El gran miedo de la banca por el nombramiento de Escrivá

La llegada de José Luis Escrivá como gobernador del Banco de España tiene al sector de la banca mirando de reojo, suspicaz

La designación de José Luis Escrivá como nuevo gobernador del Banco de España —como adelantó Artículo 14— ha suscitado cierta preocupación en el sector bancario. Aunque su experiencia técnica es reconocida, existen temores de que su posición sea utilizada por el gobierno de Pedro Sánchez para avanzar en su agenda política. La banca teme que Escrivá, exministro de Seguridad Social y actual ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, pueda actuar como un “peón político”, comprometiendo la independencia del Banco de España, una institución clave en la supervisión del sector financiero.

El hecho de que Escrivá llegue a su nuevo puesto tras desempeñarse como ministro ha generado escepticismo. Especialmente, en un momento en que las relaciones entre el gobierno y la banca se han tensado debido a la imposición de un impuesto temporal al sector. Para algunos, su nombramiento plantea interrogantes sobre si el Banco de España mantendrá su independencia o se verá influenciado por la agenda del Ejecutivo.

La dualidad de Escrivá: técnico o político

Escrivá, quien trabajó en el Banco de España, el Banco Central Europeo (BCE) y BBVA antes de ingresar en la política, es visto por algunos como un experto técnico con profundo conocimiento del sector financiero. Su experiencia en la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) es un punto a su favor. No obstante, otros dudan de que su pasado en organismos técnicos sea suficiente para contrarrestar las presiones políticas que podría enfrentar.

Esta preocupación se agrava en un contexto donde la banca desconfía de las medidas del gobierno. A pesar de que muchos banqueros reconocen su capacidad técnica, el temor de que Escrivá se vea influenciado por Sánchez persiste. De hecho, se especula que, bajo su mandato, podría haber movimientos reguladores perjudiciales para la banca. Es el caso de la consolidación del impuesto temporal al sector o una mayor supervisión sobre fusiones y adquisiciones, como la opa de BBVA sobre Sabadell.

El gran miedo de la banca por el nombramiento de Escrivá

Moncloa ha impuesto a José Luis Escrivá frente a la opción de una mujer como -de izq. a dcha.- Soledad Núñez, Margarita Delgado y Montserrat Martínez | Kilo y Cuarto

Las tensiones entre la banca y el gobierno han escalado tras la introducción del impuesto temporal. Este gravamen, visto como una medida muy populista, fue una de las primeras señales de que el sector financiero no tendría el respaldo incondicional del gobierno. En este contexto, la llegada de Escrivá se siente como un paso más hacia una mayor intervención en los asuntos del Banco de España.

Si bien muchos banqueros confían en que Escrivá mantenga una postura técnica, también existe el temor de que, si la presión política aumenta, la independencia del Banco de España podría verse comprometida. Esto, a su vez, afectaría el papel de la entidad como regulador financiero. Es es el gran miedo de la banca en estos momentos.