La primera campaña Contra los Malos Tratos Gana la Ley data de 2006 y fue desarrollada por el Ministerio de Trabajo. Esta semana, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, presentó la campaña ¿Vas a hacer algo?, dirigida a los entornos de las víctimas de violencia de género. Bajo la presidencia de Pedro Sánchez, la dotación presupuestaria para estas campañas ha alcanzado cifras récord y acumula 45,77 millones de euros. Desde 2021, se prevé un gasto de siete millones de euros anuales y aunque la violencia de género constituye una de las las mayores campañas institucionales del Estado, no es la mayor de todas.
En 2024, representa la tercera más importante por detrás de las campañas de divulgación de la seguridad vial de la Dirección General de Tráfico (DGT), con una previsión de más de 11 millones de euros, y de las de Agencia Tributaria, que cuentan con nueve millones para sensibilización fiscal e información y asistencia para el cumplimiento de las obligaciones impositivas de los ciudadanos.
Este año, desarrollarán siete campañas, con una inversión de entre cuatro y diez millones y 17 campañas entre dos y cuatro millones de presupuesto. En total, estas 25 campañas suponen el 71,73% de la inversión total prevista, que alcanza los 138,29 millones de euros.
Para el año 2025, el Ejecutivo ha previsto una contratación anticipada, que estipula 5,96 millones de euros para violencia de género. Es la segunda mayor, por detrás de los 11,4 millones de la DGT.
En la era Pedro Sánchez, la dotación más baja correspondió a 2020 cuando a raíz de la pandemia se asignó una dotación específica de dos millones y se consignaron 3,25 millones a la campaña en general. Un año antes, que es cuando ya el nuevo Gobierno pudo diseñarla fue de 6,56 millones.
Desde 2007
Bajo la presidencia de José Luis Rodríguez Zapatero, impulsor de la primera Ley de Igualdad en 2007, se invirtieron 24,4 millones de euros en cuatro años en esta causa. En 2009, se consignó la partida más alta en toda su historia, ocho millones para una campaña continuada.
Campañas de violencia de género de 2009 y 2010.
Durante la etapa de Mariano Rajoy, se destinaron 18,73 millones a campañas específicas de violencia de género. En 2011, ya con la crisis económica su antecesor tuvo que recortar prácticamente a la mitad el importe de las campañas. En 2015, la dotación alcanzó los 4,65 millones y aumentó en 2018 un 45% hasta 6,7 millones de euros.
Largo recorrido
En la última década, se han presupuestado casi 60 millones en campañas contra la violencia de género. Sin embargo, el pasado año se alcanzó el triste récord de 58 mujeres asesinadas por violencia de género, un 18,36% más que en 2022 y la cifra más alta desde 2015 (59 víctimas). En paralelo, desde 2013, el número denuncias aumentó un 59,46%, hasta 399.166 mujeres.
En cuanto a dotación presupuestaria a este fin, la primera información es del año 2007, cuando bajo el Gobierno de Rodríguez Zapatero, a través de la Delegación especial del Gobierno sobre la Violencia de Género Información, se valoró destinar 2,82 millones. Desde entonces, todos los Ejecutivos de uno y otro color han incluido la sensibilización frente a la violencia contra las mujeres en sus Planes Institucionales de Publicidad.
Desde 2007, la dotación acumulada frente a la violencia de género suma casi 90 millones de euros (88,9 millones). Sin embargo, a tenor de las estadísticas y el goteo continuo de víctimas -en lo que va de año han fallecido 16 mujeres y están registradas 1.260 muertes en los últimos 20 años- cabe preguntarse si son efectivas estas campañas o qué tiene que cambiar para dar la vuelta a estas cifras.
Los expertos no son partidarios de establecer una relación directa entre las campañas y la evolución de las cifras de violencia de género, hay muchos matices que deben tenerse en cuenta, pero todos coinciden en reconocer que estas acciones sí han sido positivas en cuanto a sensibilizar a la sociedad de manera general frente a este problema.
El crecimiento constante en el número de denuncias es quizás el reflejo más claro de esa mayor concienciación social, especialmente en animar a las víctimas en el paso a denunciar.
Durante la presentación de la última campaña, la ministra subrayó el papel de la sociedad: “Es importante que los vecinos, los amigos, los profesionales con quienes interactuan la víctima y su agresor sepan que es importante mantener siempre la puerta abierta, para que las víctimas no sientan vergüenza ni culpa cuando den el paso de buscar ayuda. Un pequeño paso de cada una y cada uno de nosotros puede ser decisivo en la vida de muchas mujeres”.
El objetivo es seguir avanzado en el camino emprendido hace 20 años, cuando con la Ley orgánica de medidas de protección integral contra la violencia de género, la violencia de género salió del ámbito de la pareja y se mostró como un problema estructural de toda la sociedad. Dos décadas después, las acciones de sensibilización siguen siendo necesarias.