CASO MIR

¿Qué está pasando en el mundo del fútbol?

Rafa Mir, acusado de agresión sexual y en libertad con cargos, nos hace reflexionar sobre si el mundo del fútbol es un escenario propenso para la violencia sexual

Esta semana el mundo del fútbol volvía a quedar manchado con un nuevo caso de violencia sexual. Rafa Mir, en libertad con cargos tras una denuncia por agresión sexual, tendrá que ser juzgado, sin embargo, vuelve a recordarnos que desgraciadamente hay una larga lista ya de futbolistas con cargos similares.

Cuando aún tenemos muy presente el escándalo por la violación de Dani Alves a una joven de 23 años, el de Rafa Mir y Pablo Jara vuelve a sacudir muchas conciencias. ¿Qué está ocurriendo en el mundo del fútbol para que se produzcan tales agresiones?

Artículo14 consulta con la socióloga Beatriz Bonete, especialista en perspectiva de género e investigación social, además de con la periodista deportiva Mónica Marchante, con más de 25 años de experiencia en el mundo del fútbol, para abordar un tema delicado y preocupante que desgraciadamente tiene demasiados antecedentes.

El poder como respuesta

Para Bonete lo que lleva a los hombres en el mundo del fútbol a cometer estas agresiones, su conclusión es clara. “La respuesta es la de siempre: el poder. La violencia sexual, irónicamente, no va de sexo. La violencia sexual va de hombres (a veces chicos jóvenes) que quieren reafirmar su poder y su superioridad sobre las mujeres”. “A esto se suman dos elementos más”, prosigue, “el primero que el fútbol es, para muchos hombres (todavía), ese espacio en el que todo vale y en el que ser machistas es casi un derecho. El segundo, que el fútbol también trae consigo el espíritu de `manada´, o como decía Celia Amores, la `fratría´. Hombres que agreden juntos, en grupo. Por eso a veces nos encontramos agresiones sexuales como la de Dani Alves, y otras como la de Rafa Mir, en la que también hay un amigo imputado que estaba con él”, señala la experta.

Beatriz Bonete: “El fútbol trae consigo el espíritu de `manada´

“Todos ellos, hombres que siguen creyendo que las mujeres somos menos, valemos menos (o nada). Por eso las objetivizan, las deshumanizan, como si estuvieran performando una película porno (en el porno, como bien ha analizado Mónica Alario, lo más demandado son los vídeos en los que hay agresiones sexuales)”.

Para Mónica Marchante el problema no se limita al mundo del fútbol. “Yo lo llevaría al mundo de las estrellas del deporte, si te fijas en la NBA en EEUU ocurren también casos similares”, comenta la periodista. “Creo que estas estrellas viven en una burbuja y sienten que pueden hacer lo que les de la gana, que están por encima del bien y del mal. Refleja la sociedad que tenemos”. Marchante además se hace una pregunta verdaderamente preocupante “¿cuántos casos habrá que no se denuncien?”.

Las soluciones

¿Dónde hay que poner el foco para corregir esta situación? Beatriz Bonete nos responde, “en el ámbito de la violencia sexual hay que cambiar el paradigma sobre el consentimiento y hablar sobre el deseo. Yo puedo consentir algo que me propone mi pareja, pero pueden existir muchos condicionantes que hagan que ese “consentir” no se corresponda realmente con lo que deseas. Así que el foco tiene que estar ahí: en reivindicar, respetar y reafirmar el deseo de las mujeres“.

La situación contractual de Mir

El debate en el caso Mir no sólo reside en la parte de culpabilidad o inocencia, sino en el papel que tiene ahora su club, el Valencia con el jugador. Su club de procedencia es el Sevilla, aunque la relación contractual ahora mismo la tiene establecida el club che en calidad de cesión. Tras quedar en libertad con cargos, el futbolista murciano ha pedido unos días de permiso, y no ha estado en ninguno de los entrenamientos a las órdenes de Rubén Baraja esta semana. Los plazos le benefician ya que se encuentran inmersos en parón liguero. Los compromisos del equipo vuelven el próximo domingo cuando visiten el Metropolitano para enfrentarse al Atlético de Madrid.

En cualquier caso, las leyes de nuestro país protegen el contrato del murciano. Debido a la presunción de inocencia que impera en la legislación penal española, el Valencia no puede apartar o extinguir la relación contractual con el futbolista sin motivos de peso (como la medida de prisión provisional o una sentencia condenatoria). La abogada de derecho deportivo Reyes Bellver destaca que “podrían existir algunas clausulas relativas al comportamiento dentro del contrato que permitiesen rescindirlo en esta situación”. “Podría ocurrir dependiendo del contrato que ocurriese una sanción disciplinaria, o una multa económica, pero eso dependería del régimen interno del club” explica Bellver.

A este respecto el ex portero del Valencia, Santiago Cañizares ha querido pronunciarse en el Partidazo de la Cadena Cope, “Es tremendamente complicada, es un marrón lo que tiene el club con esta historia. Es que no sé qué medida tomar. Me parece injusta cualquier medida que se tome”.

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