Por cuarto año consecutivo el estudio de la visibilidad en el deporte femenino ha sido presentado haciéndolo coincidir con la semana en la que se le celebra el Día Internacional de la Mujer. Este miércoles, una nueva edición de la investigación firmada por Rebold y la agencia de comunicación estratégica AppleTree. El resultado arroja un dato esperanzador: la visibilidad ha aumentado 15 puntos con respecto al mismo estudio del 2021, aunque aún hay mucho por hacer.
El interés en el deporte femenino, concluye el estudio, se queda en un 25% de visibilidad en 2024, un año, hay que recordar, olímpico por lo que siempre aumenta el interés en el deporte en términos generales.
Las marcas respaldan el crecimiento
En la mesa de debate se sentaron tres marcas españolas cuya apuesta por el deporte femenino es innegable. Iberdrola, Vueling y Visa representados por Andrea Sánchez, Sandra Hors y Javier Perales, tienen multitud de acciones en compromiso con algunas de las caras más famosas del panorama español como Aitana Bonmatí o Alexia Putellas.
Sin duda, este compromiso hace que el aumento de la visibilidad vaya en aumento. “Desde Iberdrola tratamos de poner el foco en la parte positiva. En ese cambio, en esa cuota que las mujeres estamos ganando. Por supuesto queda muchísimo por hacer pero cada vez son más los que se están sumando a este pacto por la igualdad”, mantenía Andrea Sánchez. “Cada vez estamos siendo más reconocidas, cada vez hay más referentes. Que Alexia Putellas sea una de las españolas más seguidas es una noticia muy positiva y como ella creo que hay muchísimas deportistas”, asegura.
El cambio se traduce en cómo la sociedad reconoce esos referentes del deporte femenino como propios. “En 2016 cuando empezamos con el patrocinio si pedías que te dijesen cinco deportistas españolas era complicado. En cambio a día de hoy creo que hay pocas personas que no sepan cinco deportistas españolas”, explicaba Sánchez. La ponente, además de representar a la eléctrica en esta mesa redonda como responsable de patrocinio deportivo, hablaba también como deportista, ya que ha sido jugadora de balonmano playa.
La brecha aún por superar
A pesar del crecimiento del deporte femenino, los datos en audiencias y seguimiento cuando se comparan con grandes competiciones de fútbol masculino son desoladores. La final de la Eurocopa masculina se vio un 555% más que la final de la UEFA Nations League femenina de 2024 en donde España se coronó como campeona ocho meses después de haber ganado el Mundial de Australia.
Unos dos millones siguieron la final europea femenina (hay que tener en cuenta que no comparable a una Euro ni en prestigio ni en repercusión) mientras que el logro del cuarto entorchado continental en la Eurocopa de este verano 2024 fue seguida por más de 13 millones de telespectadores. Una comparación que aunque algo desvirtuada, si tiene como punto en común, el hecho de ser en la misma cadena RTVE y en un horario similar.