El Festival de Málaga vuelve a ser un punto clave en la carrera de Elena Martín Gimeno. La directora y actriz, que en 2017 debutó en el certamen con Júlia ist, película premiada en la sección Zonazine, ha regresado esta edición para recibir el Premio Málaga Talent-La Opinión de Málaga. “El primer recuerdo que tengo es llegar en la furgoneta con el equipo, y no me esperaba que nada de lo que iba a pasar aquí fuera tan importante para nosotras”, ha recordado con emoción.
Elena Martín Gimeno ha destacado lo significativo que es para ella recibir este reconocimiento dentro de la industria. “Para mí, esto es un voto de confianza. Sentirse respaldada por el propio sector es algo súper importante”, ha asegurado. Aunque su trayectoria es aún corta, se siente afortunada por las oportunidades que ha tenido y el camino que ha recorrido en estos años.

La película ‘Creatura’, de Elena Martín Gimeno
Durante su intervención en el Salón Rossini del Teatro Cervantes, donde ha conversado con el director del festival, Juan Antonio Vigar, la cineasta ha reflexionado sobre la mirada con la que se observa su cine y las dificultades de abordar ciertos temas en pantalla. “Siento que existe un machismo muy estructural de perspectiva, una moral muy rígida de lo que es apto y lo que no, lo que es interesante y lo que no”, ha señalado. En su opinión, las películas realizadas por mujeres siguen siendo encasilladas en lo íntimo, mientras que otros géneros son percibidos como universales. “Todavía hoy se reduce la mirada femenina a algo íntimo y se considera una película de gánsteres algo universal. Es muy cansado y poco interesante”, ha reflexionado.
Este desafío ha sido una constante en su trabajo, especialmente en Creatura, premiada en Cannes, donde aborda la sexualidad femenina con crudeza y sin concesiones. Según Elena Martín Gimeno, la sociedad todavía tiene una mirada “muy conservadora” y ciertas historias “asustan muchísimo”: “La mirada todavía es muy conservadora y, según qué cuentas, asusta muchísimo. Hay una moral muy rígida de lo que es apto y lo que no, lo que es interesante y lo que no”. Sin embargo, el éxito de sus películas demuestra que hay un público que busca este tipo de relatos y que el cine tiene la capacidad de desafiar los discursos predominantes.
Además de su faceta como directora, Elena Martín Gimeno ha compaginado en varias ocasiones la interpretación con la escritura y la dirección. En Creatura, asumió ese triple papel, pero ha confesado que no es una experiencia que repetiría fácilmente. “Me gusta mucho también participar en las historias de los demás”, ha comentado, aunque ha admitido que el nivel de exigencia de desempeñar tantas funciones al mismo tiempo es un reto complejo.

La actriz, guionista y directora Elena Martín Gimeno debutó como directora con el largometraje ‘Julia ist’ (que también protagonizó)
Sobre sus próximos proyectos, ha adelantado que se encuentra en una fase inicial de escritura y que tiene interés en explorar nuevas narrativas. “Tengo muchas ganas de explorar el género. No sé de qué manera, pero estoy explorando el universo violento”, ha señalado sin dar más detalles.
Juan Antonio Vigar ha elogiado su versatilidad y la ha descrito como una cineasta “renacentista”, capaz de contar historias desde diferentes ángulos. La cineasta, por su parte, ha explicado que lo que más le interesa es la comunicación en sí misma. “A veces siento que hay historias que lo mejor que puedo hacer es comunicarlas desde un lugar y otras desde otro”, ha señalado.
Con este premio, Elena Martín Gimeno consolida su posición como una de las cineastas más prometedoras del cine español, reafirmando su compromiso con un cine que desafía convenciones y rompe barreras.