Las futbolistas de élite apenas tendrán vacaciones este año. La LigaF acaba de terminar hace apenas dos días, las selecciones europeas tienen que disputar otra ventana de partidos clasificatorios para el Europeo de 2025 entre el 12 y el 16 de julio, y 10 días después arrancan los Juegos Olímpicos de París, donde estarán las mejores jugadoras del planeta. España debutará el día 25 contra Japón y allí, seguro, estará Alexia Putellas.
Cualquier persona estaría pensando en huir de la rutina lo más lejos y rápido posible, apagar el teléfono móvil, buscar un sitio en el que desconectar y no pensar en ninguna obligación. Pero hay mujeres que están hechas de otra pasta, y Alexia es una de ellas. Sí, ha hecho la maleta y ha viajado muy lejos de España, hasta Cartagena de Indias. Pero no ha sido un viaje de puro ocio: Alexia ha reactivado el chip de empresaria solidaria, y quiere abrir en Colombia una sede de su Fundación Eleven.
La Alexia más solidaria
Una iniciativa que presentó hace apenas un mes y que ya acelera para ayudar a niñas de entornos difíciles y en situaciones de vulnerabilidad, siempre a través del deporte en general y del fútbol en particular.
La faceta más solidaria de Alexia Putellas no sabe de desconexión, de vacaciones ni de ocio. Como ella misma dijo, esta idea surgió en su peor momento deportivo y personal, cuando se rompió la rodilla. Sentía que ella necesitaba un incentivo para seguir adelante, mirar al futuro y ayudarse a sí misma, y encontró la luz en poder ayudar a las demás, a las niñas de entornos más difíciles.
La Fundación Eleven “busca reducir la brecha de género en el deporte y proporcionar a las niñas las herramientas necesarias para su desarrollo personal y social”, tal y como declaran sus propios principios. Una aventura que se hizo realidad, y que ahora la lleva a lugares tan lejanos como Sudamérica.
La primera parada ha sido Colombia, donde estrenará sede en Itagüí, pero no será la única: México y República Dominicana están en el radar solidario de la estrella catalana.
Pero tampoco iba a desaprovechar el viaje para trabajar única y exclusivamente; su novia Olga Ríos y ella han tenido tiempo para conocer la ciudad, disfrutar de la gastronomía y de los paraísos naturales que ofrece la maravillosa Colombia. Una pequeña ventana de disfrute en medio de un calendario endiablado para una futbolista que este año lo ha ganado todo con el Barça, y que quiere tocar el cielo del Olimpo parisino con la camiseta de España, como colofón a una temporada tan larga como apasionante.
Campeona de Europa, con un título más de liga en sus vitrinas personales y del Barcelona, con pleno de victorias y los deberes hechos de cara a los dos últimos partidos clasificatorios de España para la Eurocopa, y con la ilusión de una medalla olímpica en el horizonte de agosto en París. El año de Alexia Putellas es digno de enmarcar, pero también suena agotador.
Sin embargo, la estrella del fútbol no quiere trascender en el tiempo solo como deportista: su mentalidad solidaria piensa en las Alexias y también en las mujeres libres y felices del futuro: aquellas que de niñas no están teniendo las oportunidades que ella sí pudo tener, y que cambien su forma de ver la vida.
Una vida que puede ser mejor, que puede ser saludable, que puede ofrecer igualdad de oportunidades independientemente del género y que puede tener guardadas a las próximas Alexias Putellas, las lideresas deportivas de un futuro, por qué no, cercano y real.