El bono social eléctrico es un descuento que se aplica en la factura de la luz a las personas consideradas consumidores vulnerables. Proviene directamente del Gobierno y se pone a disposición de los usuarios que lo necesiten, siempre y cuándo cumplan una serie de requisitos. Es una gran ayuda para quienes lo necesitan para poder disponer de luz, puesto que gracias a el se puede reducir la factura de la luz entre un 25% y un 65% y es aplicable solo a personas físicas que figuren como titulares de un punto de suministro eléctrico en su vivienda habitual, la cual debe tener una potencia contratada de hasta 10 kW.
Pero no solo afecta a la luz, pues los suministros que se encuentren bajo el bono social eléctrico 2025 tienen derecho a la percepción del bono social térmico, un programa subvencionado por las Comunidades Autónomas en función de la ubicación geográfica destinado a compensar los gastos ocasionados por el uso de la calefacción y el agua caliente sanitaria.
El objetivo de este bono social eléctrico es proteger a los consumidores más vulnerables, como son los consumidores en riesgo de exclusión social, que son aquellos a los que la administración les abona parcialmente o en su totalidad la factura, con el fin de garantizar el acceso a la electricidad y reducir el importe económico en las facturas de luz en sus hogares. Todo ello tratando de erradicar la la pobreza energética, garantizar el acceso universal a la electricidad, permitir una mayor estabilidad económica en los hogares vulnerables y fomentar el ahorro energético.
El Bono Social Eléctrico está dirigido a personas consideradas consumidores vulnerables, tanto solo vulnerables como vulnerables severos o en exclusión social, que cumplan los siguientes criterios principales:
Consumidores vulnerables
- Familias o personas con ingresos bajos con una renta igual o inferior a 1,5 veces el IPREM de 14 pagas establecido en 8.400€.
- Familias o personas con algún tipo de discapacidad reconocida igual o superior al 33%. Personas en situación de dependencia reconocida de grado II o III y personas electrodependientes, con un certificado sanitario que lo acredite.
- Pensionistas con prestaciones mínimas por jubilación o incapacidad permanente, que perciban la cuantía mínima y no tengan ingresos adicionales superiores a 500 € anuales.
- Víctimas de violencia de género o terrorismo.
- Unidades familiares que posean el título oficial de familia numerosa, independientemente de los ingresos que perciban.
- Unidades familiares cuyo alguno de sus miembros sea perceptor del Ingreso Mínimo Vital.
Consumidores vulnerables severos
- Familias o personas con ingresos muy bajos con una renta igual o inferior al 50% de los umbrales establecidos para consumidores vulnerables.
- Familias numerosas con una renta anual igual o inferior a 16.800 €.
- Pensionistas cuya unidad de convivencia perciba una renta de hasta 8.400€
- Beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital que perciban una renta igual o inferior al 50% de los umbrales establecidos para consumidores vulnerables.
Como solicitar el bono social eléctrico
Para poder solicitar el bono social eléctrico es necesario tener contratada una tarifa PVPC con una de las comercializadoras del mercado regulado así como aportar la documentación que acredite cuál es la vivienda habitual a través del certificado de empadronamiento y toda la documentación necesaria que acredite la situación como consumidor vulnerable o consumidor vulnerable severo.
Para solicitar el bono hay que seguir los pasos marcados por el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital y los comercializadores de referencia. Estos pasos son la preparación de la solicitud, y además, adjuntar la documentación necesaria. Se puede hacer por vía telefónica, presencialmente en una oficina física del comercializador, por fax o correo electrónico así como por correo postal o telemáticamente. Y no hay un plazo fijo establecido para presentar una solicitud, ya que está abierta de manera continua mientras se cumplan los requisito.
Importe que se recibe con el bono social eléctrico
La cantidad a recibir va a variar dependiendo de cuál sea la situación de cada uno de los afectados. Por ejemplo, quienes se clasifican como consumidores vulnerables y acceden al bono, cuentan con un descuento en su factura de la luz del 57,5 %. Mientras que los que forman parte de la clasificación de consumidor vulnerable severo y tengan acceso a él recibirán en sus facturas un descuento del 72,5 %. Mientras que los consumidores en riesgo de exclusión social acogidos al bono social no podrán sufrir cortes de suministro aunque no paguen.