menos, un 40% de mujeres en sus consejos de administración. Desde que el propio Ejecutivo forzó el incumplimiento de esta norma con la entrada en el consejo de Telefónica de Carlos Ocaña, en representación del 10% que ostenta SEPI, dos nombres suenan como posibles candidatas: Therese Jamaa y Carme Artigas.
Ambas cumplirían los requisitos de “competencia, experiencia y méritos” que exige el Reglamento del Consejo de Telefónica. Therese Jamaa fue vicepresidenta de Huawei España y directora comercial de Vodafone. Carme Artigas, por su parte, es una experta en Inteligencia Artificial (IA), como exsecretaria de Estado de Digitalización e IA, además de investigadora del Centro Belfer de Harvard.
Más allá del currículum y la trayectoria profesional, una cuestión personal podría inclinar la balanza en la elección de la candidata por parte del consejo. O más bien al contrario. El hecho de que Jamaa sea la pareja del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, podría jugar en su contra.
Jamaa, consejera en Hispasat
La relación entre Therese Jamaa, alta ejecutiva de origen libanés, y Albares se remonta a 2023, siendo él ya titular de la cartera ministerial. Ambos comparten un nexo de unión con París, ciudad que ha marcado sus trayectorias personales y profesionales. Precisamente, esta relación sería una de las razones detrás del cese “por motivos personales” de la directiva como vicepresidenta de Huawei España. Dentro de su plan de expansión e inversiones en España, la compañía china creó en enero de 2022 este puesto a su medida “para contribuir a reforzar la reputación de la compañía entre los diferentes públicos y continuar impulsando la estrategia de digitalización y el desarrollo local a través del ámbito de negocio”.
Jamaa cuenta con una dilatada experiencia en el sector de las telecomunicaciones, tanto en el ámbito corporativo, como en ventas, negocio o RSC. Desde mayo de 2022, es vicepresidenta de Cruz Roja. Forma parte del comité asesor de diversidad de CaixaBank, que, entre otros objetivos, busca aumentar las mujeres en posiciones directivas, desde su creación en diciembre de 2022. Tras dejar Huawei, en mayo de 2023, se incorporó al consejo de administración de Aguas de Barcelona, y en diciembre de ese año, como consejera de Hispasat, en representación de su accionista mayoritario, Redeia. Esta es otra de las grandes participadas de SEPI, que controla el 20% del capital.
Conflicto de interés
Así, ante la eventual candidatura de Jamaa, una de las cuestiones a valorar por la Comisión de Nombramientos, Retribuciones y Buen Gobierno de Telefónica es que efectivamente no exista ningún conflicto de interés profesional “ni por personas a ellos vinculadas”, como así recoge el Reglamento del Consejo de Telefónica. Esta será la tarea de Peter Löscher, como presidente de la misma, y Javier de Paz, María Luisa García Blanco y Verónica Pascual Boé, como vocales de dicha Comisión.
De ahí, que algunas fuentes sitúen a Carme Artiga, exsecretaria de Estado de Digitalización e IA y hasta el pasado mes de diciembre copresidente del Consejo Asesor de IA dentro de la Secretaría General de las Naciones Unidas, como una de las favoritas del Ejecutivo. Su acceso al consejo de Telefónica podría compensar el veto de hace un año a su incorporación a Airbus Space and Defence, la rama militar del gigante aeronáutico. La Oficina de Conflictos de Interés rechazó su entrada porque estas entidades recibieron subvenciones de entidades presididas por Artigas durante su mandato.
Encaje de bolillos
Desde el ámbito puramente empresarial y en función de los ángulos a cubrir dentro del consejo, otro perfil con potencial encaje en el consejo de Telefónica podría ser Regina Llopis, científica y empresaria, experta en IA. También acaba de dejar la dirección de Legal y Asuntos Externos de Vodafone, Elena Otero-Novas, abogada del Estado, quien para incorporarse al consejo de un competidor debería estar exenta de las habituales cláusulas de no competencia.
La incorporación de una (o incluso dos) mujeres al consejo requerirá hacer encaje de bolillos. Según su Reglamento, “podrá proponerse el cese de consejeros independientes de resultas de ofertas públicas de adquisición, fusiones u otras operaciones corporativas similares que supongan un cambio significativo en la estructura de capital de la sociedad”. En base a esta premisa, y suponiendo que la vacante en el consejo tras el fallecimiento del independiente Javier Echenique se asigne a STC, habría que buscar una alternativa entre los independientes para dar entrada a la nueva consejera.
Incógnitas
Otras dos incógnitas en el aire son la posibilidad de que el grupo saudí optara por solicitar dos representantes y cómo dar cumplimiento a la recomendación de Buen Gobierno de la CNMV de que haya un equilibrio entre dominicales e independientes, de manera que estos últimos representen, con carácter general, al menos la mitad de los consejeros. Una vez que se despejen los nombramientos del consejo, estos deberán ser ratificados por la Junta General de Accionistas, incluido el de Marc Murtra.
Deberán contar con los preceptivos informes justificativos ante la asamblea. La composición final del consejo que diseñe Marc Murtra será seguida muy de cerca por el mercado. El primer día, tras el relevo en la presidencia, ha castigado el intervencionismo del Gobierno en la operadora. La cotización de Telefónica cerró con un retroceso del 2,72%, hasta los 3,862 euros por acción. Por el contrario, Indra, que presidía Marc Murtra y que ha fichado a Ángel Escribano como sustituto, subió un 3% (2,93%), hasta los 18,59 euros por título.