“Estamos trabajando en que quieren desarrollar mucho el fútbol femenino y por qué no una Supercopa española femenina en Arabia, no puedo avanzar nada, pero por qué no”. Estas fueron las declaraciones de Rafael Louzán a Movistar+, el pasado domingo mientras se disputaba la final de la Supercopa de España masculina.
Unas declaraciones que, como era de esperar, no han dejado indiferente a nadie. Que el nuevo presidente de la RFEF reconozca abiertamente que el fútbol femenino español podría disputar un torneo en Arabia Saudí era algo que nadie se esperaba.
Arabia Saudí no parece el país ideal para las mujeres
Nacer mujer en Arabia Saudí implica nacer con menos derechos humanos que los hombres. Según los análisis de instituciones internacionales, el país árabe, es uno de los países del mundo donde hay una mayor desigualdad de género. Si bien es cierto que poco a poco se ven algunos pequeños avances, como dejar conducir o votar a las mujeres, la discriminación hacia la mujer es un hecho.
En Arabia Saudí figura la tutela masculina, según esto, sólo los hombres pueden ser los tutores legales. Las mujeres han de pedir permiso para casarse, vestirse con la abaya (túnica negra que sólo deja al descubierto los ojos), no pueden acceder a algunos espacios públicos y, aunque sufran algún tipo de maltrato por parte de su marido, no pueden abandonar su hogar.
Estos son sólo algunos ejemplos de lo que sufren las mujeres saudíes en su día a día, una represión constante y asfixiante.
Hasta 2020 las mujeres no podían entrar en un campo de fútbol
La primera Supercopa de España jugada en territorio árabe fue en 2020. El torneo se disputó allí gracias a un polémico contrato del entonces presidente de la RFEF, Luis Rubiales, con los dirigentes del país asiático. En dicho contrato se tuvo que especificar que era obligatorio que dejaran entrar a las mujeres en el estadio en las mismas condiciones que los hombres, cosa que hasta entonces era impensable.
La RFEF quedó encantada con el torneo y desde entonces hasta hoy, con la excepción del año 2021 que no se pudo asistir debido a la pandemia, la Supercopa masculina se disputa allí.
El actual presidente de la RFEF, Rafael Louzán, sigue en la misma dinámica que dejó Rubiales y expresó que están trabajando para extender el contrato y que la Supercopa masculina siga disputándose en Arabia Saudí hasta 2034. “Nos vamos muy contentos con la empatía que hemos tenido con el gobierno y las autoridades. Toca refrendar el trabajo que hemos hecho”, sentenció tras la disputa de esta última edición.
La versión de la RFEF
Todas las declaraciones por parte del presidente de la RFEF son con intención de seguir con este vínculo con Arabia Saudí. “Creo que hay satisfacción y es bueno para este país porque hoy vamos a firmar una nueva declaración de intenciones, llevamos una semana trabajando muy intensamente con el gobierno, espero importantes novedades para el futuro”.
Además, por su parte, insisten en que “la celebración de la Supercopa impulsa el crecimiento del fútbol femenino en Arabia Saudí”. Estas declaraciones se deben a que desde que la Supercopa de España se disputa en territorio árabe se crearon varios equipos de niñas que actualmente entrenan en la Ciudad Deportiva de Yeda.
Varias españolas se encuentran trabajando allí, entre ellas Ana Ecube, la preparadora física que defiende este vínculo. “Durante los cuatro años que llevamos trabajando en este proyecto que arrancó en Riad hemos alcanzado la cifra de doscientas chicas entre seis y doce años con un crecimiento exponencial del que estoy muy sorprendida y feliz por los recursos que otorga Arabia Saudí y su federación de fútbol”, sentenció en un vídeo de la propia RFEF.
La Supercopa 2025 tampoco estuvo exenta de polémica
El pasado domingo el FC Barcelona se hizo con el título en Yeda, pero muchos de los focos no estuvieron aquí. Estuvieron en los múltiples aficionados y mujeres de futbolistas que denunciaron acoso por parte de los aficionados saudíes.
Los aficionados mallorquinistas criticaron la seguridad y el trato recibido por parte de la afición saudí. “Nos increparon. Nos hicieron fotos sin consentimiento, pegándonos collejas. Las mujeres han sufrido tocamientos. Ha sido muy desagradable”, sentenciaron.
El futuro de la Supercopa de España femenina es una incógnita. La edición de 2025 se disputará en Leganés, sede que se oficializó tan sólo un mes antes de que se dispute el torneo, por ello las declaraciones de Louzán fueron aun más sorprendentes. Lo que es seguro es que la RFEF tiene la última palabra y decidirá, según lo visto, a favor de sus propios intereses.