“Unidos por la Discapacidad” ha puesto en marcha una iniciativa para visibilizar y concienciar en el Día de la Discapacidad. El evento celebrado en la sede del Centro de Alto Rendimiento de Madrid, estaba organizado por la Oficina del Parlamento Europeo, la Representación de la Comisión Europea en España, el Grupo Social ONCE y LaLiga. Además contaron con la presencia de deportistas de la talla de Alba García Falagán, bronce en los pasados JJPP de París.
Los anfitriones han sido Alberto Durán, presidente del Comité Paralímpico y vicepresidente del Grupo Social ONCE; Clemente Villaverde, presidente de la FUNDACIÓN LALIGA; y José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del Consejo Superior de Deportes, en un acto conducido por la periodista Paloma del Río.
Las actividades incluían un partido de fútbol inclusivo y una carrera de relevos adaptada con atletas paralímpicos ciegos. Ponerse en su piel, la mejor manera de saber a lo que se enfrentan los cientos de deportistas con discapacidad. La madrileña Alba García Falagán es una de ellas. “Ha sido una jornada muy interesante”, nos explicaba al acabar el acto. “Creo que ellos han sido capaces de empatizar un poco con una persona ciego y como se desenvuelve su nivel deportivo. Han estado muy predispuestos a aprender”, comentaba.
Y es que ya en el día a día Alba siente que el mundo, aunque está dando pasos, podría ser mucho más accesible para todos con pequeñas cosas, “algo tan fácil como un etiquetado en braille en los productos de alimentación. Sería algo necesario para nosotros, como las cartas de los restaurantes, las webs con descripción de imágenes, o por ejemplo, que en la calle los cruces están señalizados” nos explica.
El papel de los guías
Cuando nos centramos en su trabajo como deportista de élite, también cree que estas jornadas acercan su labor a la sociedad, y aquí también es importante poner el foco en lo que falta. “A nivel deportivo yo pediría que se remunerase el trabajo de los guías. Para los atletas ciegos es fundamental. Es complicado que que vengan sin ningún tipo de recompensa porque al final es un trabajo puramente altruista. Yo he tenido suerte, pero hay deportistas que sí lo necesitan”, insiste García Falagán.
Bronce en París
Con la resaca emocional de lo conseguido en París, Alba aún cree que le queda tiempo para asimilar todo lo vivido “todavía estoy aterrizando en ese sentido”. La saltadora de 20 años se hizo con un bronce en la modalidad de salto clase T11, en el año además en el que al fin se igualaron los premios económicos de las medallas “porque ya valían lo mismo” nos puntualiza, “pero sí a nivel económico, el valor de la medalla, el premio se ha igualado y es un paso muy grande para poner en valor el deporte paralítico. Y también bueno, la ley del deporte también nos protege un poco en este aspecto”, explica la atleta madrileña.
Con un nuevo ciclo olímpico en marcha, Alba ya mira hacia el futuro, el que espera en cuatro años. “Nuestro objetivo es Los Ángeles 2028, quién sabe si otra medalla, pero de momento, estoy enfocada en mejorar mis marcas de cara al próximo Mundial 2025 que parece que será en la India”, señala.
“Que la gente no sienta miedo ni rechazo hacia nosotros”
Cuando le preguntamos qué mensaje daría en la conmemoración de un día tan importante como es el de la Discapacidad lo tiene claro, “que la gente no tenga miedo ni sientan rechazo hacia nosotros, se puede aprender mucho de la discapacidad y a nosotros también nos pueden aportar mucho en nuestro día a día”, admite.