El apagón que ayer dejó sin electricidad a gran parte de España, Portugal y zonas del sur de Francia ha puesto de manifiesto lo frágil que puede llegar a ser nuestro sistema eléctrico. Sorprendentemente, una serie española estrenada hace tres años ya anticipó este escenario. Se trata de Apagón, una producción de Movistar Plus+ que adapta el pódcast de José A. Pérez de Ledo.
El origen de ‘Apagón’ (2022) y su inquietante predicción
La guionista Isabel Peña, habitual colaboradora de Rodrigo Sorogoyen, explicó en su momento que “la posibilidad de que ocurra un apagón por una tormenta solar es absolutamente real, por desalentador que pueda parecer”. Estas palabras, pronunciadas durante la promoción de la serie de Movistar+, adquieren hoy un cariz casi profético ante los acontecimientos recientes.
En particular, el primer capítulo de la serie, titulado Negación y dirigido por el propio Sorogoyen, se centra en el momento en que las autoridades reciben la alerta de una tormenta solar capaz de provocar un apagón generalizado. Así como en la ficción, la caída de la energía de ayer ha probado que la distancia entre lo distópico y la realidad puede ser mucho menor de lo que imaginamos.
El primer episodio de Apagón tenía un objetivo claro, según detalló Isabel Peña: “Queríamos que este fuera el capítulo de los pasillos y que la teoría de lo que va a pasar después quedara bien explicada”. Y así lo hicieron, mostrando con precisión cómo los comités de expertos se enfrentaban al desafío de gestionar una catástrofe inminente.
El paralelismo entre la ficción y lo vivido durante el apagón real es inevitable. Las escenas de reuniones tensas y decisiones apresuradas evocan las imágenes que muchos ciudadanos imaginaron este lunes, mientras el país entero trataba de adaptarse a la ausencia de electricidad.
El reflejo de la sociedad en la serie de Movistar+
Una de las secuencias más impactantes de Apagón es la del tráfico colapsado en Madrid, sin semáforos y con conductores desesperados intentando cruzar la ciudad. La angustia retratada en ese capítulo recuerda inevitablemente al caos circulatorio que provocó la caída energética en las principales ciudades españolas.
El drama familiar que atraviesa el personaje de Ernesto, interpretado por Luis Callejo, añade otra capa de realismo a la serie. En Apagón, Ernesto debe lidiar con la situación desesperada de su padre enfermo en el hospital. Una preocupación que muchos ciudadanos compartieron este lunes, temiendo por los más vulnerables ante la falta de suministro eléctrico.

Otro de los elementos que conecta la serie con el apagón real es la demora en la reacción de las administraciones públicas. La serie de Movistar+ pone el foco en la lentitud de las decisiones y en el coste humano que puede tener la inacción. Esta crítica implícita también resuena con las voces que, tras la caída de la eléctrica, han cuestionado la preparación y la rapidez de respuesta de las autoridades.
El apagón de esta semana ha evidenciado muchas de las preocupaciones que la serie española ya planteaba. Desde la dependencia crítica de la electricidad hasta la falta de protocolos eficaces para una emergencia de esta magnitud.