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Agnès Varda: la mirada feminista de la Nouvelle Vague

La distribuidora Avalon recupera la filmografía de la “abuela de la Nouvelle Vague”, Agnès Varda, la única autora del movimiento cinematográfico en la vanguardia de finales de los años 50, dominado por hombres

El “Universo Varda” se enmarca en una edición de Avalon con el apoyo del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) y Filmoteca de Cantabria Mario Camus, y que coincide en el tiempo con la exposición “Agnès Varda: Fotografiar, filmar, reciclar” que el CCCB dedica a la cineasta. La iniciativa engloba dos formatos: Por un lado, el ciclo de cine “Universo Varda” ofrece un total de 15 largometrajes y 15 cortometrajes de la cineasta que se proyecta este verano y parte del próximo otoño en diferentes salas y museos españoles (más información al final del artículo) y por otro lado, se pone a la venta el Pack Universo Agnès Varda, que incluye cinco cajas con un total de diez discos Blu-ray con los mismos largometrajes y cortometrajes que se proyectan en el ciclo, más un libro de 152 páginas escrito por Imma Merino, con fragmentos de la entrevista realizada a la directora.

Agnès Varda, cineasta francesa precursora en alzar la voz por los derechos de las mujeres y abanderada de la revolución sexual de mayo del 68, aborda un amplio abanico de temas en sus películas. Desde la cotidianidad de los habitantes de un pueblo, un barrio o una ciudad (Daguerréotypes, 1975) y las estampas costumbristas que dejan los detalles en sus calles, plazas, casas, puertos, playas (Las playas de Agnès, 2007) hasta un enfoque más sociológico y psicológico de las personas, donde se abre un gran campo de miradas, en el contexto de una búsqueda feminista activista: Las relaciones de pareja y de matrimonio unidireccionales, predominancia y poder del hombre, la frustración de la mujer para desarrollarse por sí misma, el proceso de enajenación y marginación de una mujer divorciada (Documenteur, 1981).

La destrucción de la familia, generada por conflictos entre el marido y la mujer, era otro tema al que acudía con frecuencia, como vemos en La felicidad (1964), tercer largo en color de Varda, o en Una canta, otra no (1976), un musical feminista ambientado en el Paris de 1962. Sobre la mujer, no podemos dejar de mencionar el cortometraje Women Reply, proyectado en 1975, el año de la mujer. La cadena Antenne 2 pide a siete mujeres cineastas que contesten en siete minutos la pregunta: “¿Qué es ser mujer?”. Agnès Varda contesta con un panfleto cinematográfico, que años después todavía sigue influyendo en múltiples obras audiovisuales y publicitarias en Occidente (Dove, Benetton, etc).

A Varda también le gustaba entrar en diálogo con otros artistas, era una gran admiradora de compañeros contemporáneos que trabajaron en el cine de género, como Jacques Demy, o que apoyaban la liberación de la mujer, como Jane Birkin. Así, Angès homenajeó a la cantante a punto de cumplir los 40, en Jane B. par Agnès V. (1987), una mezcla de entrevistas y secuencias donde Birkin tiene libertad creativa e interpreta diversos papeles, incluyendo a una musa clásica, Calamity Jane, a una femme fatale, la Jane de Tarzán, y a Juana de Arco. Asimismo, dedicó parte de su trabajo a Demy con Las señoritas cumplen 25 (1992), documental sobre el conocido film del cineasta francés Las señoritas de Rochefort (1967) un delirante largometraje con fantasías en technicolor y nostalgia por las grandes estrellas de Hollywood. Después llegó Jacquot de Nantes, la película que narra la infancia de su colega Demy y de sus primeros pinitos en la realización audiovisual con la primera cámara adquirida, y el documental L’Univers de Jacques Demy (1994) “relativamente objetivo”, según Varda, sobre Jacques Demy como adulto y director. Los largometrajes Las criaturas (1965), Lions Love (1969), Kung Fu Master (1987), Las cien y una noches (1994) y otros títulos completan el ciclo.

Asimismo, Varda explora otros países con sus correspondientes culturas y tradiciones, la experiencia de la multiculturalidad en algunas ciudades como París, Los Ángeles o Cuba. En Mur murs (1981), que completa el díptico formado con Documenteur, contempla los murales de la ciudad de Los Ángeles y hace un retrato de la vías de expresión de la cultura chicana mientras se acerca a la multiculturalidad de la ciudad californiana. Asimismo, el cortometraje Black Panthers (1967), filmado en Oakland en torno a las reuniones organizadas por el partido de las Panteras Negras, generó un debate político que recibió mucha atención en Estados Unidos. Sobre Cuba, el cortometraje Salut le cubains (1963) recoge la colección de 1800 fotos que la autora captó en el país cuatro años después de la llegada al poder de Fidel Castro.

Dónde verlo

Hasta el 1 de agosto, el ciclo “Universo Varda” se puede ver en el Cine Golem de Madrid, así como en el Museo Reina Sofía (hasta el 31 de julio), Cine Broadway de Valladolid (9 de julio-27 de agosto), Filmoteca de Cataluña (19 de julio-27 de septiembre), Screenbox Lleida (29 de julio-9 de septiembre), Cine Avenida de Sevilla (1 agosto-12 septiembre) y a partir de septiembre llegará a Cines Zumzeig de Barcelona, Multicines Norte Vigo, Multicines Compostela, Cineteca Matadero de Madrid, IVAC – Universitat Jaume I, Filmoteca de Galicia CGAI, Cine Babel de Valencia, Filmoteca de Cantabria Mario Camus y Cine Albéniz Málaga.

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