INCUMPLIMIENTO DESDE 2 DE AGOSTO

El permiso parental retribuido se aplaza ‘sine die’ en España

El Ministerio de Trabajo (Sumar) no ceja en exigir su aprobación, pero su aplicación en España queda en el aire con la incertidumbre sobre los PGE 2025 y el silencio del PSOE en este tema

El permiso parental retribuido de hasta ocho semanas sigue siendo una utopía en España para los padres con hijos menores de ocho años. Su fecha de aplicación está en el aire por más que desde el Ministerio de Trabajo liderado por Yolanda Díaz (Sumar) se insista en que el Ejecutivo debe cumplir sus compromisos con los ciudadanos. Este es uno de ellos pues está recogido en el acuerdo de Gobierno entre el PSOE y Sumar, junto con la ampliación de 16 a 20 semanas de la baja de maternidad.

Hace un mes, el secretario de Estado de Trabajo, Borja Pérez, emplazó a la negociación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) su desarrollo reglamentario y entrada en vigor en 2025. Pero la realidad es que al día de hoy, la incertidumbre presupuestaria –aunque el Gobierno confía en poder sacar el PGE de 2025 adelante, no tiene garantizado el apoyo de Junts– y el silencio del PSOE al respecto, aplazan sine die el permiso parental retribuido en España.

De ahí que en su última comparecencia antes de las vacaciones, Pérez abriera la puerta a otras alternativas más allá de los presupuestos: “el Ministerio de Trabajo desde luego no cejará en su empeño de, en el molde presupuestario o en la primera norma que sea posible, exigir la transposición de la directiva con la que estamos plenamente comprometidos“.

Una dilación que además puede tener un alto coste económico para España dado que cada día de retraso cuesta más de 9.700 euros. “Realmente estamos ante un incumplimiento de nuestras obligaciones con Europa y claro que estamos siendo emplazados y apercibidos por la Comisión Europea básicamente en un montante que roza los 7 millones de momento y que obviamente se irán agravando en la medida en que ese incumplimiento se esté sosteniendo en el tiempo”, admitió Pérez.

Una vía de escape de la sanción

“A fecha de hoy, trabajadoras y trabajadores carecen de un horizonte cierto sobre el cuándo y el cómo del cumplimiento de esta norma“, afirma Carolina Vidal, secretaria confederal de Mujeres, Igualdad y Condiciones de Trabajo de CCOO, que lamenta que no disponen de ninguna información al respecto.

Para UGT, la inexistencia del permiso parental retribuido refleja la discrepancia entre el PSOE y Sumar en cuanto a su aplicación y grado de cumplimiento respecto a lo exigido por la UE. Cristina Antoñanzas, vicesecretaria general de UGT, explica a Artículo14 que la vía que utilizará el Gobierno para tratar de eludir la sanción es el preámbulo del Real Decreto-ley 2/2024, de 21 de mayo, que completa la transposición de la Directiva de cuidados del menor.

En este Real Decreto-ley, se señala que “en esta norma se procede a abordar una modificación del permiso de lactancia con la finalidad de mejorar los términos del ejercicio del derecho y a la vez se refuerza y complementa el recientemente reconocido permiso parental. […] Con ello, se avanza en la mejora y se incrementa el nivel de reconocimiento y protección de los permisos de conciliación, cumpliéndose por tanto la exigencia de un permiso parental retribuido”.

Según detalla Antoñanza, de esta forma, para el PSOE se habría dado cumplimiento a la exigencia europea del permiso parental retribuido, “aunque habrá que ver cómo se pronuncia la Comisión Europea”. “No caben subterfugios”, apostilla Vidal, en referencia a la intención declarada por parte del Gobierno de coalición de remunerar solo cuatro de las ocho semanas.

CCOO exige la convocatoria de la mesa del Diálogo Social para la negociación del reglamento que regule el disfrute de este permiso a tiempo parcial. En este sentido,  recuerda que la norma exige la retribución de las 8 semanas en su totalidad, sin que este permiso, pensado para los cuidados, tenga nada que ver con la acumulación del permiso de lactancia en el Estatuto de los Trabajadores. 

Sólo 4 semanas

Más allá del incumplimiento del derecho de los trabajadores disponer de un permiso parental de hasta ocho semanas, algunas de las cuales debe ser retribuidas, la realidad es que España no tiene previsto retribuir el máximo que dibuja la directiva. El pacto entre PSOE y Sumar establece la retribución limitada a cuatro semanas a fecha de 2 de agosto de 2024, al igual que elevar la baja de maternidad de 16 a 20 semanas, medida que sigue en el cajón.

En la foto con sus homólogos europeos, España no sale bien parada. Según informa Leticia Bastita desde Bruselas, nueve países entre los que se encuentran Francia, Italia o Alemania además de transponer a tiempo el permiso parental retribuido, lo hacen  abonando el máximo de las ocho semanas a las que hace referencia la Directiva de cuidados.

En concreto, un total de 16 estados miembros han aprobado ya el permiso parental retribuido y en el caso de Alemania, Francia, Italia, Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo, Austria, Finlandia y Suecia, cuenta con el máximo de semanas pagadas (un total de ocho), según el análisis realizado por Artículo14.

En España, la palabra clave en los permisos parentales, ‘retribuido’, sigue sin ser una realidad y su aplicación una incógnita ‘sine die’.