Adiós a los Juegos Olímpicos. Carolina Marín tuvo que abandonar el pabellón lesionada por una nueva lesión en su rodilla derecha cuando su semifinal estaba prácticamente ganada.
El gran susto llegaba a las 10:18h cuando en una caída en la que se le iba el pie Carolina Marín se tiraba al suelo aquejada de la rodilla derecha entre gritos de dolor.
Entraban los entrenadores a la pista (algo que en principio está prohibido) haciéndonos temer lo peor, como acabó ocurriendo. El sobrecogimiento del público presente era palpable, alguno se llevaba las manos a la cara. Con su historia de ambos cruzados rotos, y sus últimas molestias en junio, no parecía que pudiese ser sólo el golpe. Tres minutos eternos hasta que Carolina Marín se levantaba intentando hacerlo a pesar del dolor. Había que probar a un rally para ver si la rodilla respondía. Pero no pudo. Su rodilla derecha, como antes de Tokio 2020, volvió a decir basta.
Llorando desconsolada, entre dolor y frustración con el aplauso de ánimo de toda la grada que no quisieron dejar de aplaudir en todo momento, público rival y español unido en una gran muestra de solidaridad. Agarrada a su entrenador no podía soportar esa tremenda mala suerte. “La emoción nos embarga” comentaba el comentarista de TVE.
PARÍS, 04/08/2024.- La jugadora española Carolina Marín es atendida por su equipo tras sufrir una lesión durante su partido de semifinales de bádminton femenino individual de los Juegos Olímpicos de París contra la china Bing Jiao He en el pabellón a Chapelle Arena este domingo en la capital francesa. EFE/ Miguel Gutiérrez
Rechazando la silla de ruedas y saliendo dolorida por su propio pie, se retiraba Carolina Marín llorando dando gracias a la grada, en una de las imágenes más desgarradoras de estos Juegos Olímpicos, donde obtuvo también el apoyo de su contrincante.
El silencio en el que se quedaba la Porte de la Chapelle Arena era en el que quedaba todo amante del deporte. Se quedaba a ocho puntos de pelear mínimo por la plata.
Primer set ganado
La mañana no podía empezar mejor. La Chapelle Arena se presentaba a reventar. Con más griterío y ánimos si cabe que ayer a pesar de ser casi dos horas antes. Y es que con menos de 24h de descanso se enfrentaba Carolina Marín a sus semifinales, el paso que le separaba para luchar por la ansiada final.
El primer set fue para la onubense, dominando en todo momento y que resolvió de forma holgada aunque su rival, He Bing Hiao le puso en más problemas que Aya Ohori, la japonesa ayer.
Concluía el primer set con el parcial favorable para la jugadora onubense. “Ahora es importantísimo” le recalcaba Fernando Rivas, su entrenador, en unos minutos permitidos de coaching (y de escuchar para el espectador) que son un auténtico lujo en estos Juegos. Las indicaciones iban dirigidas a ganar en iniciativa y recordando las corrientes de aire que podían influir negativamente en la posición de la pista que le tocaba en el segundo set a Carolina.
Los errores no forzados de Carolina Marín le dieron oxígeno a la jugadora china He Bing Hiao, bronce en el Campeonato Mundial de Bádminton en 2018 y 2021y que había derrotado ayer a la 2 del mundo, su compatriota Chen Yu Fei por 21-16 y 21-17, pero no fueron suficiente para ir en ningún momento por delante en ninguno de los parciales.
Un partido completamente encarrilado en el que Carolina se quedó a ocho puntos de luchar por una nueva final olímpica. Las imágenes más duras, que nunca queremos ver en deporte.