La sala 1 de la Audiencia Nacional afrontaba una nueva semana del juicio a Luis Rubiales.Montse Tomé fue una de las tres testigos previstas en la quinta jornada del juicio que también sienta en el banquillo por coacciones a tres exdirectivos de la Federación: el exdirector deportivo de la Selección masculina Albert Luque; el anterior entrenador de la femenina, Jorge Vilda; y el exjefe de marketing de la RFEF Rubén Rivera.
La actual entrenadora de la Selección femenina de fútbol era la número dos de Vilda durante el Mundial de 2023. Comenzaba la defensa de Rubiales, en nombre de Olga Tubau, quien preguntaba por el beso, “yo no lo vi”, confirmaba Montse Tomé. “Hablé con Jenni de esto a partir del 28 de agosto” una vez que hubieran regresado a España. “No estuve en ninguna conversación sobre este tema”, mantenía la asturiana.
La Audiencia
Sobre la Audiencia de la RFEF que se celebraba el 25 de agosto y en la que Rubiales manifestó que “no iba a dimitir” Montse Tomé afirmó que Jorge Vilda “me dijo que tenía que ir, pero sé el motivo porque nunca había ido antes. Me sentí muy incómoda”, confesaba la seleccionadora.
A la pregunta de si conocía el protocolo anti acoso, la asturiana contestaba: “Nunca he hablado con nadie de la Selección de eso”.
Días después de la Audiencia, que muchos han señalado tanto a De la Fuente como a Tomé por aplaudir al expresidente, la segunda de Vilda en aquel momento emitía un comunicado que reprochaba el comportamiento de Luis Rubiales. “Estábamos en contra de lo que había pasado y que nos posicionábamos con la jugadora”, mantenía Tomé sobre dicho comunicado.
Uno de los momentos más tensos de la mañana, cuando el juez Fernández-Prieto le llagaba a preguntar a María José López, la abogada de AFE :”¿Le pegamos para que diga lo que Ud quiere? “, reprochaba el juez, sacando la sonrisa de los presentes.
La primera lista
La primera lista de Montse Tomé como seleccionadora se ofrecía el 18 de septiembre en la Federación. Una convocatoria en la que Jenni Hermoso no fue llamada. Uno de los pilares de la defensa de Jenni que trata de evidenciar que aquello era una represalia por no haber hecho el comunicado de ayuda a Luis Rubiales para quitarle hierro al asunto.
A las preguntas de esas razones de no “En la decisión de no convocar a Jenni Hermoso soy la absoluta responsable. Lo consenso con mi cuerpo técnico“. Tomé ratificaba en esa decisión como deportiva.
Tomé continuó. “Porque creo que deportivamente no estaba en las condiciones para ejercer en la fecha FIFA. Como seleccionadora , Jenni Hermoso no había jugado suficiente con su equipo”. Sin embargo tras la pregunta de Marta Durántez sobre lo que había contestado en la fase de instrucción, Tome declaraba: “(Jenni) Estaba viviendo una situación muy desagradable y la presión mediática me hizo tomar esa decisión y como seleccionadora me llevó a pensar que había mejores jugadoras”. A lo que terminó de confirmar con las preguntas de la letrada de AFE: “No fue un castigo”, mantenía.
EFE/ Fernando Villar
En esas cábalas deportivas y mediáticas, Tomé afirmaba que “el señor Vilda no intervino. Tampoco el expresidente, a lo que la asturiana contestó: “Yo ya no tenía relación con él. No hablé con Rubiales al término del Mundial”, declaraba.
Evitó decir Rubiales
Montse Tomé evitó pronunciar el nombre de Luis Rubiales. De hecho, cuando se le preguntó quien era el presidente de la RFEF cuando fue contratada. “Yo entré en la Federación de la mano de Jorge Vilda. Mi contrato lo firma Esther Gascón“, contestaba la seleccionadora. Cuando la Fiscalía le preguntó expresamente quien era presidente en el momento de su fichaje como segunda entrenadora, contestaba “no lo sé”. Algo llamativo sin duda.
Cuando se le preguntaba por su nombramiento como primera entrenadora sí dijo el nombre de Rocha, quien era presidente de la Gestora tras la salida de Rubiales. “Fui nombrada el 5 de septiembre. En aquel momento no había seleccionador. Rafa del Amo me propone y Rocha era el presidente”, afirmaba Montse Tomé.
La declaración de Salvador Losa
También estaba citado el conseller de Presidencia y Deportes del Consell de Ibiza, Salvador Losa, a petición de la defensa de Rubén Rivera. Losa relató como durante la celebración del Mundial llamó a Rivera para que considerasen Ibiza como escenario de la celebración de las jugadoras.
Muchas de las preguntas se basaron en la comida en el hotel, el recibimiento oficial y el desfile de celebración. “Me costaba identificar quien era cada jugadora”, reconocía el conseller cuando se le preguntaba por la comida en la que ocurrieron las supuestas insistencias de Rubén Rivera a Jenni Hermoso.