El Foro Económico Mundial advierte de la baja representatividad de mujeres en los puestos de alta dirección en España. De esta forman, en su Índice Global de Brecha de Género 2024 asigna una puntuación de sólo el 53,2% a esta cuestión. España también puntúa pobremente en cuanto a la brecha de género retributiva, con un 67,6%.
El informe viene a corroborar lo que ya han reflejado otros estudios tanto a nivel nacional como internacional. El presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, se pronunció en este mismo sentido y el primer estudio de Women in Banking constata que ella solo ocupan el 26% de los puestos de responsabilidad. A su vez, el Banco Mundial también avisó de la falta de participación de la mujer en las compañías.
Y todo ello a pesar de que a nivel general España avanza y, por tercera vez desde su creación, vuelve a colarse en el top 10 mundial de los países en paridad del Índice. Según el estudio, España sube ocho puestos desde 2023 y logra una puntuación de 79,7 puntos (7 puntos porcentuales más que el año anterior), lo que le permite estar entre los diez mejores a nivel global.
La puntuación conjunta de la brecha de género en 2024 para los 146 países incluidos en esta edición del estudio se sitúa en un 68,5%, lo que representa únicamente un avance del 0,1% en relación al año anterior. El Índice Global de Brecha de Género 2024 muestra que ningún país ha logrado la paridad de género total, aunque ha habido mejoras en el 97% de los países analizados, frente a solo el 85% de 2006, cuando comenzó este análisis.
Islandia, con un 93,5%, vuelve a ocupar el primer puesto y lidera el Índice desde hace una década y media. El país nórdico se mantiene como el único ha logrado superar el 90% en el cierre de su brecha de género. En general, los países europeos son los que obtienen mejor puntación y suponen el 70% del top 10 mundial. Por detrás de Islandia, se sitúan Finlandia (segundo, 87,5%), Noruega (tercero, 87,5%), Suecia (quinto, 81,6%), Alemania (séptimo, 81%), Irlanda (noveno, 80,2%) y España (décimo, 79,7%).
España al detalle
Este avance de España -sube ocho puestos desde 2023- se debe principalmente a la mejora en el capítulo de Participación y oportunidades económicas. Así, ha aumentado en paridad económica en los últimos siete años hasta el 73,2%. Según detalla el Informe, en 2024, los indicadores en los que más se ha avanzado en el cierre de la brecha de género corresponden con trabajadores con perfiles cualificados y técnicos (100%); en cuanto a la empleabilidad se sitúa en el (84,6%).
El Foro Económico Mundial da un toque de atención a la situación de España en relación con la presencia de mujeres en los puestos de alta dirección, donde obtiene una nota de solo el (53,2%), así como en cuanto a la brecha de género retributiva (67,6%).
En el polo opuesto, destaca en los indicadores de Salud y Supervivencia, donde se ha cerrado prácticamente la brecha de género (96,6%). En cuanto al nivel educativo, España también ha cerrado efectivamente la diferencia de género, como refleja una puntuación del 99,6%.
A pesar de no contar con una mujer como presidenta del Gobierno -cita textualmente el informe-, el Foro reconoce que España ha reducido la brecha de capacitación política hasta el 49,4%, alcanzando la plena paridad a nivel ministerial (100%) y aumentado a nivel parlamentario (79,5%, frente al 73,6% en 2023).
Camino por recorrer
A nivel global, el estudio estima el tiempo necesario para cerrar las brecha de género en cada una de las áreas. Así, alcanzar la paridad en el ámbito educativo requerirá 20 años (cuatro años más que en 2023) y empoderamiento político, 169 años (siete años más). Por el contrario, se redujo en Participación y oportunidades económicas a 152 años (17 años menos). El momento para cerrar la brecha de género en salud y supervivencia aún no está definido.
En este sentido, indica que la paridad en el empleo ha seguido mejorando desde la última edición hasta alcanzar el 66,7 % en 2024. Pero advierte que “las variaciones regionales continúan mostrando que, si bien la participación de las mujeres en la fuerza laboral se está recuperando a nivel global, la paridad avanza a velocidades muy diferentes según los países”. Así, detalla que, si bien las mujeres están cerca de ocupar el 50% de los empleos en los niveles iniciales, no llegan al 25% en los puestos de alta dirección.
“Las perspectivas económicas de las mujeres y las niñas se ven amenazadas por las continuas recesiones y crisis prolongadas. Si bien la adopción de políticas económicas para promover la igualdad de género ha aumentado en general, entre regiones existen marcadas diferencias no solo en la adopción sino también en los recursos y la implementación”, concluye el estudio.