El Mutua Madrid Open, el torneo con más prestigio jugado en territorio español, ya ha dado comienzo. Con motivo de ello, sus protagonistas no han dudado en pasar por los micrófonos de todos los periodistas allí presentes y entre ellas hemos encontrado una particularidad. Tanto Mirra Andreeva como Jasmine Paolini, número 7 y 6 respectivamente en el ranking WTA, tienen un entrenador español ganador de una medalla olímpica.
El caso de la rusa era más que conocido. Desde que con 15 años despuntara en el tenis profesional, Andreeva, siempre ha ido de la mano de Conchita Martínez y con ella está cuajando la mejor temporada de su vida. Sin embargo, el caso de la italiana es más impactante. La finalista de Wimbledon y Roland Garros llevaba más de una década con Renzo Furlan, pero, desde el pasado torneo, es Marc López el que ocupa su box.
Andreeva se siente casi como en casa
“Estoy muy emocionada de volver a Madrid. He estado entrenando en Barcelona entrenando con Conchita. He necesitado unos días de adaptación, como de costumbre, pero hemos tenido buenos días”, así comenzaba la rueda de prensa de una sonriente Andreeva. La joven tenista es consciente de que aquí comenzó su idilio con el circuito profesional cuando, en 2023 y con tan sólo 15 años, utilizó la invitación que el torneo le otorgó para llegar a los octavos de final. “Con 16 años jamás pensé en que estaba en octavos de final, ahora sí que me siento orgullosa de ello, pero estoy aquí para conseguir algo mejor”, comentaba sobre su hazaña.
Andreeva se dio a conocer al mundo esa temporada en este mismo torneo, pero en España mucha gente la descubrió gracias a Conchita Martínez, su entrenadora. “Tener a Conchita como entrenadora creo que hace que tenga un apoyo extra en Madrid por parte de los aficionados, así lo siento. Al ser española mucha gente de aquí incluso empezó a conocerme por ella y sí que creo que puede hacer que me apoyen un poco más”, reconocía la tenista rusa.
Quiere continuar con su mágico año
De la mano de la triple medallista olímpica, Mirra, ha crecido hasta ser una de las mejores jugadoras del mundo. Sus victorias en Indian Wells y Dubái los pasados meses así lo corroboran. “Alguien me dijo, como consejo, que no pensase en nada más que en el punto que estoy jugando ahora mismo, que si no va como yo lo espero, que me olvide de eso y a por el siguiente y eso traté de hacer en Dubái e Indian Wells. Desde entonces en cada partido que juegue lo voy a enfocar así, centrada en el punto que estoy disputando y si no cae a mi favor, olvidarlo y enfocarme en el próximo”, reflexionaba, aunque añadía con un tono algo bromista: “No diré quién me lo dijo”.
Jasmine Paolini, un nuevo comienzo
“He entrenado hoy por primera vez y es maravilloso estar de vuelta en Madrid, es una ciudad increíble y me encanta”, decía sin titubear una confiada Paolini. La italiana cuajó la mejor temporada de su vida el pasado año y por ello aún se le pregunta por su maravilloso 2024.
Paolini alcanzó la final de dos de los torneos más importantes del año, pero en ninguno pudo hacerse con el título. “Me costó menos recuperarme de la derrota de Roland Garros porque Iga Swiatek jugó un partido increíble y poco pude hacer. En Wimbledon sí que estuve más cerca de poder alcanzarlo y no fue suficiente, fue más difícil de digerir, aunque trato de ver el lado positivo, fue una experiencia maravillosa y fue increíble jugar esas finales”.
El buen hacer de Paolini ha hecho que sus exigencias sean mayores este curso. Tal es así que dejó a su entrenador de prácticamente toda la vida, Renzo Furlan y ha buscado en Marc López una nueva visión para su juego.
“Fue un poco random la elección de Marc López como entrenador. No conocía a Marc de antes, entonces hablé con mi agente y le dije, si le propongo a Marc que me entrene, creo que es un perfil que me podría encajar y así fue. Ahora estamos trabajando juntos, estamos conociéndonos un poco más y por ahora tiene buena pinta. Nos lo estamos tomando con filosofía, yendo paso a paso, no hemos querido cambiar demasiado en estos primeros torneos, pero ya noto algunas cosas, habla de una forma diferente que mi anterior entrenador, sólo queda esperar”. Jasmine y Marc formarán dupla hasta Roland Garros, es decir, formarán equipo durante toda la gira de tierra y, una vez termine el torneo parisino, tomarán una decisión.
Una dupla campeona olímpica
Tanto Marc como Paolini saben lo que es saborear el metal más codiciado de los Juegos Olímpicos. Ambos son campeones en la modalidad de dobles y, aunque es algo con lo que la tenista no soñaba, hoy se da cuenta de lo que consiguió el pasado verano en París. “Los Juegos fueron una experiencia increíble, pero yo de pequeña no soñaba tanto con los Juegos. Para ser honesta, pensaba más en los Grand Slams, pero al estar allí…sólo deseaba ese oro y cuando lo gané me di cuenta de la magnitud que significaba. Es increíble representar a Italia y cada vez el tenis está siendo más importante allí”, sentenciaba Jasmine.