Cómo empezar un programa de entrenamiento de fuerza para mujeres principiantes

Entrenamiento de fuerza para mujeres De todas las mujeres que entrenan hoy en día, solo una media del 20% entrena con pesas, lo que no es de extrañar después de escuchar todas esas historias y bulos que aseguran que si...

Entrenamiento de fuerza para mujeres

De todas las mujeres que entrenan hoy en día, solo una media del 20% entrena con pesas, lo que no es de extrañar después de escuchar todas esas historias y bulos que aseguran que si una mujer entrena con pesas se pondrá muy grande y musculosa. Es una lástima que todavía circulen esos falsos mitos por la sociedad actual, porque lo único que se consigue con ello es que la gran mayoría de mujeres se pierdan todos los beneficios del entrenamiento de resistencia.

Por suerte, eso está cambiando y cada vez más mujeres recurren al entrenamiento de fuerza para llevar un estilo de vida más saludable y sentirse más fuertes, dejando atrás los miedos de convertirse en Hulk tras levantar unas cuantas mancuernas.

Entrenar con pesas no solo te ayudará a conseguir tus objetivos, sino que podría hacerlo más rápido que haciendo solo ejercicio cardiovascular.

 

Beneficios del entrenamiento de fuerza y del levantamiento de pesas

Perder grasa, aumentar masa muscular y fuerza, tonificación muscular, definición muscular, mantenimiento, etc. Sean cuales sean tus objetivos físicos, el entrenamiento de fuerza puede ayudarte a conseguirlos. Pero, si no estás del todo segura de si es lo más adecuado para ti, estos son los principales beneficios de entrenar con pesas:

Pérdida de grasa

Un entrenamiento con pesas duro e intenso aumenta el consumo de oxígeno horas e incluso días después del propio entrenamiento. El cuerpo aumenta el gasto calórico para conseguir una mayor oxigenación, lo que aumenta la tasa metabólica y se traduce en un mayor gasto calórico y una mayor pérdida de grasa.

Más músculo = más calorías quemadas

Entrenar con pesas de forma regular ayuda a ganar masa muscular magra, y esa masa muscular gestiona las calorías de forma más eficiente. Las contracciones musculares diarias (tanto de los entrenamientos como de las tareas diarias) contribuyen a la quema de calorías, y a mayor masa muscular, mayor gasto calórico.

Alivio del estrés

Cualquier tipo de ejercicio en general libera endorfinas que hacen que nos sintamos bien. Entrenar con pesas de forma regular también ayuda a controlar mejor el estrés, así que, si estás pasando por un período de estrés, una buena sesión de pesas puede ayudarte a relajarte.

El entrenamiento de fuerza y ​​resistencia también muestra beneficios en la memoria y la función cognitiva.

Aumento de la energía

El entrenamiento con pesas/fuerza ayuda a mejorar la calidad del sueño nocturno, lo que ayuda a descansar más durante la noche y a levantarse con más energía al día siguiente.

Después de un entrenamiento con pesas, por mínimo que sea, se produce un aumento de los niveles de energía. Por lo tanto, además de mejorar el estado de ánimo, también aumenta los niveles de energía.

Corazón y huesos sanos

El entrenamiento de fuerza/pesas es una muy buena forma de reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y, las personas que entrenan con pesas de forma regular tienen menos probabilidades de sufrir ese tipo de enfermedades.

Entrenar con pesas también puede mejorar la salud cardiovascular al reducir el colesterol malo y aumentar el colesterol bueno, lo que a su vez ayuda a reducir la presión arterial.

También es una buena forma de ayudar a frenar la pérdida de masa ósea y muscular durante el proceso de envejecimiento, algo especialmente útil para las mujeres posmenopáusicas que tienen un mayor riesgo de osteoporosis.

El entrenamiento de fuerza es una muy buena forma de ayudar a combatir la pérdida de masa ósea y reduce el riesgo de osteoporosis.

Reduce el riesgo de lesiones

El entrenamiento de fuerza no solo ayuda a fortalecer los músculos y aumentar la densidad ósea, sino que también reduce el riesgo de lesiones. Entrenar con pesas ayuda a fortalecer los tendones y tejidos conectivos, además de mejorar la estabilidad de las articulaciones.

También ayuda a corregir la mala postura, mejorar la forma de realizar las tareas diarias y prevenir lesiones de espalda.