Los Juegos Olímpicos de París serán recordados entre otras cosas, por la gran polémica surgida con la boxeadora Imane Khelif. La protagonista de la portada de Vogue de este mes, se ha visto envuelta de nuevo en un escándalo, tras haber visto la luz un supuesto estudio médico en el que se revela que Imane es un hombre biológico.
Este lunes el portal francés Reduxx publicó un informe firmado por los médicos endocrinos Soumaya Fedala y Jacques Young en el que se revela que Imane Khelif posee una deficiencia conocida como deficiencia de 5-alfa reductasa, presencia de cromosomas masculinos XY. El informe señala que Khelif no tiene útero sino testículos internos y un micro pene. El estudio además apunta la posibilidad de que sus progenitores tuviesen parentesco sanguíneo.
Esto ha causado una enorme polémica en el marco del boxeo y del deporte internacional ya que el máximo representante del Comité Olímpico Internacional alegó en rueda de prensa que la boxeadora tenía su identificación como mujer. El pasaporte fue suficiente para que no se solicitase a la atleta un test de sexo que podría haber aclarado la polémica en los pasados JJOO. De hecho, el COI no realiza este tipo de test desde el año 1999.
Imane Khelif es un hombre. Sus informes médicos muestran que tiene cromosomas XY, testosterona masculina, testículos y micropene.
El COI lo sabía, y dejó que observáramos cómo pegaba a mujeres y les arrebatara la medalla de oro en los Juegos Olímpicos.https://t.co/Yx7jIdljck
— Irene Aguiar (@IreneAguiarG) November 4, 2024
El 1 de agosto la boxeadora italiana Angela Carini se negó a participar en el asalto a los 46 segundos debido a un fuerte derechazo. Se retiró entre lágrimas alegando que su contrincante tenía cromosomas masculinos. A partir de ahí, toda una cadena de informaciones terminaron con la rueda de prensa del COI y la medalla de oro de Imane Khelif tras imponerse en la final a la china Yang Liu. Con este oro, Khelif entraba en la historia como la primera boxeadora argelina en ser campeona olímpica.
El número de la revista Vogue de este mes de noviembre tiene precisamente como protagonista a Imane Khelif. A través de una extensa entrevista, la argelina explica la dificultad de todo lo que ha vivido desde que su género se puso en duda en París. “Fue una experiencia dura. A pesar de embolsar la medalla de oro, solo este evento fue más como toda una vida, este evento llevó en su redil muchas y variadas experiencias. Y lo superé todo porque creo en Dios, en mí y en mis sueños. Sin estos desafíos, nunca me habría convertido en un campeona”, declara para la publicación estadounidense.
La boxeadora argelina de 25 años narra también una vida con unos difíciles comienzos. “Vendí pan en la carretera, y recogí plástico, aluminio y hierro para ahorrar dinero y ir al gimnasio y volver”, recuerda. “Mi entrenador, Mohamed Chaoua, siempre me dijo que un día sería un campeona olímpica. Él me enseñó la importancia y el valor de eso. Hice sacrificios en muchas áreas, en mi vida personal, mi educación. Hice todo para llegar a la cima” detalla para Vogue. Sin embargo, a pesar de las nuevas informaciones, no ha querido pronunciarse en sus redes sociales donde acumula más de dos millones de seguidores.