Leticia Herrería (Santoña, 1959) no sospechaba que a sus 65 años le quedaba por vivir una de las mayores aventuras de su vida. Se enteró a través de una amiga de que Santa Lucía estaba organizando un desafío para publico senior que proponía alcanzar la cima del volcán Vallunaraju a 5.689 metros y no sé lo pensó dos veces. Envío la solicitud y fue elegida entre más de cien candidaturas enviadas desde siete países. Cuando ustedes lean estas líneas el avión con los cinco expedicionarios estará aterrizando en Lima en un viaje que durará hasta el próximo 29 de septiembre.
Serán cinco (Leticia, Pepe, Pilar, José Antonio y Álvaro) los expedicionarios mayores de 65 años que se pondrán a prueba. El rasgo común entre todos, apasionados del deporte, espíritu aventurero y de equipo. El equipo estará dirigido por Carlos Martínez, médico de emergencias especialista de medicina de la alta montaña, parte del equipo de alpinista Carlos Soria en los catorce ocho miles. “Nos hemos conocido en los reconocimientos médicos, y luego en unos días de entrenamiento que hemos hecho en el Pirineo aragonés. El ambiente entre nosotros es estupendo, se respira una maravillosa complicidad”, asegura Herrería.
Para Leticia la vida sedentaria nunca ha ido con ella. De hecho, fue deportista de alto rendimiento en unos años en los que las mujeres en el deporte profesional eran una rara avis. Su pasión, la gimnasia rítmica le llevó a coronarse en el Mundial de 1975 con la medalla de bronce, con sólo dieciséis años. Esa disciplina intrínseca en la rítmica dice que le está ayudando en la preparación previa aunque sobre todo “creo que me ayudará en las etapas de ascenso para llegar a la cumbre prevista”, nos comenta la exgimnasta, quien confiesa sentir alguna duda “de alcanzar semejante desafío, sobre todo por la aclimatación a la altura”.
Por ello, desde que fue admitida tras unas exigentes pruebas en la Sierra de Madrid, no ha parado de entrenar. No es para menos. El reto de subir al pico de la Cordillera blanca de Los Andes peruanos, a 5.689m de altura, lo alternarán en el ascenso con etapas a pie y otras en bicicleta. Habrá primeros varios ascensos con el fin de aclimatarse como al Lago 69 a 4.600 metros o al Yanayacu, antes del objetivo final donde espera el plato fuerte, el volcán Vallunaraju. Para ello, Carlos Martínez es quien ha diseñado todos los entrenamientos previos,
Este reto, y su valentía, no ha pasado inadvertido en su Cantabria natal. De hecho, dos días antes de partir, Leticia fue recibida por la presidenta de la Comunidad María José Sáenz de Buruaga, quien se interesó por su aventura y le entregó la bandera cántabra para que pueda coronarla en la cima andina.
Desde Santa Lucía nos cuentan que el objetivo de este reto físico de fortaleza psicológica y de superación personal es inspirar y animar a los mayores de 65 años a hacer deporte, llevar una vida saludable y promover la longevidad positiva. “Pese a estar jubilados, quieren demostrar que continúan activos y que aún tienen mucho que aportar a la sociedad” nos comentan desde la organización. Su misión, nos explican, es dar protagonismo a las personas mayores que nos enseñan con su experiencia y sabiduría.
“Para mí supone una gran oportunidad de demostrarme a mí misma que no importan los años en la vida sino la vida en los años”, el lema de Leticia Herrería es el que todos deberíamos guardarnos y que seguro que sus dos nietas siguen en el futuro.