La final de la Supercopa de España femenina se celebra en Leganés. Un Clásico inédito que ha generado mucho interés entre la afición que llenado las gradas del estadio de Butarque. Sin embargo, en el palco, la gran ausencia ha sido la del presidente de la RFEF, Rafael Louzán.
El fuerte temporal de lluvia y viento denominado Herminia, azota Pontevedra, Lugo y A Coruña en estos días y ha sido el causante de que el presidente haya podido volar a primera hora de esta mañana. Dos aeropuertos ha visitado Louzán quien finalmente ha tenido que optar por trasladarse por carretera. Los 600 kilómetros aproximadamente que existen puede que le impidan estar presente hasta la entrega de las medallas.
Algunos partidos, como el Racing Ferrol – Burgos o el Depor B y el Compostela también se han visto cancelados debido a la activación de las alertas debido a la borrasca Herminia.
Laporta si, Florentino no
En cuanto al resto de autoridades, el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta ha querido presidir la comitiva azulgrana, y ha estado presente en el palco de autoridades. El presidente del Real Madrid, a pesar de encontrarse en la misma localidad, no ha sido el representante del conjunto blanco. En su lugar, Catalina Miñarro, ha sido quien ha asistido a la final de la Supercopa.
Un palco donde ha destacado la presencia de Montse Tomé, la seleccionadora nacional, muy pendiente en un año crucial. Este verano se juega la Euro2025 en Suiza, un título que aún no posee la Selección Española. El próximo 21 de febrero la Roja volverá a jugar en Valencia frente a Bélgica en el primer partido de clasificación para la UEFA Nations League.
También Beatriz Álvarez, presidenta de la Liga F también ha acudido al palco de autoridades, como una de las principales caras del fútbol femenino español. Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español también ha querido acudir a la final.
También el presidente de la Federación Madrileña de Fútbol, Paco Díez acompañó al resto de autoridades en el palco de Butarque.