En un festival de cameos, Deadpool y Lobezno es una meta película cargada de indulgencia y un poco a la pata coja frente a sus dos entregas anteriores. Sin embargo, en este mano a mano entre Ryan Reynolds y Hugh Jackman se cuela una actriz que está revolucionado Hollywood con su nihilismo. Hablamos de Emma Corrin, la ganadora del Emmy y del Globo de Oro por su papel de la adolescente Princesa Diana en la serie The Crown.
Británica, recién salida de las series Pennyworth y Un asesinato en el fin del mundo, Emma Corrin hace su debut en el MCU como Cassandra Nova, una mutante ultra villana con poderosos poderes telepáticos que es la hermana gemela del fundador de los X-Men y líder, el Profesor Charles Xavier, interpretado por Patrick Stewart y James McAvoy en las películas de X-Men.
Emma Corrin en su personaje de Cassandra Nova
Emma Corrin habló en la rueda de prensa del filme y dijo que el efecto de la historia de los hermanos en Cassandra fue lo que más la impactó. “Si algo despertó mi interés para unirme al universo de Deadpool fue tener la oportunidad de dar forma a Cassandra. Eso fue la clave para mí, porque creo que el término ‘villano’ es genial, y todos sabemos que los villanos son los que más se divierten. Quise encontrar los motivos que la empujan a su comportamiento para empatizar con ella. Su relación con su hermano se hace patente en esta película a través de sus interacciones con Lobezno, que explora, obviamente, la historia de los X-Men. Había mucho margen para crear algo único que es, en definitiva, lo que busco como actriz”, reveló Corrin.
A esta sorprendente ‘meta’ película, la tercera entrega de Ryan Reynolds como el justiciero Deadpool, se une Hugh Jackman como Lobezno. La última vez que lo vimos, había fallecido en el conmovedor Logan de 2017. Deadpool y Wolverine es un evento cinematográfico cruzado donde, gracias al metaverso, se logra dar un giro a la narrativa del Universo Marvel fusionando los X-Men con Los Vengadores, además de volver a dar vida a Lobezno.
“No se parece a ninguno de los personajes que he interpretado”
En los cómics, Cassandra intentó estrangular a su hermano gemelo en el útero con su propio cordón umbilical, falló y luego nació muerta después de que él la atacara psíquicamente. Pero la criatura sobrevivió como materia celular y se aferró a la pared de una alcantarilla durante décadas, reconstruyó su forma física y perfeccionó sus rasgos humanos para regresar en busca de venganza. “Me parece alucinante la idea de crecer en la pared de una alcantarilla. Ningún otro personaje tiene un origen así. Cassandra no se parece a ninguno de los personajes que he interpretado hasta la fecha. Se ha hecho así misma, ha crecido sin hogar y sin identidad, es fascinante”, continúa Emma Corrin.
Emma Corrin, en la presentación de ‘Deadpool y Lobezno’
Su primera reunión fue con el director Shawn Levy, el actor y productor Ryan Reynolds y el jefe de Marvel, Kevin Feige. Los tres estaban ansiosos de contratar a un actor inglés para esta cinta. “No tenía ningún conocimiento o experiencia previa real con las películas de Marvel. Había visto las dos entregas anteriores de Deadpool y me encantaron. Para dar forma al papel, tuve que confiar en Shawn y Ryan y en su propuesta, en lo que me prometieron que sería el personaje. Y a su vez, como ellos me vinieron a buscar, pensaban en mí como la persona adecuada para el personaje”.
Las interminables películas y series de televisión con referencias cruzadas en los mundos de los superhéroes han ido desgastando a la audiencia hasta el punto de que los últimos estrenos no han conseguido resultados positivos. Desde Marvel esperan que Deadpool y Lobezno cambien esa dinámica, aunque ya con la preventa en Estados Unidos se esperan unos números de taquilla prepandemia.
Escabrosa, escatológica y divertida, si eres amante de los cómics, la cinta 34 de la saga Marvel es un juego desenfrenado que elimina los típicos estereotipos de superhéroes con Ryan Reynolds rompiendo alegremente la cuarta pared al hablar directamente a la cámara. “Creo que Ryan Reynolds es un genio porque ha creado su propio género cinematográfico”, admite la intérprete británica.
La intérprete británica Emma Corrin
Para convertirse en Cassandra, Emma Corrin usó una gorra calva y dedos ortopédicos, una experiencia “humillante” porque no podía hacer mucho por sí misma con ellos. “Siempre había un momento en el maquillaje en el que me decían que dejara el teléfono, porque tenía dedos protésicos que me impedían hacer nada. Ni siquiera podía ir al baño sola, fue una lección de humildad”. Si bien los dedos falsos fueron un desafío, ayudaron a Emma Corrin a asumir un papel que tiene poderes telepáticos y telequinéticos, entre muchas otras habilidades. “La extensión de sus manos cambió la forma en que movía los brazos. Me fueron muy útiles porque todo el poder de Cassandra se manifiesta en sus gestos”.
Esta galesa de 28 años se presenta con los pronombres elle y se ha declarado no binarie ante sus seguidores en Instagram. “En mi opinión, el género es fluido, no es algo fijo. No sé si alguna vez lo será; puede que siempre haya algo de fluidez en mí”, concluyó.