El FC Barcelona acaba de aterrizar en México para celebrar el `Camp3onas Tour´. Los bolos que tradicionalmente los grandes equipos suelen hacer en pretemporada, el Barça los hace a falta de una jornada para que termine la liga, antes de enfrentarse a domicilio al Valencia el próximo domingo a las 12h. Un ida y vuelta que supone a la expedición azulgrana 18.800 kilómetros en apenas cuatro días a unas alturas de la temporada extenuantes para las futbolistas.
Con todo ganado eso sí. Las campeonas de liga, de la Copa de la Reina y Champions ya no se juegan nada para la última fecha de la Liga F, en la que sí están en peligro aún 3 equipos por el descenso y dos se juegan la tercera plaza de Champions.
Pero las reinas culés ya son verdaderas estrellas y han tenido que apretar aún más el calendario para poder jugar este rentable partido al otro lado del charco. Saliendo lunes por la mañana y volviendo el viernes, el jet lag no puede influir en este plan de viaje. El Club Chivas Femenil de Guadalajara aguarda la cita y se espera una afluencia masiva a las gradas. El Chivas es uno de los equipos más fuertes del país, habiendo conquistado dos veces la liga mexicana.
Para la celebración de este amistoso no han viajado por lesión ni la actual Balón de Oro Aitana Bonmatí, que tuvo que retirarse de la concentración de la selección por un problema muscular, ni Gemma Font quien también se encuentra recuperándose aún. A pesar de haber disfrutado este fin de semana de sus primeros minutos, tampoco se ha incluido en la expedición a Mapi León.
Un calendario apretado
¿Por qué no en otra fecha? Podemos decir que es prácticamente imposible. Por lógica (y convenio) las jugadoras no interrumpen sus vacaciones, y la selección española espera. Aún faltan dos ventanas de concentración para la absoluta nacional que se disputarán en julio y aunque la clasificación para la euro 2025 ya se haya ejecutado, lo cierto es que esos dos encuentros son fundamentales para preparar los Juegos Olímpicos, que en el caso del fútbol femenino dan comienzo el 25 de julio, un día antes de la ceremonia de inauguración. De llegar a la final el torneo olímpico acabará el 9 de agosto.
Selección y Barça obviamente no es lo mismo, pero prácticamente. El grueso de la roja está compuesto por jugadoras del FC Barcelona, y como ejemplo, la última lista que ofreció Montse Tome para los encuentros frente a Dinamarca, en la que llamó hasta nueve jugadoras: Aitana Bonmatí, Cata Coll, Ona Batlle, Jana Fernández, Irene Paredes, Vicky López, Mariona Caldentey, Salma Paralluelo y Alexia Putellas. Una convocatoria por cierto, que comenzó a 24 horas de la final de la Champions del Barça obtenida en San Mamés. Las campeonas apenas pudieron celebrar ese día su tercera orejona, puesto que el lunes ya tenían que estar en la Ciudad del fútbol de las Rozas.
Los partidos se suceden cada menos tiempo, las jugadoras y algunos entrenadores se hacen eco de q la carga de partidos supone un riesgo para unas futbolistas que van a terminar el año acumulando 44 encuentros disputados más los seis correspondientes a los olímpicos en el caso de llegar hasta la final.
La ausencia de descanso, aumento de lesiones
Han sido muchas voces las que se han unido en contra de los calendarios extenuantes para los y las futbolistas. En el fútbol masculino, entrenadores como Pep Guardiola se han mostrado contrarios de la acumulación de encuentros. También a nivel global, FIFPRO, la Asociación Internacional de Futbolistas Profesionales elaboró su propio informe el pasado diciembre. Dirigido por el Dr. Vincent Gouttebarge, médico jefe de FIFPRO, el estudio vinculaba cómo la ausencia de descanso entre partidos y viajes afectaban notablemente a la propensión de lesiones, incluidas las de ligamento. El informe analiza en total 139 jugadoras de élite en las dos pasadas temporadas, de las cuales, 58 se lesionaron en ese periodo de tiempo. Así el Dr. Gouttebarge afirmó que “nuestra investigación muestra que la congestión de los partidos en el fútbol femenino de élite está asociada a una mayor frecuencia de lesiones, especialmente de LCA”. LCA son las siglas que se traducen como ligamento anterior cruzado, quizá la lesión más temida por las futbolistas. Ellas además la sufren de dos a cuatro veces más que los futbolistas.
La propia Alexia Putellas sufrió en 2022 esta lesión que la tuvo apartada de los terrenos de juego durante 295 días. A tenor de los calendarios como potenciador de las lesiones, manifestó: “la conclusión que saqué de esta lesión por la experiencia que he tenido recientemente es que es una lesión multi factorial. Por eso es tan importante mejorar las condiciones de las jugadoras: el descanso, los viajes y las superficies en las que se juega”.