Crítica

‘Anora’: una fallida comedia que diluye el drama de no verse a sí misma

Ayer, en el Festival de Cine de San Sebastián se presentó 'Anora', 'Tarde de soledad' y 'El lugar de la otra'

Fotograma de la película 'Anora', presentada en el Festival de Cine de San Sebastián
Fotograma de la película 'Anora', presentada en el Festival de Cine de San Sebastián

Había muchas, muchas ganas de ver Anora, se percibía en el ambiente y se oía en los comentarios de los más jóvenes entre pintxo y pintxo. “Hemos venido prácticamente para ver la de Sean Baker” comentaba una chica a unos conocidos que acababa de saludar en un bar de lo viejo.

La ganadora de la Palma de Oro en Cannes el pasado mes de marzo se proyecta estos días en la sección “Perlas” del Festival de Cine de San Sebastián. El director de The Feeling That the Time for Doing Something Has Passed (2023), Red Rocket (2021) o The Florida Proyect (2017) intenta construir una comedia surrealista que se establece con bromas como la ridiculización de la profesión de ella, “la prostituta”, el histerismo al que lleva la situación en la que se embarcan (que llega un momento que satura y molesta más que hacer gracia), y otras caricaturas sociales como “los rusos”, “los armenios” o los “muerdealmohadas”.

Ciertamente es una gran oportunidad perdida la de Baker, que plantea un tema muy interesante con una primera hora de metraje bien planteada desde el punto de vista de guion y de diseño artístico, en la que los bailes de las chicas, su manera de desenvolverse y las luces de neón crean una atmósfera que apunta a un empoderamiento ¿real? de las mujeres, concretamente de Ani, la protagonista. El problema es que más adelante todo eso se diluye con una arrolladora y desastrosa comedia vulgar cargada de verborrea sexista y racista que tiran todo por la borda. Hasta que llega el final y vuelve a plantear el gran tema: Anora se frustra al ver todo lo que ha sucedido, pero ya es demasiado tarde para poder desarrollarlo y nos quedamos ahí, con las ganas de que ese final hubiera sido el principio de la historia. Por suerte o por desgracia, se podrá ver en cines a partir del 31 de octubre.

Tarde de soledad

El flamante director catalán Albert Serra compite por primera vez por la Concha de Oro con su documental sobre la tauromaquia Tardes de soledad, un acercamiento a las exitosas corridas de Andrés Roca Rey, el joven torero peruano que arrasa en el coso. Con material grabado en 14 corridas de toros diferentes, finalmente Albert Serra y Artur Tort Pujol deciden incluir las pertenecientes a Madrid, Sevilla, Bilbao y Santander. El resultado es una cinta que combina los momentos de encuentro y conversación en el coche de Roca Rey con su cuadrilla, y los momentos más impactantes de sus faenas con el toro, con unos planos llamativamente cerrados y fracturados. Serra ha presentado la película este lunes, 23 de septiembre, en el Festival, para lo que participó con su equipo en el pase de la tarde en el Kursaal y ofreció una rueda de prensa previamente.

El director Albert Serra ha presentado este lunes en el 72 Festival de Cine de San Sebastián “Tardes de soledad” junto a sus productores

El director de Pacifiction admite que le apetecía hacer un documental, que ya lo tenía en mente desde antes de estrenar su obra culmen en 2022, ha explicado. “Yo tenía admiración por directores chinos, rusos, gente que retrata realidades serias”, y surgió un interés por grabar un documental sobre la tauromaquia. El proyecto fue tomando forma gracias al máster de cine documental de la Universidad Pompeu Fabra y a la ayuda de los matadores Andrés Roca Rey y Pablo Aguado. El objetivo de la película, ha destacado Serra, siempre fue “olvidarse un poco de todos los ‘a priori’ y buscar con la cámara cosas que se ven con la cámara que probablemente con los ojos humanos no pueden entenderse”.

¿Se puede la película en favor de la tauromaquia? Según el propio director, “sí que se posiciona un poco en el sentido de que se nota un cierto aprecio por la tauromaquia indiscutible, pero al mismo tiempo la honestidad del relato hace que todos los elementos, especialmente los más interesantes, estén allí y estén con toda su expresividad y viveza, también con un poco de ironía, ¿por qué no?”

El lugar de la otra

La directora Maite Alberdi, posa tras presentar su película “El lugar de la otra”, que compite en la Sección Oficial del 72 Festival de Cine de San Sebastián

La cineasta chilena Maite Alberdi, que ganó el Goya a la Mejor Película Iberoamericana con La memoria infinita también presentó su nueva película El lugar de la otra este lunes durante la 72ª edición del Festival de Cine de San Sebastián. Producida por Netflix y bajo los mandos de los hermanos Larraín, la película explora mediante la ficción la complejidad de las relaciones humanas y las identidades individuales. La trama gira en torno a un intercambio de roles entre dos mujeres cuyas vidas están marcadas por circunstancias diferentes, pero que se ven obligadas a enfrentar dilemas personales similares. Con un estilo documental íntimo, Alberdi ofrece un relato visual que invita a reflexionar sobre los sacrificios, las emociones y las decisiones que definen la existencia de cada persona. La película sobresale por su original narración, así como la estética visual que caracteriza a Alberdi, reafirmando su lugar como una de las voces más importantes del cine contemporáneo latinoamericano.

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