La atleta Eva Moral no esperaba tanta afluencia de medios a la convocatoria de ayer por la mañana, “vengo de nadar me he hecho una coleta y he pensado, no saldré en tantos sitios, ya verás mi madre, me va a decir que podría haberme peinado” comenta entre bromas mientras nos colocamos en la posición para entrevistarla. Y es que la presentación del himno oficial de los Juegos Paralímpicos ha congregado a gran parte de la prensa deportiva del país. “Ganar dos veces” es el nombre de la canción, ya disponible en las principales plataformas, y Eva Moral ha sido parte además de la grabación del videoclip “fueron muchas horas pero una experiencia buenísima, hoy verlo terminado ha sido muy emocionante”. Con las emociones a flor de piel ha estado la conductora, Almudena Cid, el presidente del CSD José Manuel Rodríguez Uribes y el Presidente del Comité Paralímpico junto a la familia Pascual, la patrocinadora de la banda sonora.
El nuevo hit llena la sala al ritmo de la voz de Paula Koops y la composición del Lucas Vidal, “me esperaba algo más nostálgico porque nos tienen acostumbrados a eso, no tan animado y alegre, ha sido una grata sorpresa” comenta Moral. Y es que para ella, es imprescindible que se vaya “desligando la pena de la discapacidad”. “Estamos muy muy hartos de eso, no como deportistas, como sociedad”, prosigue Moral, “en todos los ámbitos sociales cuando ves una persona con discapacidad lo primero que te sale es decir que pena, tenemos que normalizar, visibilizar la discapacidad”, explica Moral. “No me gusta nada que me llamen valiente, o que me hablen de forma condescendiente, tenemos mucho aún por hacer y mucho por cambiar”. Por ello, sus esfuerzos van destinados a dar charlas como coach en colegios “sé que todo el mundo lol hace con buena intención, pero hay que educar en la diversidad”.
Eva Moral en la Copa del Mundo del Vigo el pasado 1 de junio
Ella lleva viviendo 10 años en esta situación de discapacidad cuando un desafortunado día lluvioso de septiembre de 2014, subiendo en bici al Puerto de la Morcuera cayó por un barranco de siete metros. Quedó en silla de ruedas y decidió hacer del deporte su modo de vida. 20 medallas, una de ellas olímpica, avalan su trayectoria mientras espera su prueba de triatlón en París con ilusión y mucho esfuerzo. “Ahora los días son un poco de locos, saco las máximas horas posibles para entrenar, que es mucho al aire libre con la bici con la silla de atletismo, así que casi te diría que son 24horas, porque no es sólo entreno, también hay que recuperar bien, hay que alimentarse bien, el tiempo de fisio, dejar espacio a los patrocinadores también”.
“Quizá TVE deba gastarse menos millones en otros programas y comprar los derechos de los Juegos Paralímpicos”
Los tiempos, esos que Eva Moral multiplica como el milagro de los panes y los peces para poder llegar a los Juegos aspirando a todo. “Cada vez el nivel es mayor, estoy muy motivada pero también tengo la presión de que si en Tokio volví con medalla ahora tengo que repetir, pero voy a por todas”. Lo hará con ese mítico 101, el dorsal con el que se convirtió en medallista olímpica y que ahora es un poco su amuleto de la suerte. Sobre las igualdad que el CSD concedió hace poco en los premios a deportistas paralímpicos, Moral cree que “no podíamos hablar de igualad y de inclusión sin una medida como esa”, aunque aún lamenta que los derechos de los Juegos Paralímpicos no hayan sido todavía comprados, “sobre todo porque en Tokio tuvimos más audiencia casi que los Juegos Olímpicos y si RTVE es pública, quizá deberían gastarse menos millones en otros programas y comprar los derechos”.
El pasado fin de semana se alzó con la victoria en la Copa del Mundo de Vigo “me sentí muy bien era la primera vez que se hacía allí, era una gran forma de testearme, y me encontré con muy buenas sensaciones, tuve buen feeling, la verdad que acompañó todo y además me pude llevar a toda mi tropa”. Esa tropa a la que se refiere incluye a su bebé de dos años, Carmen, a la que aún da el pecho. “Yo que pensé que no iba a aguantar ni un mes con la lactancia y aquí sigo, pero se lo tengo que quitar de cara a París, porque va a ser complicado, porque no sé quien es más adicta si ella o yo”.
Competir embarazada
El descanso es otro de los factores que no combinan muy bien entre la maternidad y el deporte de élite. “Yo soy de dormir bien, ella no te deja descansar lo que debería, pero no se si es que con la maternidad nos hacemos más fuertes, pero no me quejo, mi sueño era el de ser mamá, ella es mi mejor medalla”. Una maternidad que Eva planeó milimétricamente “y eso que desde que estoy en silla de ruedas ya no me gusta planificar nada porque la vida te descuadra los planes en segundos”. Pero en el caso de su embarazo quiso hacerlo en mitad del ciclo olímp0ico para no perderse la oportunidad de ir a los JJOO de este 2024. “Volví de Tokio, empezamos a buscarlo y a la Campeonato de Europa en septiembre que gané embarazada sin saberlo“, luego tuvimos el campeonato del mundo en Abu Dabi que no se lo comenté a nadie de la federación para no perder el tema del ranking, que luego cuesta mucho recuperarlo, y ahí gané un bronce”. La congelación de los puestos del ranking tan ansiada por muchas madres y que su federación al fin ha oído la petición. “Cada vez somos más madres deportistas de élite y cada vez tenemos que renunciar menos”.