La investigación sobre la muerte del actor Gene Hackman, de 95 años, su esposa Betsy Arakawa, de 63 años , y uno de sus perros ha dado un giro inesperado. Aunque en un inicio se descartó la posibilidad de un crimen, las autoridades ahora consideran que las circunstancias son lo suficientemente sospechosas como para profundizar en el caso.
Según el informe policial, la puerta principal de la casa estaba abierta y sin seguro. Al ingresar, los agentes encontraron dos perros vivos, uno suelto dentro de la propiedad y otro cerca del cuerpo de Betsy Arakawa, mientras que un tercer perro fue hallado sin vida dentro de un armario en el baño. También había un calentador movido, un frasco de pastillas abierto y varias píldoras esparcidas en el suelo. El cuerpo de Hackman estaba en otra habitación, sin signos aparentes de violencia.
Los bomberos de Santa Fe y la compañía de gas descartaron una fuga de monóxido de carbono como causa de muerte, aunque señalaron que, de haber habido una, el gas pudo haberse disipado debido a la puerta abierta antes de la llegada de las autoridades.
El estado de los cuerpos sugiere que llevaban varios días sin vida. Betsy Arakawa fue hallada en el baño con signos de descomposición avanzada y momificación en manos y pies. Gene Hackman, por su parte, yacía en el vestíbulo con su bastón y gafas cerca de él. Ninguno presentaba heridas de bala o signos de violencia física.
Según trabajadores de mantenimiento, la pareja no había dado señales de vida en al menos dos semanas. Por ello, los investigadores buscan examinar la casa a fondo, incluyendo muebles, paredes y sistemas de tuberías y gas, para descartar cualquier otra causa.
Elizabeth, hija del actor, dijo a TMZ que la familia aún no sabe qué ocurrió, aunque sospechan que pudo tratarse de una intoxicación por monóxido de carbono. Mientras tanto, la policía ha asegurado a los vecinos que no hay riesgos en la zona y que seguirán con la investigación para esclarecer lo sucedido.