Carlota Álvarez Basso siempre fue una mujer emprendedora y la mención en 2018 como una de las Top 100 Mujeres Líderes de España lo demuestra. La gallega es una figura relevante en la gestión cultural del país: puso en marcha el departamento de Audiovisuales del Museo Reina Sofía, donde trabaja actualmente; se convirtió en la primera directora y gerente del Pazo de Congresos e Exposición de Pontevedra (actual Pazo da Cultura de Pontevedra); diseñó, puso en marcha y fue la primera directora del Museo de Arte Contemporáneo MARCO de Vigo; dirigió los Proyectos de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales del Ministerio de Cultura español (SEEC), y ha sido directora del centro cultural Matadero Madrid, entre otros proyectos.
En marzo de 2018, en medio de la explosión feminista en nuestras calles con motivo del 8M, Álvarez Basso y el documentalista y programador Diego Mas Trelles fundan el Festival de Cine por Mujeres, para hacer patente que las mujeres directoras hacen largometrajes de calidad, ya sean de ficción, documental o de animación, en todos los géneros: comedias, policiales, guerra, terror, ciencia ficción, aventuras. En la semana en que se celebra la séptima edición del certamen, entrevistamos a Carlota Álvarez Basso en exclusiva.
¿Cómo nace el festival y cómo evoluciona hasta hoy?
Diego y yo nos dábamos cuenta de que año a año había muchas películas importantes de directoras mujeres que no llegaban a distribución comercial en España y que habían sido premiadas en festivales como Cannes, Locarno, Sundance, etc. Entonces pensamos en hacer un festival de cine por mujeres; fue justo antes del #MeToo. Nos costó un poquito encontrar financiación el primer año, se celebró en marzo del 2018, imagínate, con todas las manifestaciones en la calle. Así que empezamos a buscar financiación, fue difícil, pero inmediatamente llega el Me too, y claro todas las instituciones se quieren subir a esa ola de feminismo y nosotros teníamos el proyecto ahí, en salas. El primer año fue una edición muy discreta, ocho salas y veinticinco largometrajes, no está mal. Ahora somos setenta largometrajes y diecinueve salas, hemos crecido un montón, pero desde el primer momento fue súper bien. Yo, en principio iba a estar por un año, y me he quedado siete. Me parece que es un festival muy necesario realmente, cada año tengo la certeza de que es más y más necesario. Este año que hemos empezado en la competición española con nueve nueve pases vendidos completos y agotados, al día siguiente de inaugurar el Festival (porque pusimos las entradas una semana antes) me reconfirma que es necesario. Muchas de las películas son reposiciones, muchas de esas películas están en este momento en distribución comercial en sala. ¿Qué sucede? Que nosotros damos un toque especial en tanto en cuanto, primero están comisariadas, las diez mejores películas dirigidas por mujeres este año, y yo creo que el público nos respalda, porque los festivales pequeños tenemos esa función, de hacer un comisariado de películas de a lo largo del año.
¿Por qué es importante hoy mostrar el cine hecho por mujeres?
Lo cierto es que hay muchísimas películas dirigidas por mujeres que ganan festivales fuera y que no vienen a España: si no las trajéramos nosotros, no vendrían. De forma que, de hecho, la competición internacional son todos estrenos. Estas películas están dirigidas por mujeres y muchas veces son diversas. El año pasado, por ejemplo, trajimos la primera película de una directora mongola y al terminar el festival, Filmin la compró, pero esa película probablemente nunca hubiera llegado a Filmin si no hubiese sido porque estuvo previamente en el Festival de Cine por Mujeres y durante el festival tuvo 7.000 visualizaciones. Somos conscientes de que hay muy buen cine dirigido por mujeres que no llegaría a España si no fuera por nosotros. La película con la que estrenamos hoy, en la competición internacional, de Anaïs Tellenne, francesa, L’Homme d’ argile, no tiene distribución, a lo mejor la encuentra ahora, pero probablemente no la tendría. Es primera dirección de una directora joven, cuando la llamamos para decirle que la estábamos seleccionando, se puso como loca, nos dijo: ¿cómo os habéis fijado en mí?
¿Detectáis que en España hay un problema para que las mujeres hagan cine y para que se distribuya el cine que hacen?
Yo creo que las cosas han mejorado mucho desde que empezamos el festival hasta ahora. Me acuerdo que el el primer año del festival era muy fácil encontrar películas premiadas para un festival chiquitito como nosotros, o que ninguno de los grandes festivales de España -digamos San Sebastián, Málaga, Sevilla, Valladolid- tenían el foco realmente en el cine dirigido por mujeres, las distribuidoras internacionales, los agentes de ventas, no tenían el foco en el cine dirigido por mujeres, sin embargo, ahora ya existe una pestaña que se llama “Cine dirigido por mujeres”. ¿Eso qué quiere decir? Que los programadores están buscando cine dirigido por mujeres. ¿Qué quieren decir para nosotros? Que es mucho mejor en tanto en cuanto ya no tenemos que rebuscar en todos los festivales, sino que ya hay una pestaña que nos dirige hacia esas películas, pero al mismo tiempo es mucho más difícil, porque las grandes películas dirigidas por mujeres ya se las llevan. Entonces para nosotros es como buscar una aguja en un pajar. Antes todo el pescado era nuestro y ahora ya no; sin embargo, eso nos permite encontrar joyas, porque los grandes festivales están para los grandes nombres.
Nosotros estamos trayendo muchas películas de primera dirección, novel, de mujeres, que son maravillosas y que ponemos en la competición internacional o en el panorama internacional porque aquellas que ganan festivales fuera no pueden competir porque ya han ganado el Festival de Cannes, por ejemplo. Inauguramos el “Panorama Internacional” con la ganadora del Gran Premio del Jurado en el Festival de Cannes (All We Imagine as Light, de Payal Kapadia), no la podemos poner a competir esa película en paridad con otras películas muy buena pero que todavía no han ganado festivales, entonces las ponemos en el “Panorama Internacional”. La película Globomanía, por ejemplo, que es una película que ha recibido veinticinco premios y está en todo el mundo, la traemos a Madrid, pero no la ponemos a competir, porque probablemente ganaría. Entonces, las que son ganadoras de festivales las ponemos en “Panorama internacional”. Y después, la “Competición española”, que tenemos todo vendido desde el primer día del festival, excepto una película, que es documental, para las de ficción se han vendido todas las entradas, en general son reposiciones, y lo que hacemos con la competición española es una selección de las mejores películas juicio de nuestro comité, somos ocho programadores viendo películas a largo de todo el año.
¿A qué tema habéis dedicado esta edición?
Cada año hacemos un especial dedicado a la cinematografía de un país, este año tenemos el “Focus Austria”, que es un país que tiene una cinematografía y una industria dirigida por mujeres muy potente históricamente. Programamos ocho películas en diferentes categorías; en la competición internacional son casi todos estrenos en España, tenemos diecinueve largometrajes en esta sección, y en la competición española tenemos diez estrenos en Madrid. En la sección “Focus Austria” tenemos cinco estrenos en España y uno en Madrid. La película más importante que tenemos este año es la ganadora del Gran Premio del Jurado en Cannes: la hindú All We Imagine as Light, de Payal Kapadia.
¿Cómo llegan las películas al Festival de Cine por Mujeres?
Nosotros somos programadores: El codirector, Diego, ha trabajado en el Festival de Sevilla, en Documenta Madrid, DOC Barcelona. Ambos estamos afiliados a plataformas de películas internacionales, leemos revistas, vamos a festivales, estamos todo el año buscando películas. En realidad, lo que hacemos es dirigirnos hacia las películas que premian y que son de mujeres. A partir del momento en que son premiadas, empezamos a negociar los derechos, no necesariamente las conseguimos, muchas veces sí. También buscamos a través de las directoras, nosotros tuvimos, por ejemplo, dos aciertos muy grandes en años anteriores. Por ejemplo, la película que ganó en San Sebastián, Los reyes del mundo, ganó en San Sebastián en septiembre de 2022 y nosotros la compramos en febrero de ese mismo año porque conocíamos a la directora y sabíamos que estaba haciendo una nueva película y la llamamos. La película O Corno también, la negociamos en mayo y ganó en septiembre. Es decir, tenemos un criterio de excelencia que antes de que sean premiadas por un jurado (del calibre de San Sebastián), nosotros ya las hemos comprado, de forma y manera que estrenamos estas películas en Madrid.
¿Qué criterios establecéis para seleccionar las películas?
Excelencia, excelencia y excelencia. Realmente buscamos la paridad, somos ocho expertos que seleccionamos películas de muy alto nivel, seleccionamos películas y que hayan ganado festivales. Lo que queremos demostrar, precisamente, es que las mujeres pueden dirigir buenas películas en todos los géneros: de ciencia ficción, de terror, de comedia, de drama, nuestro criterio es la diversidad.
Organizáis actividades de formación, espacios de encuentro y debate, coloquios, ¿cómo esperáis que el festival impacte en la sociedad?
Desde la primera edición, nuestro objetivo de visibilizar el cine dirigido por mujeres crea referentes, creemos que el conocimiento crea reconocimiento, por lo tanto queremos que la gente comience a tener referentes mujeres, que por una cuestión de visibilidad haya mujeres jóvenes, que sepan que eso se puede hacer: Se puede llegar a ser directora, foquista, montadora, compositora, podemos llegar a hacerlo bien en todos los ámbitos de de producción de valor de cine y efectivamente, visibilizar a estas grandes profesionales que muchas veces sus obras no se conocen, y las queremos dar a conocer. Por tanto, desde el primer momento hemos creado actividades formativas en el espacio de Fundación Telefónica, que es uno de los grandes patrocinadores del festival y también desde la primera edición hacemos una mesa internacional que se llama “¿Cómo llegaste hasta aquí?” para que las directoras jóvenes puedan aprender de la trayectoria de otras internacionales que ya están ahí.