Hasta 30.000 euros para modernizar los ascensores españoles

Hay unos 400.000 elevadores que llevan en servicio más de treinta años y necesitan una modernización inmediata, cuyo coste oscila de 800 a 30.000 euros

Si ya estás pensando en cómo gastar la paga extra de verano, ten en cuenta que el 1 de julio entra en vigor una nueva legislación sobre la seguridad de los ascensores y quizás te toque desembolsar un pico para poner a punto el tuyo. La nueva normativa afectará a uno de cada cuatro elevadores en España y según cálculos del propio Gobierno costará 708 millones de euros actualizar el parque de ascensores obsoleto que existe en España. Si acaban de instalarlo en tu comunidad de vecinos, no hará falta hacer nada pero hay unos 400.000 elevadores que llevan en servicio más de treinta años y necesitan una modernización inmediata. Si es tu caso, prepara la cartera. Tendrá un coste entre 800 y 30.000 euros que deberá repartirse entre todos los vecinos propietarios de la comunidad.

En el caso de los ascensores antiguos, hay muchas medidas que implementar. Ese es el cometido de la nueva normativa, reforzar la seguridad con pequeños cambios que son necesarios para respirar tranquilos cada vez que subimos en uno de ellos. Como nivelar adecuadamente el ascensor para una mayor accesibilidad. Se debe garantizar que no haya escalones que pueda provocar tropiezos y sobre todo que sea accesible para que una persona en silla de ruedas pueda subir o bajar sin problemas.

También es fundamental la protección del usuario contra el cierre de puertas. Para este caso en particular, hay que instalar sensores que detecten que esas puertas no deben cerrarse si hay algún elemento obstruyendo y evitar así un accidente como por ejemplo, que se te pueda quedar una mano pillada entre las puertas.

Otra de las medidas será la protección del usuario contra movimientos incontrolados de la cabina, tanto en reposo como en movimiento. Básicamente que el ascensor no provoque meneos u oscilaciones peligrosas para las personas que están en su interior.

¿Y quién no se ha quedado encerrado en alguna ocasión dentro de un elevador? En estos casos no solo debe haber visible un botón de alarma para poder comunicarnos con el exterior sino que debe garantizarse la bidireccionalidad para que se pueda dialogar con el técnico y hacer el rescate lo más seguro posible.

Otro elemento a tener en cuenta es sustituir las guías antiguas, comúnmente de madera por opciones más seguras y duraderas. Y si llenamos el ascensor con más peso del que nos indica, entonces que haya algún tipo de señal acústica y visual que nos alerte inmediatamente.

Si tu ascensor carece de alguno de estos elementos de seguridad, habrá que hacer frente a esa derrama. El proceso es sencillo, poner el dinero sobre la mesa, no tanto. Una empresa de mantenimiento hará la inspección y detectará los elementos a mejorar. Entones se realizará el presupuesto a la comunidad de vecinos con el detalle del gasto. Tras una reunión extraordinaria, se aprobarán los arreglos y entonces se comenzarán las obras de mejora. Si el precio es demasiado alto, sepan que tienen un plazo de un año para hacer frente a la derrama o incluso se pueden financiar los trabajos pero sea como sea, deben salir adelante. Porque puede haber sanciones para la comunidad de propietarios e incluso la suspensión del servicio de ascensor. Para el que viva en el primer piso no será un problema pero como su edificio tenga más de diez plantas, la paralización del ascensor puede convertirse en una pesadilla para los vecinos del último piso.

José Rodríguez es propietario de una vivienda que tiene más de 30 años y sus ascensores también. Todavía no les han comentado nada. “Es muy reciente y todavía las comunidades no se han reunido para tomar la decisión. En nuestro edificio hay hasta seis ascensores, tres por cada escalera, y además es un edificio de diez plantas y 120 pisos en total. En el peor de los casos, el importe al dividirse entre tantos propietarios no sería mucho por vecino, la derrama no será muy alta”. Como vive en la séptima planta, cualquier problema con los ascensores le afecta mucho.

Purificación García vive en un bajo, no utiliza nunca el ascensor pero sabe que le tocará pagar igualmente el mantenimiento. Su edificio ya ha cumplido los 35 años y tiene dos elevadores, uno por cada escalera que bajan hasta el garaje. “Me imagino que el presidente de la comunidad nos dirá en su momento lo que debemos hacer pero yo aunque no uso el ascensor, por solidaridad pago, repartimos el coste entre todos. Hay vecinos que en ocasiones no quieren pagar algunos elementos comunes porque no los utilizan pero es lo justo, que entre todos paguemos el mantenimiento del ascensor, aunque a mí no me afecte”. Dos casos diferentes y un elemento común, tendrán que prever en el presupuesto familiar un gasto extra para hacer frente a la nueva normativa de seguridad. Para no llevarse sorpresa.