El deseo moribundo del personaje de Lupita Nyong’o en Un Lugar Tranquilo: Día Uno es comer pizza, pero unos violentos extraterrestres llegan para complicar su última cena. Sin duda, Nyong’o es una de las actrices más aclamadas de la actualidad desde su papel en 12 años de esclavitud y un pilar de algunas de las franquicias más importantes de Hollywood. “Me encuentro regresando una y otra vez al horror debido a los personajes que me ofrecen. La naturaleza humana se intensifica en el horror y eso hace que sea interesante explorar esos personajes”, admite en una entrevista realizada con Artículo14.
La nueva reina del grito triunfa en un género donde las mujeres suelen ser protagonistas. Según un estudio realizado el año pasado, el 43 por ciento de las películas de terror están protagonizadas por mujeres. “Hemos visto películas de desastres sobre la participación militar, personas que intentan rescatar a un miembro de la familia o escapar de la ciudad. Pero Sam, mi personaje, no tiene las mismas prioridades que tendría otra persona. Eso hace que su aventura sea inesperada”.
Lupita Nyong’o es la protagonista de ‘Un lugar tranquilo: día uno’
Un Lugar Tranquilo: Día Uno es la tercera entrada de la franquicia Un Lugar Tranquilo, creada por John Krasinski. La precuela de la invasión alienígena marca un regreso al género de terror para Lupita Nyong’o, quien protagonizó la película de terror de Jordan Peele, Nosotros. En esta ocasión, la historia transcurre en la ciudad de Nueva York el primer día de la invasión contra la población humana.
Michael Sarnoski, realizador de Pig, reemplaza a Krasinski, quien dirigió las dos películas anteriores, ambas protagonizadas por Emily Blunt como una madre que lucha para proteger a su familia de feroces criaturas reptiles que son hipersensibles al ruido. Nyong’o, de 41 años, dice que admira cómo Sarnoski cuenta “esta historia visceral con violencia y ternura partes iguales”.
“No tenemos permiso para sentir miedo”
La estrella da vida a Sam, una mujer que trata de llegar a Harlem. En su periplo conoce a Eric y juntos se aventuran hacia su antiguo barrio, donde ella anhela visitar la pizzería y el club de jazz de su juventud. “Este género nos ayuda a ejercitar emociones de las que, de otro modo, huiríamos la mayor parte del tiempo; no tenemos permiso para sentir miedo abiertamente en nuestra vida real”, dijo Nyong’o. A pesar de su entorno metropolitano, Día Uno cuenta una historia aún más íntima que las dos primeras películas.
La amistad entre Eric y Sam es la base de la película, ya que se ayudan mutuamente a enfrentar la muerte y reconectarse con su yo pasado. “La compasión es lo más bello del mundo. La compasión por uno mismo y por los demás. Ese tipo de belleza me llena el corazón y me alimenta el alma. Es importante recordar el espíritu de aquellos que han llamado nuestra atención, porque eso es algo muy hermoso. Yo espero que mi presencia en el cine, en películas como Día Uno, en revistas, en periódicos, pueda inspirar a jóvenes que como yo quieren vivir una aventura similar a la mía. Uno puede sentirse válido por su belleza física, pero es muy importante atender nuestros sentimientos interiores, porque esa es una belleza sin sombras”.
Lupita Nyong’o y Joseph Quinn en la première en Nueva York de ‘Un Lugar Tranquilo: Día Uno’
Una película catártica
Junto a la actriz, en pantalla aparece Joseph Quinn, quien saltó a la fama como Eddie Munson en la serie de Netflix Stranger Things y aparecerá en las próximas películas de Ridley Scott Gladiator II y Warfare, de Alex Garland. “Estoy en un momento de mi vida decisivo en el que necesito un poco de tranquilidad. Estoy buscando un lugar tranquilo”, reveló el actor.
Por su parte, Lupita Nyong’o reconoce que se esconde del ruido del mundo en su casa de Los Ángeles. “Mi lugar tranquilo está en mi casa, donde puedo hasta oír el mugir de las vacas. Con la locura de esta vida es importante tener algo concreto”. La película habla también de temas como la aceptación y dolor, que resultaron curativos para Nyong’o. La actriz protagonizó Black Panther con Chadwick Boseman, quien murió en 2020 a los 43 años después de una dura batalla contra el cáncer de colon.
La actriz filmó Día Uno justo después de Wakanda Forever, la secuela de Black Panther. “En esa película, estábamos enfrentando la pérdida de Chadwick Boseman, cuya marcha me sacudió hasta lo más profundo. Cuando me ofrecieron Día Uno estaba pensando en la mortalidad y la trama del guion me ayudó a encontrar respuestas a las preguntas que me estaba haciendo tras la pérdida de mi gran amigo. Fue aterrador tener que vivir en ese lugar frágil rodando esta película. Ha sido algo catártico porque me ha ayudado a entender que siempre habrá algo por lo que valga la pena vivir. Es difícil para nosotros, como seres humanos, recordar que somos mortales. Pero es bueno que te lo recuerden en momentos clave de tu vida para no darlo por sentado. Debemos recordar que hay que dar importancia a los pequeños placeres… como ir a comer una pizza”.