No era ni muchos menos fácil la papeleta que se le presentaba a Paula Badosa en su estreno en Ningbo, ya que enfrente tenía a la joven rusa Diana Shnaider, una cañonera que le iba a poner las cosas muy muy difíciles en su regreso a las pistas después de no haber podido tomar parte en el WTA 1000 de Wuhan. Las molestias estomacales que le impidieron jugar la semana pasada cortaron una trayectoria muy destacada en esta gira asiática, en la que rozó la final en el WTA 1000 de Pekín. Pero eso es pasado, porque ahora le tocaba estrenarse en el penúltimo torneo del año. Y lo ha hecho a lo grande, venciendo en una batalla de más de dos horas y tres sets de duración, por 4-6, 6-3 y 6-3.
Tras quedarse casi sin opciones de estar en las WTA Finals de Riad, Badosa afrontaba el encuentro con la tranquilidad de jugar para disfrutar y ganar, y así lo ha hecho, hasta el punto de que en un gran inicio ha estado cerca de romper el saque de su rival, pero la rusa, una de las tenistas más potentes del circuito, no estaba por la labor. Si algo tenía la catalana es que estaba sacando bien, aunque encadenaba aces con con dobles faltas, al final han sido ocho de cada tras el partido.
Pero la primera manga se le iba a complicar en el momento clave, el décimo juego, cuando sacaba para mantenerse con vida, y tras no haber concedido una sola oportunidad de break a su rival, le ha dado dos y a la segunda, Shnaider ha conseguido cerrar el parcial con un passing en el que la red ha ayudado.
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Remontando a lo grande
Tocaba remar y lo hizo, vaya si lo hizo. La rusa estaba imparable con el saque y sobre todo con una derecha demoledora que no concedía una solo oportunidad a Paula, hasta que en el séptimo juego ha encontrado la forma de ‘meterle mano’ y ha roto por primera vez en todo el duelo. Una ventaja que no solo no ha dejado escapar, si no que ha ampliado con otra rotura para cerrar el set por 6 a 3. Además, su rival ha ido bajando poco a poco la potencia, hasta el punto de que ha necesitado la atención del fisio por un problema en la espalda.
Parecía herida de muerte y que todo estaba encarrilado para la española, para nada más lejos de la realidad. El tercer parcial ha empezado con una resurrección, la de la número 16 del mundo, que ha arrancado penetrando en el saque de la jugadora de Begur. Pero sus molestias le perjudicaban al saque y gracias a eso Badosa lo ha recuperado a la primera y a partir de ahí ha ido cimentando su victoria, que al final ha mantenido gracias a no perder el saque, ya que al resto, pese a tener opciones, siempre acababa desperdiciándolas.
Y en el noveno juego lo ha conseguido, certificando su pase a segunda ronda, donde no jugará hasta el miércoles, cuando se medirá a la china Wang Xiyu, invitada por la organización y que ha arrasado en su debut a Kamila Rajimova. Además, un aspecto a tener en cuenta es que a Badosa se le ha abierto el camino, porque ni Emma Navarro ni Jasmine Paolini, las dos cabezas de serie más altas de su parte del cuadro, serán de la partida, tras ausentarse a última hora.