Noviembre ya está avanzando, lo que significa que el final del año está cada vez más cerca y lo que eso conlleva. ya que va siendo el momento de acordarnos de los impuestos. Hay que pasar por caja para cumplir con nuestras obligaciones fiscales, pero como en todo, también se puede hacer para buscar pagar lo menos posible, y eso sí que está en nuestra manos, pero debernos darnos prisa y aprovechar todas las opciones que se nos presentan (dentro de la legalidad) para pagar lo menos posible de IRPF. La OCU nos lo pone fácil, pues da 10 trucos para conseguirlo.
Diez formas de ahorrar en nuestros impuestos según la OCU
Aprovecha las deducciones autonómicas
Hay muchas formas de recortar el IRPF, por ejemplo, es posible que puedas deducirtelo por la guardería de los hijos, los gastos educativos, el abono transporte público, la ayuda doméstica, la instalación de dispositivos de ahorro de agua o energía, el alquiler. Es importante asegurarse antes de nada de las deducciones fiscales autonómicas a las que cada una tenga derecho, pues cada comunidad autónoma tiene las suyas.
Comunica cualquier cambio en la familia
Informa a tu empleador de cualquier cambio en la situación familiar, ya sea el haber tenido o adoptado un hijo, si te divorcias, si te sobreviene una discapacidad a ti o a un familiar cercano que dependa de ti. Una de las cosas de la que depende la cantidad que se retiene de tu nómina a cuenta del IRPF es de de las circunstancias familiares y así conseguirás que sea lo más ajustada posible.
Cambia salario en metálico por salario en especie exento
Otra manera es cambiar parte de la retribución por salario en especie: algunas retribuciones están exentas de pagar IRPF, al menos dentro de ciertos límites. Así ocurre con los seguros de salud para el trabajador, su cónyuge y sus hijos, los vales de comida, los cheques de transporte y guardería.
Hacer donativos
Las donaciones deducen, y si las haces siempre a las mismas entidades, más. Si haces donativos a ONG, fundaciones y entidades sin ánimo de lucro puedes deducir un 80% sobre los primeros 250 euros, y un 40% sobre lo que exceda de esa cantidad.
Aprovechar las deducciones de vivienda y energía
Si estás pagando tu casa con un préstamo y eres de los que aún puede aplicar la deducción fiscal por compra de vivienda habitual. Puedes deducir el 15% de lo pagado para comprar la vivienda, sobre un máximo de 9.040 euros al año (o de 18.080 si pagas la casa con tu cónyuge y declaráis por separado). Por lo tanto, si no has llegado a esa cantidad, trata de amortizar anticipadamente préstamo hasta agotar el límite para así aprovechar íntegramente la deducción.
Aprovechar las deducciones para vehículo eléctrico y puntos de recarga
Si has comprado un vehículo eléctrico nuevo y lo matriculas antes de fin de año, podrás deducir en la próxima declaración el 15% de su valor, incluidos gastos e impuestos y restadas las ayudas públicas, sobre un máximo de 20.000 euros. La deducción se aplica en los modelos con un precio que no supere el importe máximo establecido para el plan MOVES III y solo si se destinan a uso particular.
Espera a cumplir 65 años para vender tu casa
Si tienes cerca de 65 años y te estás planteando vender o donar tu vivienda habitual, te interesa esperar hasta que los cumplas, pues la ganancia que obtendrás de la transmisión estará libre de impuestos. Si la vivienda está a nombre de los dos cónyuges, ambos deben ser mayores de 65 años, ya que de lo contrario solo estaría exenta la ganancia correspondiente al cónyuge que tenga esta edad.
Aprovecha si eres arrendador
Si eres propietario de un inmueble en alquiler, puedes deducir de la renta sujeta a IRPF los gastos hechos para obtenerla: IBI, anuncios, agencia, seguros, comunidad… También son deducibles los gastos de reparación y conservación y los intereses de préstamos para la compra o mejora del inmueble
Ahorra en plan de pensiones
Las aportaciones a un plan de pensiones pueden recortan la factura del IRPF.
- No es aconsejable para aquellos que obtienen rentas exclusivamente de alquileres de inmuebles, de productos bancarios o de ganancias derivadas de transmisiones patrimoniales, ya que este tipo de rentas no se reducen por aportar a planes de pensiones.
- Sí es una opción interesante para los que obtienen rentas que provienen del trabajo, de actividades profesionales o empresariales y de alquileres de inmuebles (en este caso, solo si además tienes rentas de los dos tipos anteriores). Si es tu caso, en tu próxima declaración, la cantidad máxima que podrás descontar por aportar a tus planes de pensiones será la menor de las siguientes:
- 1.500 euros anuales a tus planes individuales o asociados, y si en tu trabajo te dan un plan de pensiones, una cantidad variable a ese plan de empresa, que puede llegar a 4.250 euros como mucho, si se dan determinadas circunstancias y tu empresa aporta por ti esa misma cantidad.
- El 30% de la suma de los rendimientos netos del trabajo y de actividades económicas. Si no puedes reducir todas las aportaciones por aplicarse este límite, podrás reducir el exceso en la base imponible general de los cinco ejercicios siguientes.
Compensa pérdidas y ganancias
Si durante 2024 has obtenido ganancias con la venta o donación de bienes y acumulas pérdidas en otras inversiones, una forma de ahorrar en tu próxima declaración es liquidar esas inversiones para materializar esas pérdidas y poder compensarlas con las ganancias. O al revés, hacer ventas gananciosas si lo que tienes son pérdidas. Pero ten algunas precauciones:
- No dones bienes que generen pérdidas o rendimientos de capital negativo en el IRPF, porque Hacienda no permite su compensación.
- Si vendes acciones o participaciones de fondos con la intención de compensar la pérdida que genere la venta este año, debes esperar dos meses para volver a adquirirlos Si no lo haces así, no podrás compensar la pérdida hasta que los vuelvas a vender.