“Hemos puesto en marcha un programa para reparar infraestructuras agrarias -como por ejemplo caminos, bancales, sistemas de regadío- con un importe de 175 millones de euros, que va a ser ejecutado por una empresa que conoce bien el sector primario en nuestro país, que depende del Gobierno de España y que se llama Tragsa”. Resumía así el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la labor encomendada a la Empresa de Transformación Agraria (Tragsa), al frente de la cual está Inmaculada Salas Burgos, su directora desde noviembre de 2018.
Tragsa será el brazo ejecutor del Ministerio de Agricultura para la restauración de explotaciones agrarias afectadas, que comenzarán en dos semanas. El nuevo Real Decreto-ley de medidas para paliar los efectos de la DANA detalla exhaustivamente la misión que deberá coordinar Inmaculada Salas: desde la reposición de tierras, la limpieza de instalaciones agrarias o balsas hasta la reparación de redes eléctricas de alta y baja tensión, como transformadores al pozo. Podrá realizar cualquier actuación que determine el Departamento que dirige Luis Planas.
Gestión de ayudas
“Tragsa actuará en todo momento bajo las órdenes e instrucciones del Ministerio de Agricultura, sin ejercitar ningún tipo de potestad administrativa, no entendiéndose como tal la solicitud, tramitación y formalización de la documentación y permisos necesarios para acceder a las parcelas agrarias afectas”, según detalla la norma. Para acelerar la puesta en marcha de los trabajos, se prevé la tramitación de emergencia de los contratos públicos. De esta forma, el contratante queda eximido de cumplir los requisitos de los expedientes previstos en la Ley de Contratos Públicos.
No será la única misión de Traga, que ya está trabajado sobre el terrero. Junto con Correos, sus empleados estarán en las oficinas habilitadas por el Gobierno para ayudar a los ciudadanos de los 78 municipios afectados por la DANA con la tramitación de las ayudas. Se han abierto las primeras oficinas en doce municipios y veinte empleados de Tragsa están, desde el 11 de noviembre, operativos sobre el terreno.
“Se habilita a los empleados de Tragsa y Correos, sociedades dependientes del Grupo SEPI, a realizar actuaciones de intermediación y representación de los afectados para formalizar las solicitudes de las distintas prestaciones y ayudas disponibles. Lo que pone aún más fácil que quienes atienden en las oficinas creadas expresamente desarrollen su labor”, destaca el Ministerio de Hacienda. En los últimos días Tragsa ha publicado varias ofertas de trabajo temporal en la provincia de Valencia. Según informa en su web de empleo, contratará a casi un centenar de personas para realizar las tareas encomendadas.
Respuesta en emergencias
Inmaculada Salas está acostumbrada a trabajar en situaciones de emergencias. Desde el pasado verano, entre su cartera de encargos más importantes, está la rehabilitación y construcción de centros de primeras llegadas en Canarias a petición del Ministerio de Inclusión, así como su gestión durante meses. Forma parte de su idiosincrasia como reconoce SEPI: “su singularidad reside en ser el único medio propio con capacidad de actuar en todo el territorio nacional y para todas las Administraciones públicas accionistas, así como para movilizarse y dar respuestas ágiles a situaciones de urgencia o emergencia. Estas últimas actuaciones son especialmente relevantes en tanto que el grupo está especialmente organizado para dar respuesta a esas situaciones”.
Tragsa, fundada en 1977 para la ejecución de obras y servicios de desarrollo rural, conservación medioambiental y actuaciones de emergencia, forma parte del Grupo Tragsa, que a su vez cuenta con otra filial de consultoría e ingeniería, Tragsatec. El Grupo, presidido por Jesús Casas, está participado en un 51% por SEPI. En 2023, la cifra de negocio de Tragsa creció un 32% hasta 1.121 millones de euros. Así, la matriz aportó el el 65% de los ingresos del Grupo Tragsa, que logró la mayor cifra de negocio desde su creación; mientras que el resto correspondió a la filial Tragsatec. El Grupo Tragsa sumó una plantilla de 23.164 personas, 3.622 más que un año antes, que supone igualmente su máximo histórico.
La directora de Tragsa, que depende directamente de Presidencia, conoce bien la casa. Ingeniera Agrónoma por la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y Máster en Gestión Medioambiental, Salas se incorporó al Grupo a finales de los 80 como jefe de obra en Zaragoza. Tras desempeñar diferentes posiciones, en 2004, fue nombrada subdirectora de Contratación, cargo que ostentó hasta 2007 en el que pasó a ser directora adjunta a la Secretaría General. En su última etapa antes de ser ascendida a su actual responsabilidad, desempeñó otros cargos, como el de directora adjunta de Control de Gestión y Auditoría hasta mayo de 2014 cuando fue nombrada subdirectora de Presupuestos y Control de Gestión.
Ayudas directas al campo
El sector agrario está aún evaluando los daños, pero el universo con el que trabaja el Ministerio asciende a 47.000 agricultores afectados. Estos habrían sufrido daños del 40%, que se ha establecido como límite para recibir las ayudas. “Es muy pronto para la evaluación de los daños. Hay que tener en cuenta que hay explotaciones absolutamente destruidas, porque por ellas ha pasado el agua, por las circunstancias del terreno, orográficas o lo que sea, junto a explotaciones que se han mantenido prácticamente sin ningún tipo de daño. Lo realmente prioritario siempre ha sido, en primer lugar, las necesidades básicas de la población, el rescate de los desaparecidos y ahora es cuando veremos realmente cuál es la situación sobre el terreno”, asegura el subsecretario de Agricultura, Pesca y Alimentación, Ernesto Abati.
Por otra parte, los agricultores y ganaderos afectados por la DANA también recibirán las ayudas directas sin necesidad de tramitar ninguna solicitud y previa peritación de los daños. “El agricultor afectado no tiene que preocuparse de enviar ninguna solicitud ni de hacer nada para las ayudas directas, no le vamos a pedir ningún papel, sino que de oficio le concederemos la ayuda previsiblemente en un plazo aproximado de tres meses”, detalla Ernesto Abati.
Evitar el abandono
Las explotaciones susceptibles de beneficiarse de estas ayudas se deben encontrar en alguno de los 112 municipios referenciados en los reales decretos leyes aprobados para apoyar a los damnificados por las riadas y las inundaciones de finales de octubre. Estas ayudas directas contarán con un presupuesto de 200 millones de euros y se enmarcan en un paquete global de 444,5 millones para ayudar a los agricultores y ganaderos afectados por la DANA.
Con estas ayudas, el Gobierno pretende que el sector agrario recupere la normalidad productiva cuanto antes, así como prestar apoyo económico y social a los agricultores y ganaderos. El objetivo, como señaló Pedro Sánchez, al presentar en nuevo paquete de medidas: “Es recuperar la producción de los alimentos cuanto antes, pero también evitar el abandono de la actividad agrícola, especialmente en aquellas zonas urbanas con pequeñas explotaciones que se encuentran en su periferia”.